TAREA: ¿QUÉ HACE UN LÍDER?
Enviado por Kevin Lorini • 1 de Septiembre de 2019 • Síntesis • 1.228 Palabras (5 Páginas) • 105 Visitas
Alejandro Lorini 2007016
Taller de Habilidades Directivas
Jornada Vespertina sección 01
TAREA: ¿QUÉ HACE UN LÍDER?
Para empezar, se puede decir que los estilos personales de líderes sobresalientes varían porque cada situación requiere diferentes tipos de líderes. Los líderes más efectivos se parecen en algo fundamental: todos tienen un alto grado de lo que se conoce como inteligencia emocional. El coeficiente intelectual y las destrezas técnicas son importantes, pero la inteligencia emocional es la condición con la cual se tiene liderazgo.
Evaluando la inteligencia emocional
Al analizar los “modelos de competencia” que ayudan a identificar, formar y promover estrellas potenciales en el firmamento del liderazgo en las grandes empresas, el intelecto era un factor clave en el desempeño sobresaliente, y las habilidades cognitivas, como pensar de manera global y la visión a largo plazo, eran especialmente importantes pero la inteligencia emocional resultó ser dos veces más importante que el resto para empleos a cualquier nivel, sobre todo en los niveles superiores, porque las destrezas técnicas son insignificantes.
Con los profesionales estrella, se concluyó que casi 90% de la diferencia en sus perfiles se podía atribuir a factores de inteligencia emocional, más que a habilidades cognitivas. Otros investigadores han confirmado que la inteligencia emocional no sólo distingue a los líderes sobresalientes, sino que se puede relacionar con el alto desempeño.
La autoconciencia
Es el ingrediente primordial de la inteligencia emocional, significa tener una profunda comprensión de las emociones, fortalezas, debilidades, necesidades y motivaciones propias.
Las personas con alto grado de autoconciencia son honestas consigo mismas y con los demás. Saben cómo sus sentimientos los afectan a ellos, a otras personas y a su desempeño en el trabajo. Tienen conciencia de sí mismo, sabe hacia dónde se dirige y por qué. Pueden hablar acertada y abiertamente (aunque no necesariamente de forma de confesar) sobre sus emociones y el impacto que tienen en su trabajo. A menudo demuestran una sed de crítica constructiva. Tienen confianza en sí mismas. Comprenden muy bien cuáles son sus limitaciones y saben cuándo pedir ayuda.
A los líderes con autoconciencia alta, se les exige constantemente que tomen decisiones que requieren una valoración franca de todas las capacidades (las propias y las de los demás).
La autorregulación
Es como una constante conversación interior, es el componente de la inteligencia emocional que nos libera de ser prisioneros de nuestros sentimientos. Las personas inmersas en tal conversación tienen malos estados de ánimo e impulsos emocionales como todos los demás, pero hallan formas para controlarlos e incluso canalizarlos de manera útil.
¿Por qué es tan importante la autorregulación en los líderes? Ante todo, las personas que dominan sus sentimientos e impulsos (las personas razonables) son capaces de crear un clima de confianza y de justicia. Con autorregulación, la productividad es alta y tiene un efecto pegajoso con los demás, nadie quiere ser el que no se sabe controlar.
También es importante por la productividad y porque ayuda a las personas a ser capaces de correr junto a los cambios, a veces, incluso lideran el avance. La autorregulación refuerza la integridad y la fortaleza organizacional.
Las señales de autorregulación emocional, por lo tanto, son fáciles de ver: propensión a la reflexión y la contemplación; comodidad con la ambigüedad y con el cambio; e integridad, la capacidad de decir que no a los deseos impulsivos. A las personas que pueden dominar sus emociones se las percibe a veces como seres impasibles, y sus maduradas respuestas se interpretan como carentes de pasión porque no hacen lo mismos que todos.
La motivación
Todos los líderes eficaces se sienten impulsados a obtener logros más allá de las expectativas (de las propias y de los demás). Y les motiva un profundo deseo interno de lograr el éxito por el simple hecho de lograrlo, no les motivan factores externos.
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