Proceso de duelo y aplicacion de sistemas de comunicacion aumentativos alternativos.

Considerando lo expuesto en el presente informe, más los datos anexados para la veracidad de este documento se determina que Kevin Dominguez requiere apoyos externos, para la implementación de Sistemas de Comunicación Aumentativos Alternativos^[1],  ya que, este tipo de opciones -SCAA- complementan el lenguaje oral, cuando este por sí solo no es suficiente para entablar una comunicación efectiva con el entorno.

 Una de las constantes en el desarrollo de este informe es la necesidad tanto del joven como de su contexto, es que él pueda expresar verbal, gestual o corporalmente su sentir, emociones y opiniones, a través del uso de elementos propios del interés de un joven de 13 años, como lo es una Tablet o celular dotado de las aplicaciones necesarias para que Kevin se pueda expresar.

A partir del reconocimiento de sus características individuales, la aceptación de nuevas formas de comunicación y el uso de las TICs resultan viable contar con elementos facilitadores para generar puentes entre el entorno y el joven, otorgándole una batería de nuevos elementos para la participación social en todo ámbito del desarrollo de la vida, es decir, en contextos familiares, educativos, laborales, recreativos y comunitarios.

Los recursos que se utilizan varían en una amplia gama de posibilidades, son denominados “productos de apoyo para comunicación”, (ARASAAC, s.f.) en el caso para la implementación del sistema para la Vida de Kevin, se propondrá el uso de tabletas equipadas con programas especiales para la comunicación a través del habla artificial, junto al uso de mímicas y gestos de uso común de la lengua de señas simplificadas, aquellos gestos de uso común, aprovechando cualquier modo de expresión del joven por particular que sea , pudiendo ser desde una sonrisa, llanto, gestos propios del joven, pero legitimándolos como autentica señal comunicativa, en este mismo sentido (Gomes y otros, s.f) Kevin sentirá que es escuchado y comprendido incentivando la producción más compleja de signos.

De esta manera se le está permitiendo a Kevin conectar con sus pares, a la escuela se le abre una nueva posibilidad de generar aprendizajes significativos con sus educandos. Cabe destacar que Kevin es un joven de 13 años, que está transitando a la vida adulta, donde por parte de la escuela se comenzará a trabajar con el desarrollo de competencias laborales en el taller laboral de cocina, para lo cual es necesario poder dotar de herramientas concretas para que lo aprenderá en los próximos niveles educativos se plasme en la capacitación real de un oficio y así poder ejercerlo dignamente.

1. Propuesta psicopedagógica

Fundamentación Teórica

Se presenta a continuación una propuesta psicopedagógica, a partir del análisis multidimensional propuesto por la Asociación Americana de Retardo Mental^[2] centrado fundamentalmente en las dimensiones I y II (las cuales están directamente relacionadas con las otras dimensiones del documento) para Kevin Domínguez, un sujeto de 13 años de edad, diagnosticado con Discapacidad intelectual Moderada.

Para que la propuesta tenga trascendencia en la vida de Kevin, es fundamental atender a la necesidad emergente del proceso de duelo que Kevin y su familia han debido afrontar debido al fallecimiento de la abuela materna del joven, quién convivía con él y su padre hasta su deceso, si bien no se desarrolló en extenso en la presentación de las dimensiones, se debe a que esta es una necesidad determinada por la evaluadora y autora de la propuesta psicopedagógica.

Según Bowlby (1983) el duelo es estudiando como una transición psicosocial, en la cual existe una triada de la pérdida afectiva conocida como: protesta-desesperanza-desapego; en las cuales existen variables que influyen en el desarrollo de la evolución de duelo, como lo es la edad, rol que desempeñan dentro de un grupo humano, contexto que los circunda, entre otros.

El proceso en sí mismo -duelo- está dotado de diferentes estadios o fases, expertos en la materia señalan que son entre cuatro a tres fases fundamentales dentro del curso del fenómeno, es por esto y para una comprensión más acabada de la temática que se opta por la caracterización realizada por Warner y Bladure (1992), quienes distinguen tres fases fundamentales:

• Primera etapa: la búsqueda de respuestas inmediatas ante la pérdida. El comportamiento se ve alterado por un estado de shock, inestabilidad emocional, estado de alarma y negación de lo ocurrido
• Segunda etapa: dolor agudo. Se vuele constante la depresión, ira, ansiedad, temor ante lo desconocido y desprotección, estos son solo algunos de los sentimientos que embargan a los sujetos en esta fase, los malestares a nivel psíquico y físico comienzan a presentarse.
• Tercera etapa: reorganización o reajuste. Incluye el dolor de la perdida al desarrollo de la vida cotidiana sin perjuicio del despliegue normal de la misma.

La situación para afrontar la pérdida de un ser querido en personas con discapacidad intelectual requerirá de más de un apoyo externo al núcleo familiar para entender la muerte como parte de la vida, frente al compromiso de un trato igualitario y el reconocimiento de derechos de las personas discapacitadas (ONU, 2008) – como el derecho de toda persona- , es que se elabora una propuesta pensando en el carácter prioritario al que debe responder el área educativa para sobrellevar la lógica pena y acompañar en el normal sufrimiento, que la muerte de un ser querido conlleva” (Feaps, 2001, p.7)

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