EL HOMBRE EN BUSCA DEL SENTIDO

Es realmente impresionante la manera en que Viktor Frankl enfocó su energía durante la etapa que estuvo prisionero, pues el hecho de querer hacer un estudio psicológico dentro de los campos de concentración, no es una tarea fácil, al menos no para alguien que sabe que puede morir en cualquier instante. Hace referencia a una de las noches en la campo de concentración, “Me desperté con los gemidos de un compañero que se agitaba en sueños bajo una horrible pesadilla, decidí despertarlo pero me detuve. Comprendí que ningún sueño, por muy horrible que fuese, podría ser por que nuestra actuar realidad” (Viktor Frankl).

No se puede juzgar el hecho de que millones de personas que vivieron durante esa situación hayan pensado en quitarse la vida, pues vivir bajo esas circunstancias no era vida, no era justo, era completamente inhumano.

Viktor Frankl comenta que su primera fase de reacción psicológica durante el internado en los campos de concentración, fue borrar la conciencia de su vida anterior. ¿Cómo es que un ser humano se vea obligado a hacer esto?, sin duda esto es un acto horrible para cualquier persona y por ello el suicidio era la salida más fácil de aquella pesadilla. Lo curioso de esta lectura, es cómo se refleja el hecho que las personas prisioneras querían seguir luchando para seguir con vida. Aunque no sepamos cual era la razón de cada uno para seguir aguantando una realidad tan cruel, podemos asegurar que había esperanza dentro de ellos, para continuar y no quitarse la vida, lo cual era muy sencillo.

Se podría decir que este aferro a la vida, se describe como un sentido, un sentido de vida. En el caso de Frankl, describe su situación y cómo es que la creación de sus estudios psicológicos, la esperanza de ver de nuevo a su familia, de salir del campo, le dieron la suficientes fuerzas para motivarlo día a día para seguir adelante. Esta situación es muy intrigante para un psicólogo y para cualquier ser humano, ya que estas personas no sólo se dieron cuenta de lo que realmente añoraban y por lo que vivían, sino que también pudieron conocerse un poco más.

Es por ello que el doctor se puso a investigar durante su estancia en el campo de concentración, sobre las diferentes influencias que nos afectan psicológicamente, la gran mayoría de las personas que vivieron estos acontecimientos, lograron descubrir cual era su sentido de vida, que era por lo que querían seguir viviendo. Y me imagino que es un gran aprendizaje, ya que se puede llegar a conocer qué es lo que nos apasiona de la vida, y aferrarnos a ello.

A pesar de las distintas atrocidades, de las limitaciones y agresividades, de la apatía de día con día y de la falta de sentimiento que se vivió en los campos de concentración en Alemania; hubo un maravilloso descubrimiento, se descubrió que todos estamos destinados para luchar por algo en esta vida. por algo a lo que hay que aférranos y no dejarnos

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