La Educación Actual

ESCUELA NORMAL DE CHALCO

ENSAYO

“LA VIDA EN EL SALÓN DE CLASES; UNA DIFÍCIL TAREA QUE SE RESUELVE DÍA A DÍA”

INICIACIÓN AL TRABAJO DOCENTE

PROFESORA:

JUANA DOMÍNGUEZ

ALUMNA:

TUFIÑO CERVANTES JESSICA

NÚMERO DE LISTA: 18

SEGUNDO L.E.P.

“Ser maestro es pensar y sentir y hacer pensar y sentir”.

José M. Esteve

La preparación y el análisis de las jornadas de observación y práctica docente tienen como finalidad principal el contribuir al perfeccionamiento del desempeño de cada uno de los estudiantes normalistas; es decir, que obtengamos elementos para superar los problemas específicos que enfrentamos cuando tratamos de lograr que nuestros alumnos adquieran o consoliden algunos conocimientos o avancen en el desarrollo de ciertas habilidades o actitudes.

Los problemas o retos que enfrentamos al trabajar con los niños en un grupo escolar son como las de cualquier profesor de educación primaria, necesariamente diversos y dependen de varios factores como: las características del grupo (organización, actitudes para realizar las actividades) el dominio de los contenidos a tratar, las estrategias y métodos de trabajo (actividades de participación, valoración de actividades, interés y motivación), habilidades para comunicarse con los niños, así como el uso del tiempo, aprendizajes significativos, la planeación didáctica entre otras donde los futuros docentes nos enteramos y enfrentamos a múltiples situaciones y desafíos, tanto los que se refieren a la enseñanza de contenidos específicos como a la organización del trabajo, la comunicación y el mantenimiento del orden; por esta razón el aprovechamiento de las experiencias obtenidas es una tarea valiosa como indispensable para tener y prever los errores posteriores dentro de la enseñanza del grupo como Dean nos dice:

“la tarea del maestro es conseguir que el mensaje llegue lo más claramente posible y de forma que provoque una respuesta por parte de los niños y les ayude a equipar lo que se dice con lo que ya saben” (Dean, 1993:79).

La comunicación debe ser satisfactoria para propiciar un buen ambiente de trabajo, en las relaciones interpersonales, se deben establecer parámetros de confianza entre el alumno y el maestro para que así no se cree un desorden grupal.

Durante el tiempo trabajo pude encontrar debilidades y fortalezas en mi práctica docente, las actividades que en mis clases lograron la participación fueron cuando los alumnos trabajaron en binas, además de resolver ejemplos en la pizarra y aquella donde se realizaba una dinámica grupal, las que no me favorecieron en el desarrollo de clase; aquellas donde la clase se daba maestro-alumno, y trabajando de manera individual, las debilidades se observaron cuando los niños no asistían a la escuela, y cómo sabemos:

“La asistencia de los niños a la escuela es, en nuestra sociedad, una experiencia tan corriente que pocos de nosotros nos detenemos apenas a considerar lo que sucede cuando están allí” (Jackson, 2001: 3)

Por eso es importante tener una buena organización del grupo para así establecer una atmósfera de trabajo, las organizaciones efectivas permitieron un desenlace fructífero, (cambiaba de lugar a los alumnos más inquietos, ordenaba el trabajo en binas), para saber si la clase á sido eficiente es conveniente valorar los resultados de la misma; se debe realizar en todo momento mediante actividades donde los alumnos se den cuenta que tanto han aprendido para esto no debemos olvidar que:

“el maestro ha de poner en actividad sus capacidades mejores: atención, memoria, comprensión,

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