Sociedades Anonimas

a. La Sociedad Anónima es una de las más usadas en nuestro país.

b. Porque su responsabilidad es limitada, y actualmente las personas no están interesadas en constituir una sociedad en que deben asumir una responsabilidad ilimitada, poniendo en riesgo su patrimonio personal. Conoceremos su concepto, su historia, los tipos en q se dividen y como se constituyen.

c. a continuación estudiaremos más las Sociedades Anónimas y su importancia en la vida de las personas.

La S.A es una persona jurídica conformada por accionistas que reúnen un capital común. Cada socio accionista responde hasta el monto de dinero que aportó, lo que implica que la responsabilidad es limitada.

Las sociedades anónimas son administradas por un directorio que debe tener como mínimo tres miembros, que a su vez deben elegir un gerente y un presidente.

Se caracterizan además porque las decisiones se toman por mayoría, es decir a través de la votación de todos los socios que la conforman.

El origen de las sociedades anónimas se remonta a la Europa medieval, en la que el feudalismo estaba muy extendido. Los monarcas eran propietarios de todos los recursos naturales (principalmente tierras y ganados), y lo ofrecían a los barones, los nobles y los lores, que utilizaban a los plebeyos o sirvientes para que cultivaran las tierras y cuidaran de los ganados a cambio de su manutención. En esas circunstancias, establecimientos colectivos, como las iglesias, los gremios artesanales y los mercantiles, controlaban grandes cantidades de tierra y de recursos.

En países como Italia, rodeados por el mar, no era raro que los mercaderes se unieran para costear la construcción de una embarcación y los gastos del transporte de sus mercancías al punto de venta, para así compartir también el riesgo. La estructura de algunas de las primeras sociedades anónimas es idéntica también a cómo los romanos gestionaban su sistema de recaudación de impuestos, los publicanos.

Cuando se abolió la esclavitud, y el comercio de materias primas tales como el aceite de palma, el algodón, la seda y la sal se convirtieron en el nuevo orden del día, fue solo cuestión de tiempo antes de que ricos comerciantes que tenían los recursos empezaran a unirse para hacer operaciones de mayor envergadura y para repartir el riesgo que suponía transportar sus mercancías por mar hasta otros continentes. Y así es como nacieron las sociedades anónimas.

Podemos encontrar dos tipos de sociedades anónimas:

- Abiertas: corresponden a aquéllas donde se hace oferta pública de sus acciones y transan en la Bolsa. Deben inscribirse en el Registro Nacional de Valores y están sometidas a la fiscalización de la Superintendencia de Valores y Seguros.

Deben tener 500 o más accionistas (el número de socios es ilimitado), lo cuales tienen una responsabilidad limitada al monto

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