Pensamiento Critico

EL PENSAMIENTO ANALITICO

Clase 1

INTRODUCCION

Es el pensamiento dirigido a descomponer los argumentos en sus premisas o expresiones que la componen, indagar de las relaciones entre ellas y sus conclusiones, con el fin de juzgar la veracidad o confiabilidad de la misma.

El pensamiento analítico al ser ejercitado desarrolla la habilidad de investigar en un espíritu de búsqueda de verdades, fundamentadas en las evidencias y no en las emociones. Permite estar alerta al error tanto propios como de otros, al engaño y a la manipulación tan común en nuestros días manifestada en la proliferación de sectas y diversas creencias que llevan al hombre a apartarse de Dios. Otro beneficio es el de poder expresar los propios pensamientos e ideas con claridad, coherencia y precisión con efectos positivos en todas las áreas de la vida.

Todo ministro del evangelio debe entrenarse en el pensamiento analítico, y estar preparado para dar razón de la esperanza que hay en él (1 Ped 3:15), a contender ardientemente por la fe que nos ha sido dada (Jud 3) y a usar bien la palabra de verdad (2 Tim 2:15). Los predicadores son los hombres que señalan el camino a la salvación en medio de un mundo cegado e invadido por multitud de falsas enseñanzas que como tupidas selvas obstaculizan el avance hacia el amoroso Padre y nuestro Señor, y no solo debe señalar sino abrirse camino con la espada de la verdad, derribando argumento y todo lo que se opone al conocimiento de Dios (2 Cor 10:5).

La necesidad de este curso deriva de la exposición clara y abundante en las Escrituras del poder del engaño en el mundo y sus devastadores efectos:

Y dijo la mujer: La serpiente me engañó, y comí. Gn. 3.1–5, 13

Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo. 2 Co 11.3

Pueblo mío, los que te guían te engañan, y tuercen el curso de tus caminos. Is 3.12

Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?

Jr 17.9-10

Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe. Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán. Mt 24.4-5

Y muchos falsos profetas se levantarán, y engañarán a muchos; Mt 24.11-12

Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos. Mt 24.24

 Los alguaciles respondieron: ¡Jamás hombre alguno ha hablado como este hombre! Entonces los fariseos les respondieron: ¿También vosotros habéis sido engañados? ¿Acaso ha creído en él alguno de los gobernantes, o de los fariseos? Mas esta gente que no sabe la ley, maldita es. Jn 7.46-50

Pero había un hombre llamado Simón, que antes ejercía la magia en aquella ciudad, y había engañado a la gente de Samaria, haciéndose pasar por algún grande. A éste oían atentamente todos, desde el más pequeño hasta el más grande, diciendo: Este es el gran poder de Dios. Y le estaban atentos, porque con sus artes mágicas les había engañado mucho tiempo.  Hch 8.9-12

Porque tales personas no sirven a nuestro Señor Jesucristo, sino a sus propios vientres, y con suaves palabras y lisonjas engañan los corazones de los ingenuos. Ro 16.18

… para que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del error… Ef 4.14-15

Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo… Col 2.8

Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios; 1 Ti 4.1-2

Porque muchos engañadores han salido por el mundo… 2 Jn 7

… y saldrá a engañar a las naciones que están en los cuatro ángulos de la tierra,

Ap 20.8

Hermanos, si alguno de entre vosotros se ha extraviado de la verdad, y alguno le hace volver, sepa que el que haga volver al pecador del error de su camino, salvará de muerte un alma, y cubrirá multitud de pecados. Stg 5.19-20

Así que vosotros, oh amados, sabiéndolo de antemano, guardaos, no sea que arrastrados por el error de los inicuos, caigáis de vuestra firmeza. 2 P 3.17

¡Oh gálatas insensatos! ¿quién os fascinó para no obedecer a la verdad, a vosotros ante cuyos ojos Jesucristo fue ya presentado claramente entre vosotros como crucificado?

Gl 3.1

Yo conozco tus obras, y tu arduo trabajo y paciencia; y que no puedes soportar a los malos,

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