El angel Numero doce

Pasaron algunas semanas después del funeral de mi esposa y mi hijo miraba la ventana recordando cuando decidimos comprar la casa recordando todos esos momentos, cuando en el cajón de mi escritorio saque una pistola Colt calibre .45 que el compré porque hubo una época en donde se metían a robar en las casas de Santa Clara donde él vivía habitualmente por el trabajo.

La mire una y otra vez y lo primero que pensé fue en quitarme la vida porque ya no importaba nada, había perdido lo que mas quería que era mi esposa y mi hijo.

En ese instante se me vino a la mente el nombre del escritor que yo admiraba mucho cuando era un niño y recuerdo que el, un día de desesperación tiro de su escopeta y se dio un tiro en la cabeza, y yo creía que por que las personas eran tan tontas para hacer eso y ahora comprende por que lo hizo, y le pido perdón por haberlo juzgado sin conocer sus razones.

Cuando por fin me decidí quitarme la vida coloque el arma en mi cabeza… cuando escuche que decían John, John abre la puerta, soy yo, Juan, ¿te acuerdas de mi?, en ese instante baje el arma y abrí la puerta.- Hola John, que pensaba hacer querido amigo, en verdad lo siento mucho, me entere de lo que estaba pasando y vine a ver que necesitas, ya sabes que puedes contar conmigo, dime que fue lo que paso…

Todo paso tan rápido, por que Harry cumpliría 4 años, faltaba muy poco, y pedí a mi esposa y a Harry me acompañaran a la publicación de mi libro, pasamos ratos agradables, pero después de eso, ella decidió comprar una casa para recibir a uno de los clientes mas importantes en nuestra nueva casa, así que decidió comenzar… Un día cuando ella y Harry iban de compras para comenzar a decorar nuestra nueva casa chocaron con un carro que se le había salido una llanta y así los dos perdieron la vida...

Mira John que te parece si te propongo algo, te invito a dar un paseo, te prometo que no tardaremos más de media hora, ¿Qué dices? ¿Aceptas?...Como podría negarle treinta minutos de mi tiempo, que si el hubiera llegado diez minutos mas tarde yo estaría muerto, así que acepte ir con el.

Fuimos a la vieja cancha de béisbol donde entrenábamos cuando íbamos en la preparatoria, y recordé cuando jugaba en el equipo de Los Ángeles, como olvidar esos  momentos de felicidad…

En ese momento el me propuso que le ayudara a entrenar a un equipo de béisbol y que justamente era el equipo en el que jugaba cuando estudiaba. “LOS ANGELES”- Eso era lo que me gustaba, pero al inicio no me convencí por que no podía yo mismo conmigo, como iba a poder enseñar a unos niños… Cayó en la depresión de nuevo, y apunto de suicidarse de nuevo con el arma, su teléfono suena, era un administrador de las ligas infantiles, y le dice que ocupaban entrenadores de béisbol para el equipo local. El pensó que Dios le estaba diciendo que todavía no era tiempo para que ocurriera eso, que tenía mucho por delante.

Bueno el  me convenció y termine por aceptar; total eran solamente 12 doce niños, pero entre todos ellos había uno que era el mas pequeño de todos, y tenia las mismas características que mi hijo, el era un niño muy tranquilo, se llamaba Timothy Noble, y aun que no tenia el mismo rendimiento que los demás, en cada entrenamiento el daba su mayor esfuerzo para mejorar, pero aun así no lo conseguía, pero el  no se daba por vencido.

John parecía que se vio reflejado e Timothy, como cuando era niño, y cada vez que se finalizaba la práctica con todos los demás niños le decía John que si lo podría entrenar una hora más, y Timothy encantado le dijo que sí, que no habría problema alguno. Timothy fue mejorando día a día, John le regaló un guante de su hijo que tenía guardado especialmente, por que el de Timothy estaba todo destrozado y casi desasiéndose

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