SENTIMIENTO JUARISTA

SENTIMIENTO JUARISTA.

Apreciable auditorio, En el calendario cívico nacional sobresalen fechas que han determinado y determinan aún lo mejor de nuestra identidad mexicana , condensada en valores y principios que el tiempo se ha encargado de demostrar universales, poseedora de grandeza, como lo es la de un mexicano ejemplar , de un ser humano dotado de cualidades excepcionales, cuyo ejemplo de vida nos alumbra cada vez más fuerte, cada vez más profundo, Benito Juárez García, que nació un 21 de marzo de 1806, siendo hijo de Brígida García y Marcelino Juárez a quienes apenas alcanzó a conocer, ya que ambos murieron cuando cumplía 3 años de edad, salió de Guelatao, Oaxaca, para cumplir su sueño que fue la de trabajar por un México que ensanchara sus libertades, que construyera condiciones de justicia y de igualdad, de respeto y dignidad , la vida de Juárez es alfa y omega, porque el pensamiento juarista es el parteaguas histórico del liberalismo mexicano.

De Benito Juárez pueden extraerse muchas lecciones. Como pocos, de él podemos afirmar que el tiempo solo consigue realzar sus virtudes. No importa la época, Juárez es siempre un referente. Y mientras más difíciles sean las circunstancias nacionales, se hace más evidente su herencia.

Juárez fue un estadista de excepción, un hombre que con extraordinaria visión de futuro nos lego los valores y las instituciones republicanas que hoy nos distinguen en el concierto mundial, como un estado de liberales.

Respetar el derecho ajeno, conducirnos con verdad, ceñir nuestros actos a la ley, no sólo es una buena inversión, es un imperativo ético que Juárez consagró para nosotros como actuación cotidiana.

Nuestra nación nació al moderno quehacer de la política, a partir del triunfo de la revolución de Ayutla sobre Santana, pero es con la guía de Juan Álvarez, sobre la extraordinaria generación de la reforma encabezada por Juárez, cuando en México nace el quehacer político como teoría y práctica sobre las libertades, encarnadas en la constitución liberal de 1857.

Constitución por la que Juárez habría de luchar incansablemente, incluso a costa de su vida.

Como buen político, sabía que en política son pocas las batallas y muchas las escaramuzas, y que deben de ganarse éstas, para vencer en aquellas.

Juárez encabezó una de las más brillantes generaciones de mexicanos, para afirmar así nuestra independencia nacional.

Generación de Mexicanos que nos dio la base constitucional republicana del México moderno, federal, laico y democrático.

Juárez hizo madurar políticamente a la nación, forjando en el yunque de la perseverancia su capacidad y su férreo carácter para cumplir con el deber frente a los desafíos que se le presentaran.

El conoció muy bien la naturaleza humana en sus miserias y grandezas, por ello jamás tuvo la actitud suicida de querer purificar al hombre sometiéndolo a la prueba del fuego.

En una palabra: Juárez simboliza el ideal de un estado nacional fundado en la democracia, como fuente única del poder; por ello al triunfo de la fuerzas nacionales sobre el extranjero invasor, Juárez convocó al pueblo para que mediante el ejercicio democrático del voto, con absoluta libertad

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