La resilencia

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La Resilencia

La resilencia es la capacidad de las personas que tienen para solucionar las situaciones difíciles que se nos presentan día con día y superarlos, y no estancarse en estos mismos; esta misma se encuentra asociada al autoestima de la persona.

Existe la resilencia positiva; la que consiste en enfrentar nuestros problemas no como tales, sí no como desafíos los cuales podemos enfrentar y superar con mayor facilidad, a comparación de si los vemos como un problema, ya que al verlo como si esta situación fuese un problema nos mentalizamos de tal manera que nos llegamos a bloquear, en cambio al llevarlo situado con un reto muchas personas a muchas personas les ayuda a conocer capacidades de ellos mismos que no conocían y pensaban que nunca podrían desarrollarlos.

La relsilencia está muy apegada a la autoestima, ya que con una buena autoestima te crees capaz de superar todos los obstáculos que se te van presentando a diario.

Esta de la misma forma se refiere a que a pesar de que no hayas superado los obstáculos como lo querías debemos mantenernos de pie y seguir adelante es como decir “Si me caigo, me levanto con mas fuerzas” se trata de no darte por vencido, si no de que lo vuelvas a intentar las veces que sean necesarias, aprender de los errores cometidos anteriormente, para no volver a repetirlos, no verlos como errores ni fracasos si no como una nueva oportunidad de hacerlo de nuevo y mejor.

Existen varios factores que están asociados a la resilencia, los cuales son: la capacidad para hacer planes realistas y seguir los pasos necesarios para llevarlos a cabo, tener una visión positiva de sí mismos y la confianza en sus fortalezas y habilidades, facilidad en la comunicación y en la solución de problemas, capacidad para manejar sentimientos e impulsos fuertes e inserción. 

En mi caso yo pongo como un ejemplo donde use la resilencia fue cuando mi mama abuela sufrió un embolia, para mí se me vino el mundo encima, quería dejar la escuela, estaba muy deprimida, pero con los pasos de los días lo vi como una nueva oportunidad para valorar todo lo que ella hacía y hace por mí, fue una oportunidad para demostrarme a mi misma y a ella que podíamos superar esa situación y que si lo lográbamos podríamos con eso y más, y a pesar de esto aquí seguimos aun, sin darnos por vencida en cualquier situación, aprendimos a controlar nuestra ira cuando nadie de mis tías o mi mama nos apoyaban, lo vimos como un desafío que teníamos que superar y lograrlo, y de esa forma así se nos facilito mucho más que verlo como un problema grabe donde estaba en juego la vida de mi mamá.

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