EVALUACION DE UNA ESTRATEGIA PARA LAS EMPRESAS

Elaboración de una Estrategia para varias Situaciones de la Empresa

Para Johnson y Scholes (1993), la estrategia es la dirección y el alcance de una organización a largo plazo; consigue ventajas para la organización a través de su configuración de los recursos en un entorno cambiante, para hacer frente a las necesidades de los mercados y cumplir las expectativas de los accionistas.

Los altos directivos de las empresas fijan el rumbo de las decisiones estratégicas en temas como en cuales negocios se compite, delimitan el entorno específico de la empresa y fijan los límites de la misma. La estrategia en su más amplio enfoque busca adaptar la empresa a su entorno para lograr la supervivencia de esta.

Las estrategias comprende todos los niveles de la organización: nivel corporativo, nivel de negocio o competitivo y nivel funcional. En el nivel competitivo o de negocio se hace referencia a las líneas de acción a seguir para mejorar el posicionamiento competitivo de cada una de las unidades de negocio de la empresa en sus respectivos sectores. En otras palabras, define la forma particular de competir en un determinado sector con el fin de alcanzar unas mayores ventajas competitivas sostenibles a largo plazo.

Un punto primordial para las empresas, antes de definir sus estrategias de acción, es determinar cuál es su conducta competitiva. Se considera como conducta competitiva a todos los movimientos directos, específicos y directos observables en el mercado, que son iniciados por una determinada empresa para mejorar su posicionamiento.

Estrategias Competitivas

Porter (1985) define la estrategia competitiva como aquella estrategia que supone una acción ofensiva o defensiva con el fin de crear una posición defendible frente a las cinco fuerzas competitivas, de tal modo que se obtenga un resultado superior al promedio de las empresas competidoras del sector industrial. Dicho en otras palabras consisten en lo que las empresas están haciendo para ganar terreno frente a sus rivales y buscar conseguir una ventaja competitiva en el mercado.

Para que las organizaciones puedan obtener una ventaja competitiva frente a sus rivales de la industria, estas deben de contar una mejor posición frente a ellos. Esta ventaja le representa asegurar a sus clientes, además de defenderse contra las fuerzas rivales de la competencia. Las estrategias competitivas buscan el posicionamiento de una empresa en busca de maximizar el valor de las capacidades que les sirven de distinción de sus rivales y competidores del sector industrial donde ésta desarrolla sus actividades cotidianas.

Podemos distinguir diferentes caminos que pueden conducir a una empresa a lograr una ventaja competitiva, pero el mas esencial es el de proporcionar a los compradores lo que ellos perciben como valor superior. Otros aspectos que pueden proporcionar ventajas competitivas son: un buen producto a un bajo precio, un producto superior por el que vale la pena pagar más o una oferta atractiva en términos de precio, calidad- o características del servicio.

Estrategia de Costos Bajos

El ideal de esta estrategia consiste en que las organizaciones puedan obtener un coste global inferior al de sus competidores. Podemos afirmar que la estrategia de liderazgo en costes se basa en lograr un coste final mínimo respecto al coste de la competencia, conjuntamente con una calidad aceptable y una política de precios que permitan lograr un volumen de ventas y un crecimiento de la cuota de mercado que resulte rentable para la organización.

Cuando las organizaciones se esfuerzan por ser la de menor costo en toda la industria de la competencia, resulta una estrategia muy valida y aceptable en los mercados que posee compradores sensibles al nivel de los precios. El valor que proporciona una ventaja en costos esta ligado y depende directamente de su sustentabilidad y durabilidad porque si a los competidores les resulta fácil desarrollar y copiar la metodología del líder para tener bajos costos, entonces la ventaja resultara efímera y pasajera y no lograra producir un beneficio real. Este tipo de estrategia implica que la empresa posea un producto básico con pocos detalles, pero que al mismo tiempo posea una calidad aceptable y una variedad limitada.

Para poder obtener una ventaja en costos, las empresas deben conseguir que sus costos totales en toda su cadena de valor, tenga que ser inferior al de sus competidores y para ello se pueden emplear dos opciones básicas:

1. Tienen que ser más eficientes que sus rivales en las actividades internas y controlar los factores que influyen en el aumento de los costos.

2. Deben de restructurar su cadena de valor y evitar algunas de las actividades que producen costos.

Existen una serie de factores que posibilitan a la empresa alcanzar ese liderazgo en costos bajos, entre ellos cabe destacar los siguientes:

• Las economías de escala. Representa que el aumento en la escala de producción produce una disminución de los costes totales unitarios

• El efecto experiencia. La principal fuente de reducción de costes basada en la experiencia es el efecto aprendizaje que es el resultado del establecimiento y perfeccionamiento de las rutinas organizativas dentro de una empresa.

• Una nueva tecnología productiva. Cada vez más, los procesos de innovación son adoptados rápidamente por los competidores, de manera que para poderse mantener como líder en costes, la empresa debe de estar constantemente avanzando en el proceso de innovación.

• Rediseño de productos. Se produce como consecuencia de la aplicación de una nueva tecnología productiva, que puede ir encaminada a facilitar tanto los procesos de automatización como a ahorrar en el coste de los materiales empleados.

• Acceso a las materias primas. Si se disponen de un fácil acceso a las materias primas permitirá conseguir esta estrategia.

• Localización. Si existen unas condiciones favorables de localización de la empresa en el sentido que éstos no repercutan en menor medida las diferencias salariales, costes energéticos o de transporte.

• Relaciones con clientes o proveedores. Si se establece una cooperación con ellos, contribuirá al liderazgo.

Esta estrategia es especialmente recomendable para la empresa cuando:

• La competencia de precios entre las empresas es una fuerza competitiva dominante.

• El producto está estandarizado y es ofrecido por múltiples oferentes.

• Existen pocas maneras de conseguir la diferenciación de productos que sean significativas para los compradores.

• Se incurre en bajos costes por cambio de proveedor.

• Son muchos los compradores y tienen un importante poder de negociación para bajar los precios.

Estrategia de Diferenciación

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