Análisis comparativo – Diferentes teorías del desarrollo
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República Bolivariana de Venezuela
Ministerio del Poder Popular para la Educación Superior
Universidad Bicentenaria de Aragua
San Cristóbal – Estado Táchira
Análisis comparativo – Diferentes teorías del desarrollo
A Fabio
C.I:
Psicología
San Cristóbal 16 de junio de 2.017
La Psicología del Desarrollo surge para resolver las incógnitas que se tienen acerca del desarrollo humano y los factores biológicos, psicológicos, socioculturales y del ciclo vital determinan el desarrollo durante las etapas de la vida, desde el vientre materno hasta la vejez.
El desarrollo humano es un proceso complejo que se divide en cuatro apartados básicos: desarrollo físico, cognoscitivo, emocional y social, los cuales se denominan enfoque multidimensional. Al mencionar los cuatro apartados del desarrollo se hace referencia a la multidimensionalidad del mismo, ya que toma elementos de la biología, fisiología, medicina, educación, psicología, sociología y antropología.
Algunas teorías son descritas mediante etapas o estadios de desarrollo los cuales están compuestos por características cognitivas, socio-afectivas y psicomotoras del sujeto, en relación a la edad, otros teóricos prefieren enfocar el estudio del desarrollo humano en función al criterio de continuidad y gradualismo. El desarrollo humano, tema central de este analisis, ha sido estudiado por algunas de las más importantes corrientes psicológicas que originaron una baraja de teorías, entre las cuales destacan la teoría Psicoanalítica de Freud, la teoría Conductista, la Teoría del Desarrollo Cognitivo de Jean Piaget, el Constructivismo Social de Vygotsky, además de los postulados de Henri Wallon, entre otras.
El auge del psicoanálisis en la primera mitad del siglo XX trajo consigo una serie de teorías que cambiaron los puntos de vista en referencia al desarrollo humano. Los planteamientos de Freud acabaron, al menos, con dos estigmas particulares de la psicología para la época: La conciencia y la razón jugaban un papel determinante en la conducta humana, o la inocencia sexual del niño. De hecho, Freud se encontraba convencido de que la nuestra conciencia era impermeable ante los motivos de nuestra conducta, y que por lo tanto, no estaban sujetos a la razón humana. Es por ello que concebía a la infancia como una etapa que no estaba exenta de los conflictos originados por fuertes “pulsiones”, tanto sexuales como agresivas, debido a que el individuo nacía con estas características.
Se considera que la Teoría Psicoanalítica fue una de las más influyentes en relación a la psicología del desarrollo. La teoría psicoanalítica establece que cada persona hereda los conflictos al igual que la forma de enfrentarse a ellos y superarlos. Al ocurrir una experiencia traumática durante esta etapa, el individuo tendrá un yo débil. De ocurrir lo contrario, una buena experiencia, el individuo será capaz de superar con mayor facilidad sus conflictos personales en determinadas situaciones. Además, Freud establece tres conceptos de forma hipotética: El Ello, que es el inconsciente, el instinto con el cual nace el individuo, que lo permite guiarse por el principio del placer, el cual determina que el instinto sea saciado al momento. El Yo, que es la parte racional del individuo, desarrollándose al interactuar con la realidad; el Yo funge como domesticador del Ello, y se rige por el principio de realidad, en el cual hay que satisfacer el ello en una forma más apropiada y cercana a la realidad. Por último, el Superyo, que busca la perfección y el criterio, capaz de asimilar los valores morales de sus padres.
En base a esto, el desarrollo del ser humano es secuenciado en distintas etapas. Desde su nacimiento hasta que cumple seis años, el individuo pasa del Ello al Superyo. Comienza por la etapa Oral, etapa de la lactancia, donde el placer está centrado en la zona de la boca. Etapa Anal, desde la lactancia hasta los tres años, donde su interés se centra en el autocontrol de los esfínteres, experimentando placer al retener las heces; de allí en adelante el niño desarrolla autonomía. Etapa Fálica, desde los tres o cuatro años hasta los seis. El centro de placer está en el pene, donde los varones se sienten orgullosos por tenerlo y las hembras pueden envidiarlo. Aparece el superyó. Desde los seis hasta los doce años se manifiesta la etapa de latencia, donde los impulsos sexuales se adormecen. Finalmente está la etapa genital, donde ya se pasa a la adolescencia y por lo tanto ocurre el despertar de la madurez sexual. Dentro de la psicología del desarrollo, la teoría psicoanalítica ayuda a entender cómo es que los procesos mentales del subconsciente van cambiando en las distintas etapas del desarrollo en las cuales a la par se busca el conocerse a sí mismos, a través del placer, para posteriormente encontrar su lugar en la sociedad o sociedades a las cuales pertenece.
Los estudios de las diferentes etapas generan un aporte de gran relevancia a todas las ramas de la psicología del desarrollo. Es importante recalcar que el psicoanálisis también señala al afecto como un rol dominante en su concepción. Melanie Klein, basándose en las etapas propuestas por Freud, considera tres elementos esenciales durante el desarrollo infantil: el tipo de objeto con el que interactúa el niño, sus mecanismos de defensa y la fantasía inconsciente en la cual se fundamenta la relación. En el ser del niño coexistiría un objeto bueno junto a uno malo. Cuando el objeto bueno se internaliza constituye la base del Superyo. El bueno es ideal y amado, mientras que el malo es persecutorio.
Este mecanismo de defensa es conocido como la escisión. Además de Klein, Erik H. Erikson, psicoanalista alemán radicado en los Estados Unidos, hizo aportes con su legado a la Psicología del Desarrollo en la mitad del Siglo XX, con su Teoría Psicosocial, en la cual establece más etapas, considerando que la teoría psicosexual de Freud no contaba con suficientes etapas, fundamentado en que el desarrollo del ser humano se compone de etapas, pero se engrandece con el ambiente.
Erikson señala que cada etapa impone una dificultad, lo que se denomina como crisis de madurez, la cual deberá ser resuelta por cada sujeto, representará un factor en la relación entre el sujeto y el ambiente social en el que vive, supeditándose si es superada o no.
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