Spain: Can The House Resist The Storm?
Enviado por tanzania2503 • 18 de Mayo de 2015 • 1.473 Palabras (6 Páginas) • 282 Visitas
1. ¿Por qué el desempleo en España se incrementó tanto entre la segunda mitad de 2008 y finales de 2009?
Durante los años 2000 a 2007 España experimentó un periodo de expansión, el cual era perceptible en todos los indicadores económicos, es decir, se redujeron las tasas de desempleo hasta equipararse con las de la Unión Europea en el año 2005, entorno a un 9.18% y llegando a estar en su punto mínimo en el año 2007, cuando el porcentaje de desempleo se sitúo en el 8.28% . Las cifras de PIB durante estos ejercicios se mantenían en torno al 3% y 4%. Las tasas de inflación medida a través del Índice de Precios al Consumidor llegó a alcanzar en el ejercicio 2007, el 4.2% . Además de esto el euribor se situaba en tasas moderadas, en 2007 el euribor a un año se situaba en el 4,74% .
Todo esto, lo que parece indicar es que la economía española se encontraba como comentábamos al principio en un ciclo económico al alza, sin embargo toda esta economía se estaba sustentando fundamentalmente en dos pilares: la construcción y el sistema financiero. El sector inmobiliario en España experimento un fuerte desarrollo durante el periodo 2000 a 2007, entre otros factores por la gran demanda que experimentó, ya que tradicionalmente España ha sido un país en el que las familias han optado por la compra de viviendas frente al alquiler de estas, fundamentalmente por el elevado precio de estos y las pocas garantías y ventajas fiscales que ofrecían. Por otra parte, el adquirir una vivienda si tenía ciertas ventajas fiscales. Evidentemente, la compra de las viviendas era financiada por cajas de ahorros y bancos, los cuales no tenían a priori problemas de garantías o riesgos en la concesión de dichas hipotecas a las familias, ya que para empezar el riesgo de impago en España era muy bajo, por lo general se unos avales que respondían con sus bienes, y en el último de los casos, la propia garantía de la vivienda era suficiente, ya que el precio de venta en el mercado de ésta se revalorizaba constantemente, por lo que a través del embargo y venta en subasta sería suficiente para cubrir el importe del préstamo concedido.
Estas operaciones fueron las habituales por un espacio de 7 años, pero podemos ir un poco mas allá, ya que no solo se adquirían primeras viviendas, es decir para vivir en ellas habitualmente, dado el flujo constante de financiación por parte de los bancos, los ahorradores iniciaron la compra de inmuebles como inversión, la operación era bastante sencilla, se adquiría un inmueble con la financiación de la caja o banco correspondiente, se mantenía por un espacio de tiempo, para luego venderse por un precio superior al de compra, seguidamente se cancelaba el importe pendiente de préstamo y el inversor en cuestión obtenía beneficios rápidamente, este tipo de inversión en principio ofrecía muy pocos riesgos y era mucho mas rentable que invertir en bolsa, en fondos o en plazos. Esta práctica especulativa se convirtió en unos de los pilares fundamentales de la economía española, en este sentido las cifras son bastante confusas, fuentes oficiales como el INE (Instituto Nacional de Estadística) cifraban el peso del sector inmobiliario en el total del PIB en un 17.9% en 2007, sin embargo algunos medios de comunicación indicaban que el peso real estaba entorno al 40%.
Pero como bien sabemos, todo ciclo tiene su fin, esta burbuja inmobiliaria explotó en el año 2008, momento en el que los precios de las viviendas alcanzaron niveles históricos, la deuda privada ahogaba a empresas y hogares, y el déficit público se situaba en 154 billones de dólares americanos . El mercado comenzaba a ser consciente de que el precio que se pagaba por las viviendas no era real, pero las empresas constructoras continuaron construyendo inmuebles. Todo esto sumado a la crisis financiera estadounidense hizo que la economía española entrara en clara recesión, es decir llegó un momento en el que el crecimiento experimentado años atrás se agotó. Se cumplían todos los síntomas de una recesión, cayó la inversión, la inflación, la producción, el mercado de valores, los beneficios de las empresas, pero sobretodo el golpe mas duro se lo llevo la construcción, por ejemplo en mayo de 2008 Martínez Fadesa, una de las empresas inmobiliarias mas importantes de España, se declaró en bancarrota, lo que dejo a miles de personas sin trabajo. A esta le siguieron muchas otras, pero no solo empresas constructoras, también todas aquellas empresas “satélites”
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