Liderazgo Y Habilidades Directivas.

Introducción

El caso de estudio que se analizará es el número uno el cual nos explica el caso de Rodrigo, un directivo que trabaja para uno de los centros de investigación más importantes de la República Mexicana.

Un líder es la persona que guía a otros hacia una meta en común, está comprometido a llevar adelante la misión del proyecto y debe tener cualidades específicas para poder considerarse un buen líder como lo son buen escucha, que la persona sea centrada, organizada, decisivo y seguro en sus acciones.

Las habilidades directivas son un conjunto de capacidades y conocimientos que posee una persona para poder realizar las actividades de administración y liderazgo en el rol de gerente de una organización.

Existen tres grandes grupos de habilidades que debe dominar un directivo para ser exitoso:

• Habilidad conceptual: Se trata de formulación de ideas.

• Habilidad técnica: Involucra el conocimiento y experiencia.

• Habilidad humanística: Habilidad de interactuar con la gente.

A medida que el mundo de los negocios cambia, también lo hace la necesidad de determinadas habilidades directivas.

Es por ello que todo directivo, o quien aspire a serlo, debe de estar en constante actualización y mejora de sus habilidades directivas.

El estilo directivo es la forma en que una persona se relaciona con sus subordinados al interior de una organización, encontramos estilos muy predominantes como liderazgo, impuso, capacidad de motivación, comunicación, influencia y creación de equipo.

Estos estilos directivos no son elegibles o al gusto de cada persona ya que corresponden a la naturaleza y carácter y del temperamento de las personas pero hablamos de un perfil especifico el cual se encapsula en un líder nato.

Rodrigo es un directivo que se desenvuelve en el centro de investigación más reconocido de la República Mexicana. Su habilidad predominante ha sido la investigación y vinculación con otros centros. No obstante, ha llegado a ocupar el nivel más alto del centro de investigación. En su toma de protesta en su periodo hace un breve balance de la realidad administrativa del centro. Asimismo, promete que implementará un proyecto de vinculación interinstitucional del cual carece su centro, mientras otros centros de investigación similares en el país ya lo tienen. Sin embargo, después de un año solo presenta un breve bosquejo del mencionado centro, el cual fue socializado con algunos actores, académicos, directivo y operativos del centro. Dicho proyecto recibe sugerencias y comentarios para su enriquecimiento.

Pasa otro año y el proyecto no avanza. Se asigna como responsable a un directivo de mando intermedio, pero como este funcionario ya realiza algunas funciones que se integrarían al mencionado centro, no lo apoya ni socializa. Su pensamiento al respecto era: “Ya estando el pastel listo, todos van a querer comérselo”, se le comento e indico que la socializara con sus subalternos, pero tuvo reacciones encontradas y no se llegó a ningún acuerdo. Por ello, se le menciono que la función de la dirección es negociar, liderar y convencer para llegar a acuerdos comunes. El directivo exclama: “Que flojera tener que lidiar con esta gente”, esto le costó el puesto. (Este tipo de comportamientos se dan en la dirección cuando el directivo no tiene políticas claras de generación de recursos ni su aplicación. Es un fenómeno común que ocurre en las instituciones públicas, tanto en lo operativo como en lo administrativo. Los valores de los directivos no se dirigen hacia el bien común de la empresa sino al individual).

Al año siguiente continuo sin consolidarse el proyecto por lo que le fue asignado al nuevo director. Sin embargo, los resultados fueron los mismos: no se autorizó, sin embargo, en este caso la propuesta era crear una instancia superior centralizadora que todas las actividades

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