Desarrollo psicosexual del niño

Introducción.

“La sexualidad radica en el centro de la vida humana, de lo que nos hace plenamente humanos” (Jamtin Carin, 2006, pág. 2). La sexualidad humana representa grandes cambios en un individuo en los aspectos fisiológicos, psicológicos y culturales que se desarrolla desde su nacimiento lo cual definirá la personalidad en su vida adulta; Freud los denomina como etapas pre-genital y psicosexual, en estas etapas el ser humano desarrollará su sexualidad, tiene que desarrollarse en un ambiente en donde sus progenitores deben acompañarlo en todo momento.  

En el presente ensayo se abordará la temática sobre la sexualidad infantil del ser humano su perspectiva en la antigüedad, hasta los grandes cambios que tuvo en la sociedad con las aportaciones científicas de Sigmund Freud, lo cual llevó a postular su teoría del desarrollo psicosexual del ser humano.        

Tesis.

La aportación de la teoría de Sigmund Freud en el desarrollo  psicosexual del ser humano, aporto a la psicología grandes avances ya que épocas anteriores solo se pensaba que el desarrollo de la sexualidad solo se daba en la etapa adulta.  

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Desarrollo.

El estudio de la historia de la sexualidad tiene una doble importancia, nos señala que “un mismo tema puede ser considerado de formas radicalmente opuestas en función de factores ajenos al mismo como socioeconómicos, religiosos, culturales, etc.” (León Andrés, 1999, pág. 818), y nos permite comprender algunas de las aptitudes y concepciones morales del presente., ya que anteriormente se consideraba que la sexualidad solamente se desarrollaba en la etapa adulta, sin embargo Sigmund Freud considera que los niños también tienen elementos sexuales esto es debido a que a que placer es igual a sexualidad, ya que cualquier forma de entender el placer es a través de una posición sexual, sin que el sexo intervenga, por ello se habla de una sexualidad infantil.  

La sexualidad de una persona, “es definitiva, se va moldeando a partir de un ambiente determinado en donde interactúa desde el principio de su vida, de la misma manera que va contribuyendo a la formación de otro aspecto típicamente humano que es la personalidad” (Barone Luis, 2006, pág. 147), en este sentido Freud considera a tres componentes de la personalidad se van configurando con las primeras experiencias de la infancia a medida que la persona atraviesa una serie de etapas psicosexuales. Su interés científico se Freud se basa en la neurología y posteriormente en el psicoanálisis en donde sus ideas acerca de la sexualidad infantil consiguieron despertar en amplios sectores de la sociedad la conciencia de que el sexo era un aspecto esencial de la vida y el comportamiento humano relacionado a la sexualidad que desarrolla desde nuestro nacimiento.

El ser humano pasa por distintas etapas de evolución en la que se producen cambios en el mismo y con los demás, estas etapas son nominadas etapas de evolución pre-genital y psicosexual  de la libido que se describiría como la energía que corresponde a la sexualidad, en estas etapas el individuo buscar distintas formas de satisfacción de la sexualidad y fantasías; Freud descubrió estas etapas y las zonas  en la que se centra el placer en cada momento del desarrollo. Estas etapas nos permiten comprender las características de la personalidad y el comportamiento es por eso que se consideran el motivo más especial en la vida expresado desde nuestra infancia en la búsqueda del placer; el niño busca aquello que le resulta agradable y evita aquello que le resulte doloroso. Este proceso de búsqueda se da de diferentes maneras durante toda nuestra existencia. En la base de todo esto se encuentra la libido que es la verdadera energía sexual que nos hace movernos en dirección a lo placentero.

Las etapas del desarrollo pre- genital y psicosexual en los diversos periodos que atraviesa el niño en su desarrollo se hacen dominantes y determinan algunas necesidades específicas, las cuales se relacionan con zonas específicas del cuerpo denominadas zonas erógenas. La primera etapa por la que atraviesa el niño es la etapa oral que comprende desde su nacimiento al primer mes de vida, en donde el punto principal del placer, conflicto y frustración se concentra en la boca, en donde el niño encuentra mayor placer chupar, morder pero estas actividades no tardan en ser reprimidas por los padres; el modo en que las necesidades que le surjan al niño son satisfechas o reprimidas durante este periodo marcan la formación de rasgos específicos de la personalidad tales como dependencia, actividad oral. La segunda etapa es la anal se comprende de la edad de un año a los dos años y medio; se caracteriza por la zona erógena que pasa de la boca al ano, en esta etapa el entendimiento higiénico hace que el niño centre su atención en actividades anales ya que siente un gran placer en el hecho de acumular o expulsar  sus heces fecales, lo que provoca un conflicto con los padres ya que ellos empiezan a pedir que se ejecuten estos actos de acuerdo a ciertas normas, para esto la madre recurre a castigar, regañar o  al igual forma compensarlo por el simple hecho de hacerlo, el siente sus heces como algo personal y valioso, puesto que a través del proceso de expulsar o retener las heces va afirmando su autonomía y dependencia, ya que lo hace porque es algo que sale de él.

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