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COMO HABLAR PARA QUE LOS NIÑOS ESCUCHEN Y COMO ESCUCHAR PARA QUE LOS NIÑOS HABLEN


Enviado por   •  8 de Abril de 2014  •  2.409 Palabras (10 Páginas)  •  435 Visitas

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Este libro es un manual dirigido a los padres para ayudarlos a tener no solo una buena comunicación con sus hijos, sino también una mejor convivencia, a través de ejercicios muy prácticos y sencillos de recordar, imágenes, y una recopilación de relatos de padres que han utilizado estos métodos y en los que se pueden basar para tener una idea de lo que se debe hacer.

Recalcando siempre que todos los niños pueden reaccionar de forma diferente, por lo que es necesario tener paciencia y tomarse el tiempo para afrontar la situación con ganas de solucionarla.

Lo que pienso es que algunas de estas técnicas se pueden utilizar no solo con niños, sino con personas en la vida cotidiana, inconcientemente creo que las personas quieren ser escuchadas cuando tiene un conflicto y algunas veces no sabemos que decir en esa situación o lo que decimos termina por empeorar el estado de animo de la persona. El solo saber escuchar y ser empatito puede ser de mucha ayuda en futuras conversaciones.

Capitulo 1 Como ayudar a los niños a enfrentarse a sus sentimientos

En esta primera parte se presentan varias conversaciones cotidianas entre una madre y su hijo, en una de ellas, él está tratando de expresar a su madre que se siente cansado y la primera reacción de ella es decirle que eso no puede ser posible ya que acaba de dormir una siesta, teniendo como reacción del pequeño un berrinche. Esto pasa porque al estar negando sus sentimientos se siente confundido y frustrado, se le esta enseñando a no confiar en su propia percepción e imponiéndole una ajena. Ahora en vez de esto se plantea, primeramente, el niño esta tratando de decirle a la persona mas importante en su vida como se siete, es por eso que se debe aprender a escuchar, para luego tratar de contestar de tal manera que surja una buena conversación, una frase podría ser “oh, así que estas cansado aun después de haber dormido”, así el sentirá que esta siendo escuchado y que han entendido como se siente, ese simple echo hará que sea mas fácil superar y dejar atrás aquello que le aflige.

Algo que nunca se debe hacer cuando un niño nos esta planteando un problema es interrogarlo, el “¿porque no hiciste esto…? O cualquier otro consejo solo le hará sentirse juzgado y no podrá razonar por el mismo una solución. En estos casos con una simple frase como “Mmm...” u “Oh, ya veo”, es de mucho mas ayuda que un consejo.

Me impresiona como unas simples frases pueden llegar a ayudar tanto, en la vida cotidiana muchos padres no suelen hacer esto, siempre que un niño se siente cansado para seguir andando al hacer las compras, la primera reacción de la madre es decirle que siga caminando y si no quiere termina llevando al niño llorando casi a rastras. Es ahí donde me pongo a pensar “¿y no puede sentarse a descansar un minuto?” si se tiene prisa bastaría con que le explicara al pequeño que entiende que esta cansado y que se ha caminado mucho, pero en poco tiempo terminaran las compras e irán a casa, se me hace mas razonable que casi regañarle por no querer seguir y causar todo un drama que retrazara aun mas las compras.

Englobando este mismo tipo de situación se presenta un ejemplo para ponerse en lugar de una persona que tiene un problema y el como se reaccionaria a ciertas frases que se suelen usar para dar consejo, preguntar mas detalles, juzgar las acciones de la persona etc., me di cuenta que a pesar de que yo en ocasiones he hablado de esa manera, el imaginarme a alguien responderme así me enfurecía, en otros me desalentaba y aun si las intenciones de esa persona con la que se habla son buenas, no es de mucha ayuda que te trate de resolver la vida o se ponga de acuerdo contigo solo porque es tu amigo, siendo que solo se requiere desahogarse de esa mala experiencia para poder dejarla de lado y pensar con claridad.

Otra experiencia que se me hizo muy interesante fue el de una niña a la cual se le murió su tortuga, ciertamente este tipo de situaciones es muy difícil de afrontar, ya no solo para ella, sino también para los padres, que reaccionan diciendo cosas como “no es para tanto” o “te comprare otro igual”, siempre negando los sentimientos por miedo de cómo lo pueda tomar su hijo y lo que siempre pasa es que haga un berrinche y se deprima.

En vez de eso, se debe de dar un nombre al sentimiento, cuando el niño escucha lo que esta experimentando se siente profundamente consolado, ya que alguien ha reconocido su experiencia interna.

También el darles el deseo a la imaginación, cuando un niño quiere algo que en ese momento no es posible de dársele, el solo hecho de reconocer junto con el su deseo, le será mas fácil aceptar la realidad de la situación, optando por otras opciones o dejándolo pasar.

En todo esto siempre se debe tener cuidado en no dar una respuesta fría o repetitiva a lo que ha dicho el niño, incluso algunas veces no se necesita decir una sola palabra, se debe ver la situación y analizar que seria mejor en ese momento, aun si cometemos un error los niños son abiertos y siempre abra segundas oportunidades para corregirnos.

En la segunda parte de este capitulo aparecen preguntas de padres, en la mayoría se recalca lo visto anteriormente, solo en una muestra otra forma de ayudar a los niños a demostrar sus sentimientos cuando están demasiado alterados, se puede dar la alternativa de hacer un poco de actividad física, como golpear una almohada o cajas de cartón, aunque lo que mas cómodo les parece a los padres y les gusta a los niños es el dibujar lo que sienten, así tracen un montón de líneas o trocen el papel, el estar el padre observando aquello le hará comprender que puede entender y aceptar su enojo, a diferencia de lo que se suele hacer siempre que es decirle “ya cálmate”, “no llores”, no esto o lo otro, evitara que se le de una solución rápida al asunto.

Pero el aceptar sus sentimientos no significa que se deba ser permisivo con cualquier cosa que haga, se debe hacer entender que se comprende como se siente pero que no por eso tendrán el derecho de comportarse de forma inadecuada y por lo regular de esta forma aceptan los límites impuestos.

Posteriormente se presentan narraciones de conversaciones entre padres e hijos las cuales han resultado exitosas, una que me gusto mucho fue la de una niña en medio de un ataque respiratorio, su abuela se encontraba gritando cosas negativas, la madre lo que hizo fue hacerle entender a la niña que sabia como se estaba sintiendo mientras los médicos trataban de estabilizarla, esa experiencia para un niño es algo muy difícil de aceptar y el sentir que su madre la entiende y que estará ahí para ella no importa lo que pase le hizo sobrellevar no solo emocionalmente esa situación sino que ayudo a relajarla

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