Velasco Ibarra
Enviado por marilynmrl • 13 de Agosto de 2013 • 1.315 Palabras (6 Páginas) • 511 Visitas
JOSE MARIA VELASCO IBARRA 20 AÑOS DE SU MUERTE
Publicado el 30/Marzo/1999 | 00:00
Guayaquil. 30 mar 99. Combatido por unos y admirado por otros,
el personaje quiteño es la gran figura ecuatoriana del siglo
XX, no solo por su quehacer político de muchos años sino por
sus virtudes intelectuales y cívicas puestas al servicio de
sus compatriotas.
Se cumplen hoy dos décadas del fallecimiento de aquel hombre
que influyó directa o indirectamente en la vida política del
Ecuador republicano por cerca de 45 años, convirtiéndose así
en un caso excepcional que todavía llama a discusiones entre
sociólogos, historiadores y demás tratadistas afines.
Aquella figura de indiscutible relevancia en las páginas de
nuestra historia, el Dr. José María Velasco Ibarra nacido el
19 de marzo de 1893, llegó a la presidencia de la República en
cinco ocasiones, gobernó 12 años, 10 meses y 3 días aunque
constitucionalmente lo hizo apenas 9 años, 9 meses y 17 días,
pues el resto del tiempo actuó en función de dictador. Solo un
mandato presidencial logró concluir, esto es 1952-1956.
Sin embargo, con aciertos y errores en su dilatada carrera,
las realizaciones de gobernantes no se hicieron esperar y de
allí entonces que se diga: "Cada cantón de la República le es
deudor de un centro educativo o de un puente".
El hombre
Los padres del recordado político fueron el ingeniero
Alejandrino Velasco Sardá y Delia Ibarra Soberón, quienes
procrearon numerosa familia.
La educación elemental se la impartieron en el hogar; los
estudios secundarios en el Seminario Menor de San Luis y
colegio San Gabriel; en el Mejía rindió su examen
reglamentario de bachiller. Se doctoró con honores en
jurisprudencia en la Universidad Central, con la tesis El
Sindicalismo.
Desempeñó varios cargos públicos en su urbe natal; además
inició su labor periodística como colaborador del Diario El
Comercio, en el que mantenía la columna Acotaciones firmada
por Labriolle.
Viajó por países americanos y europeos; en el Viejo Continente
se especializó en Derecho Internacional en la Universidad de
la Sorbona (París, Francia). Fue diputado y presidió la
respectiva Cámara; perteneció a la Academia Ecuatoriana de la
Lengua y brindó conferencias en centros culturales y recintos
universitarios de diferentes países.
Estuvo casado dos veces; al divorciarse de su primera esposa,
contrajo matrimonio con la compañera de toda su vida, que
junto a él saboreó triunfos e infortunios: doña Corina Parral
Terán de Velasco.
La muerte
Después del derrocamiento que sufrió en febrero de 1972,
mientras ejercía los últimos meses de su quinto mandato
presidencial, el doctor Velasco retornó de nuevo a Buenos
Aires, Argentina, ciudad que siempre lo recibió con afecto
mientras él cumplía sus voluntarios u obligados destierros.
Con su esposa vivía modestamente en un departamento de las
calles Santa Fe y Bulnes en la capital argentina. El 8 de
febrero murió su fiel compañera en un accidente de tránsito
ocurrido en la misma metrópoli.
Pocos días después del doloroso hecho el Dr. Velasco llegó a
Quito trayendo los restos de su idolatrada esposa. Lleno de
pena expresó a uno de sus entrevistadores: ¡He venido a
meditar y morir!, frase que resultó por demás sentenciosa.
Así, el 30 de marzo de 1979, antes del mediodía, en una de las
piezas de la clínica Pasteur de la Capital ecuatoriana expiró
tranquilamente el estadista y ex presidente, mientras su
confesor y amigo, padre Luis Tipán Rojas, lo asistía
cristianamente. Murió el Dr. Velasco once días después de
haber cumplido 86 años.
Una acongojada multitud acompañó a su líder hasta el
cementerio de San Diego para tributarle el postrer adiós. Y
pese a que con suma anticipación había solicitado que no se le
hagan honores militares, la guardia presidencial que siempre
le manifestó respeto y afecto, se los tributó en medio de un
instante de recogimiento y solemnidad.
Homenaje nacional
En recuerdo del tribuno, humanista, maestro universitario,
escritor, periodista, esteta, orador, jurisconsulto, político
y patriota existen poblaciones, calles, avenidas, bustos,
monumentos y centros educativos a nivel nacional. En ciudades
del exterior como Buenos Aires, también se le ha erigido un
busto que perenniza su memoria.
El nombre de Velasco Ibarra consta en diccionarios biográficos
y políticos, de historia y literatura, etcétera, que se editan
en el Ecuador y el exterior a despecho de quienes aún lo
llaman ambicioso, incoherente, demagogo y caótico... y para
satisfacción de sus numerosos admiradores que siempre lo
califican de asceta, bondadoso, virtuoso, visionario y
transformador del país.
El fenómeno velasquista
En un detallado estudio sobre las raíces sociales del
velasquismo el ex presidente de la República, Dr. Osvaldo
Hurtado Larrea, consigna: "Si bien Velasco no llegó a resumir
sistemáticamente su pensamiento en un cuerpo
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