CASO CALGENE

INTRODUCCCIÓN

Calgene se fundó en 1980 por Norman Goldfarb y Raymond Valentine, ambos fundadores coincidieron en el proyecto de técnicas de ingeniería genética aplicadas en la agricultura. Rober Salquins se integra a Calgene en 1981 y sustituye al científico fundador en 1984. Calgene concibe una participación dinámica con las autoridades reguladoras estatales y federales. Calgene es pionero en la mejora de productos agrícolas a través de la biotecnología.

Salquist funge como vicepresidente de marketing en 1983 y un año después como presidente, incentivó a los científicos de Calgene al desarrollar proyectos de investigación para la comercialización de mejores productos. Después de realizar investigaciones con diferentes productos, decidió especializarse en tres de ellos: el tomate, la semilla de algodón y de nabo (aceites vegetales e industriales).

Se plantean las bases para el desarrollo, aplicación y comercialización de proyectos de los productos mejorados con la biotecnología agrícola.

Para 1993 Calgene reporta perdidas x 90 millones y durante su trayectoria se han venido haciendo algunas aportaciones de capital.

PROBLEMÁTICA

Calgene al ser pionero en el desarrollo de productos modificados a través de la biotecnología, no pudo prever todos los problemas eslabonados para desarrollar, comercializar y distribuir sus productos, a partir de las regulaciones empíricas de las dependencias gubernamentales, oposición de ambientalistas, detractores, comerciantes mayoristas y minoristas.

No se cuenta con un referente para generar directrices que permita el respaldo para el avance en las diversas actividades inherentes al crecimiento de una empresa por lo que la improvisación genera una serie de ajustes que provoca pérdidas de tiempo e incremento de costos.

Las dependencias gubernamentales al no contar con una serie de parámetros de evaluación y normas para el desarrollo y consumo de productos modificados a partir de el uso de la biotecnología agrícola, estaban expuestas a la opinión pública para ser exhibidas por su incapacidad, razón por lo cual en ocasiones llegaron a bloquear los procesos de comercialización y distribución, generando especulación en el mercado bursátil con su consecuentes impactos financieros en Calgene.

1984 destaca la competencia entre productores tradicionales y productores con biotecnología agrícola, inclinándose la balanza hacia los primeros por la falta de cultura e información en el consumo de productos mejorados por la ciencia.

HECHOS RELEVANTES

En 13 años se invirtieron $90 millones de dólares en investigación y desarrollo y más de 200 millones en bienes de capital.

En 1993 Roger Salquist, director comercial de Calgene decide lanzar a la venta con gran expectativa su producto estrella, la universidad de California Davis la reconoce como una compañía vanguardista independiente en biotecnología agrícola.

Se especialista en 3 productos (tomates frescos, semillas de algodón y aceites comestibles e industriales)

Logra la autorización de la FDA para la comercialización y consumo de su producto estrella Flavr Sarv a pesar de la oposición de sus detractores, quienes crean temores infundados por falta de información para el consumo del tomate.

Los comerciantes minoristas se tornaron inquietos por los efectos negativos que podrían surgir en los consumidores por el uso de la ingeniería en los productos que comercializaban, aún cuando una encuesta reveló que la gente de mayor preparación académica e ingresos, apoyaban el uso de la biotecnología agrícola.

En 1984 se crea el acuerdo entre Cambell Soup y Calgene, para la investigación y desarrollo del tomate. El gen Flavr Sarv por convenio, le pertenece a Campbell

Campbell financia la investigación a cambio de las patentes y pagando regalías, a través de las cuales generaron recursos para la organización.

Calgene genera un protocolo para maximizar los recursos y no depender de asociados

En agosto de 1991 Campbell otorga licencia a Calgene por 2 millones de dólares y regalías por los derechos del uso del Gen Flavr Savr.

La marca Mac Gregor se crea para identificación en el mercado minorista y se publicita haciendo énfasis en las cualidades de un tomate mejorado en sabor, permitiéndole madurar en la planta.

Se implementaron los principios de ingeniería genética en las semillas de algodón, con la intención de reducir costos, el algodón era el 5to cultivo en producción nacional, cuyo mercado se estimó en 200 millones de dólares al año. La naturaleza del cultivo del algodón requería mayor inversión en herbicidas e insecticidas y aún con el uso de estos, se perdía hasta un 20 % de la cosecha.

Para comercializar las semillas de algodón. Se requería la autorización del Departamento de Agricultura de USA y de la agencia de protección ambiental. Se crea la subsidiaria Stoneville para la comercialización y distribución de la semillas, quien para 1992 se posiciona como el segundo productor de semillas de algodón, generando el 40% de ingresos de Calgene

La creación de las semillas de nabo proporciona reducción de costos al no depender de materia prima extranjera y los subproductos del petróleo. Se populariza el uso del aceite de canola en 1993, lo que ocasiona una ampliación de los campos de cultivo por la demanda.

La estrategia de integración vertical de Calgene permite la creación de 2 subsidiarias para el manejo de insumos (semillas) y productos (aceites).

Los aceites vegetales (oleoquímicos) integraban una parte importante en la industria de productos químicos especiales, tales como plásticos, lubricantes, jabones y otras sustancias

ANÁLISIS FODA

FORTALEZAS OPORTUNIDADES

Su producto estrella, el tomate Flavr Savr es desarrollado para ser incluido en consumo de primera necesidad. Se populariza el uso del aceite de canola en 1993, lo que ocasiona una ampliación de los campos de cultivo por la demanda.

Incremento de la durabilidad del tomate. Autorizada por FDA.

Excelente imagen y sabor del producto al llegar al consumidor. El producto se vende en diferentes precios, de acuerdo a empaque y mercado dirigido.

Ahorro en costos de pesticidas y fertilizantes. Mejora continua

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