Las raíces de Inteligencia Emocional

MARCO TEÓRICO

Las raíces de Inteligencia Emocional

Según Goleman (1995), señala que la Inteligencia Emocional es una serie de capacidades, habilidades relacionadas con el auto- conocimiento, como también tiene relación con el autoestima, control de impulsos, la motivación, la perseverancia, la empatía y la autodisciplina. Todas ellas son claves tanto para el equilibrio personal y por consecuencia la integración social.

Goleman también hace referencia que desde hace muchos años se han realizado las investigaciones necesarias y a la vez se ha comentado acerca del Cociente Intelectual (CI), concepto que fue acuñado por Stern en 1912, el que pretendía ajustar el concepto de “edad mental” establecido por Binet (fue quien diseñó el primer cuestionario para medir la inteligencia).  El único fin de éste instrumento, era predecir qué alumnos tendrían éxito en el rendimiento escolar.

Con el tiempo, aparecieron diferentes investigaciones y definiciones de “inteligencia” pero siempre relacionadas con la predicción del éxito académico, por ende, los aspectos afectivos- emocionales los dejaban como elementos facilitadores del rendimiento, pero no como un elemento central e indispensable del desarrollo intelectual y claves para el éxito personal y social.

Fue en 1990 cuando Salovey y Mayer, dieron a conocer el concepto de Inteligencia Emocional, como también se puede mencionar que en 1998 Gardner creó la teoría de las Inteligencias Múltiples.

Según el Manual de Inteligencia Emocional, señala que las raíces pueden encontrarse en la inteligencia social de Thorndike (1920), la cual se refería a la habilidad de comprender y dirigir a las personas y a su vez actuar sabiamente en las relaciones humanas. Luego, lo más cercano a éste estudio son los trabajos de Gardner (1983) quien como anteriormente mencionamos, sus estudios fueron acerca de las inteligencias múltiples, y de forma más específica los conceptos de inteligencia interpersonal e inteligencia intrapersonal. De acuerdo a los estudios de Gardner (1999), “la inteligencia interpersonal denota la capacidad de una persona para comprender las intenciones, motivaciones y deseos de los demás y, consecuentemente, para trabajar eficazmente con otras personas” (p. 43). En contraste, “la inteligencia intrapersonal implica la capacidad para comprenderse a uno/a mismo/a, para tener un modelo de trabajo de uno mismo que sea efectivo (incluyendo los propios deseos, temores y capacidades) y para usar esta información eficientemente en la regulación de la propia vida” (p. 43).

El término Inteligencia Emocional, fue conocido algunos años antes (Greenspan, 1989; Leuner, 1966; Payne, 1986) de que el primer modelo y definición formal fueran introducidos y publicados por Salovey y Mayer (1990), pero sin duda el más impactante e influyente fue el libro Emotional Intelligence de Goleman (1995a) fue lo que popularizó el concepto de IE.

Definición de Inteligencia Emocional

El término de Inteligencia Emocional  fue acuñado por primera vez en 1990 por los psicólogos Salovey y Mayer, y su definición es la siguiente:

“Un conjunto de destrezas que se supone que contribuyen a una adecuada percepción y expresión de las emociones de uno mismo y en los otros, a la adecuada regulación de la emociones en uno mismo y en los otros, y a utilización de las emociones para motivarse, planificación y alcanzar los propios objetivos vitales” (Zaccagnini, 2004, 57).

Luego, en 1995, Goleman conocido por su best- seller, definió Inteligencia Emocional  como “habilidades para ser capaz de motivarse y persistir frente a las decepciones; controlar el impulso y demorar la gratificación, regular el humor y evitar que los trastornos disminuyan la capacidad de pensar; mostrar empatía y abrigar esperanza” (Goleman, 1995).

También se define por Inteligencia Emocional  como “la habilidad para percibir con precisión, valorar y expresar una emoción; la habilidad para acceder y/o generar sentimientos que faciliten el pensamiento; la habilidad para comprender la emoción y tener conocimiento emocional, y la habilidad para regular reflexivamente las emociones de forma que promuevan el crecimiento emocional e intelectual” (Navas, 2007).

El Modelo de IE de Mayer y Salovey (1997)

Desde el modelo teórico de Salovey & Mayer, la inteligencia emocional es concebida como una inteligencia genuina basada en el uso adaptativo de las emociones, de manera que el individuo pueda solucionar problemas y adaptarse de forma eficaz al medio que le rodea (CABELLO, RUIZ-ARANDA, & FERNÁNDEZ-BERROCAL, 2010) Desde este punto de vista los autores desarrollan dicho modelo teórico el cual es publicado en 1997, convirtiéndose en uno de los modelos teóricos más importantes de esa época.

El modelo de inteligencia emocional de Mayer y Salovey considera que se centra en cuatro habilidades básicas, las cuales son:

“La habilidad para percibir, valorar y expresar emociones con exactitud, la habilidad para acceder y/o generar sentimientos que faciliten el pensamiento; la habilidad para comprender emociones y el conocimiento emocional y la habilidad para regular las emociones promoviendo un crecimiento emocional e intelectual” (MAYER & SALOVEY, 1997). (FERNÁNDEZ BERROCAL & EXTREMERA PACHECO, 2005)

A través de la cita anterior los autores plantean su modelo como un conjunto de habilidades, las cuales abarcan desde procesos psicológicos básicos a los más complejos, visto desde este punto de vista podemos decir que se trata de un modelo jerárquico en el que las habilidades básicas son necesarias para llegar a las habilidades más complejas.

Salovey resalta que en el contexto escolar los estudiantes requieren habilidades emocionales, ya que se enfrentan a distintas situaciones en las cuales se requiere de ellas, para así adaptarse de forma adecuada al contexto escolar. Por lo tanto, los docentes también emplear su inteligencia emocional durante sus actividades como profesores para guiar con éxito sus emociones y así también la de sus estudiantes.

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