La Formacion Del Estado Nacional

La conformación de un estado-nación supone el reconocimiento de soberanía política por parte de los otros estados, el establecimiento político, la creación de instituciones públicas, la generación de un sentimiento nacional, y la construcción de un mercado que permita la subsistencia.

Para lograr esto, fue necesario, como primera medida, la imposición de Buenos Aires sobre la Confederación, de esta forma la primera pasó a controlar el monopolio de la violencia, que le permitía reclamar obediencia a la totalidad de la población del “territorio nacional”. Y así encauzar el camino hacia la construcción del estado nacional. Es por esto que se habla de que dicha construcción comienza a partir del triunfo de Buenos Aires en la batalla de Pavón, ya que fue a partir de allí, con la asunción de Mitre a la presidencia, que se impone un poder centralizado, un poder nacional.

Sin embargo el sometimiento de las provincias a la dominación del poder central no fue fácil, y requirió de la implementación de diversos mecanismos de represión y cooptación. De un modo u otro, un determinado sector de poder adquiere control imperativo sobre el resto y lo lleva a ser una parte de una unidad más amplia. Y es este sector, en base al cual habrá de subordinarse el resto de los sectores, el que recibirá el nombre de poder central.

Durante el transcurso de las presidencia de Mitre (1862- 1868), Sarmiento (1868-1874) y Avellaneda (1874-1880), se fue consolidando poco a poco a el poder central. Para ello, fue necesario logra una integridad territorial, es decir determinar el ámbito espacial sobre el que debería ejercerse el poder político, conformar una identidad nacional, que englobara a los distintos pueblos dispersos en el territorio, y organizar un régimen político, entendiendo como tal un modo de elección estable de gobernantes capaces de formular decisiones autoritarias que comprometieran a la comunidad naciente.

Era necesario ordenarse para ordenar y regularizar el funcionamiento de aquellos instrumentos de dominación que haría posible el sometimiento de los diversos planos de interacción social. A partir de dicho momento comenzaba una lucha entre desiguales, en la cual una alianza de sectores sociales con aspiraciones hegemónicas pretendía resolver definitivamente un enfrentamiento de medio siglo, asumiendo por la fuerza el control político del país.

El centro de la escena política fue ocupado por una alianza de fracciones de una burguesía en constitución, implantada fundamentalmente en la actividad mercantil y agroexportadora, a dichas fracciones se vinculaban intelectuales que constituían una clase política, entre ellos se encontraban Alberdi y Sarmiento, cuyos proyectos a cerca de la consolidación del estado estaban inspirados en Europa y Estados Unidos, respectivamente. Además se encontraban, diversos sectores burgueses del litoral fluvial y del interior, con los que tenían lazos comerciales. Dicha coalición era débil y poco estable, ya que estaba compuesta por sectores sociales muy variados, lo que produjo que existieran constantes diferencias internas, que llevaron a que el liderazgo inicial de Buenos Aires se diluyera, y se incorporaran gradualmente las burguesías regionales.

Finalmente, Buenos Aires se subordina al poder central, luego de la victoria de Roca como presidente y su posterior victoria en las luchas armadas que se sucedieron. Así, luego de 18 años se consolidaría un “pacto de dominación” relativamente estable, y se irían consolidando los atributos materiales del Estado.

Gradualmente, las provincias fueron cediendo parte de sus autonomías política y poder para someterse al poder central, así el estado nacional fue concentrando,

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