Monografia de Brasil

1. Introducción

Brasil, oficialmente República Federativa de Brasil, comprende la mitad oriental del subcontinente americano. Tiene una superficie estimada en más de 8,5 millones de km²,​ siendo el quinto país más grande del mundo en área total.

La capital actual del país es Brasilia. La moneda oficial es el real brasileño.

Es el sexto país más poblado del mundo con más de 207 millones de habitantes, aunque presenta un bajo índice de densidad poblacional ya que la mayor parte de la población se concentra a lo largo de la costa, mientras que el interior del país hay enormes vacíos demográficos.

Actualmente, la economía brasileña es la mayor de América Latina y del hemisferio sur, la novena mayor del mundo por PIB nominal según el FMI. El país es miembro fundador de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), G20, Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (CPLP), Unión Latina, Organización de los Estados Americanos (OEA), Organización de los Estados iberoamericanos (OEI), Mercado Común del Sur (Mercosur) y de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), además de ser uno de los países BRICS.

Brasil es una república democrática con un sistema presidencial. ​ El presidente es el jefe de Estado y el jefe de gobierno de la Unión. El actual mandatario del país es el presidente Michel Temer, quien ocupa la presidencia desde 2016 de manera interina por la suspensión de Dilma Rousseff acusada de corrupción, en el poder desde el 1 de enero de 2011.

El Banco Central (BCB) es la máxima autoridad monetaria en Brasil, encargada de las finanzas y la economía en el país. El Banco Central está vinculado con el Ministerio de Hacienda. Existe además otro organismo importante dentro del BCB, el Comité de Política Monetaria (COPOM) que se creó el 20 de junio de 1996, y cuya responsabilidad es establecer la posición de la política monetaria y la tasa de interés a corto plazo. Bajo el régimen de metas de inflación, las decisiones de política monetaria del COPOM tienen como objetivo principal el logro de los objetivos de inflación establecidos por el Consejo Monetario Nacional (CMN).

Tal y como hemos mencionado anteriormente, Brasil es uno de los países del grupo “BRICS”. Cabe destacar que dentro de lo que se considera países emergentes, existe otra denominación adicional: países “BRICS” (Brasil, Rusia, India, China y posteriormente Sudáfrica), acuñada hace más de una década por Goldman Sachs en un intento de entusiasmar a los inversores occidentales.

La economía de Brasil destaca en sectores como el agrícola, minero, manufacturero y el de servicios. Con respecto a los productos de exportación destacan las exportaciones de aeronaves, equipos electrónicos, automóviles, alcohol, textiles, calzado, hierro, acero, carne, café y zumo de naranja. Las perspectivas de la economía brasileña también mejoraron gracias al descubrimiento de enormes reservas de petróleo y gas natural.

Como resumen general, consideramos que Brasil jugará un papel importante en la economía mundial en las próximas décadas, pero antes debe resolver problemas importantes como la inestabilidad política.

Tras un análisis de la historia económica reciente de Brasil, consideramos que el periodo más representativo, cercano en el tiempo y que refleja un punto de inflexión en las políticas del país, es el que comprende desde el verano de 2016 hasta la actualidad, siendo el elegido para nuestro análisis.

En 2016, la economía brasileña seguía en recesión por segundo año consecutivo debilitada por causas externas como la caída de los precios del petróleo, las materias primas y la ralentización de la economía china. En cuanto a las causas internas, estaba pendiente de ejecutarse la estrategia de consolidación fiscal con objeto de estimular la confianza. Por todo lo anterior, el país experimentó una grave crisis económica y política, y los Juegos Olímpicos de ese año no impulsaron el crecimiento esperado. Al contrario, el estado de Río se endeudó al punto de rozar la quiebra.

En agosto de 2016, la presidenta Dilma Rousseff fue destituida acusada de corrupción y reemplazada por Michel Temer. El foco de este nuevo presidente se centró en un plan de reajuste presupuestario para limitar el crecimiento del gasto público estableciendo un techo de gasto para los próximos 20 años.

En 2017 el país comenzó una lenta recuperación apoyada por las medidas de ajuste presupuestario en curso, así como por el aumento de la inversión. Como parte del plan de acción del gobierno, se establecieron como prioritarias la reforma del sistema laboral y del sistema de jubilación, esta última aún no ha sido aprobada, y teniendo en cuenta que en Octubre de este año hay elecciones generales, se ve difícil que salga adelante ya que presenta propuestas un tanto impopulares, que llevarían al partido que lo apoye al “fracaso” electoral.

Los problemas sociales son importantes. El país sigue siendo uno de los más desiguales del mundo. Existen fuertes disparidades regionales y ha habido un aumento de la delincuencia y la violencia criminal. La tasa de desempleo ha seguido creciendo y el empleo informal sigue siendo elevado.

2. Coyuntura Inicial y Estrategia Política

A continuación reflejamos los principales indicadores económicos de nuestro punto de partida, sobre los cuales analizaremos los distintos impactos en base a las políticas realizadas en su momento.

Tabla 1: Principales indicadores Brasi 2015 vs. 2016 (fuente: BBVA Research)

El consumo de los brasileños, que fue el que colocó a Brasil entre las seis mayores economías del mundo en la década anterior, siguió cayendo en 2016. La caída del consumo privado, se debe a la pérdida de confianza de los consumidores, a la alta tasa de interés (Tasa Selic) y a la pérdida de valor del real brasileño frente al dólar, llegando a perder en torno al 40% del valor que tenía en 2014. Destacar además que la caída de la tasa de inversión durante 2016 fue uno de los principales motivos que impidieron a Brasil crecer con todo su potencial, así como la disminución en exportaciones e importaciones que se vieron afectadas también por la depreciación del tipo de cambio.

Con respecto al déficit público, el dato de 2016 es el peor dato en los últimos 16 años. Esto es consecuencia del desmesurado gasto público en el que ha venido incurriendo desde la organización del mundial de fútbol de 2014 y los Juegos Olímpicos en 2016.

Como

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