Trabajo De Modificación De Conducta

La ventaja de conocer un principio para utilizar es que proporciona la posibilidad de generar variaciones lógicamente paralelas de los procedimientos establecidos. La desensibilización sistemática corriente resulta ser inapropiada en un caso particular o una clase de casos, e pueden hacer intentos de aplicar con éxito, en otras maneras, el principio que consiste en inhibir recíprocamente pequeñas dosis de repuesta de ansiedad cada vez.

La respuesta de ansiedad inhibe las respuestas sexuales de una manera especialmente directa porque involucra algunas de las funciones muy autónomas que están relacionadas con la respuesta sexual.

Cuando una persona presenta continuamente repuesta de ansiedad considerable u otra perturbación emocional, generalmente es deseable y a menudo posible obtener mejora por medio del empleo de fármacos.

Entraste con los métodos desensibilización y sus débiles respuestas, se encuentran los tratamientos que implican respuestas muy intensas.

Los procedimientos operantes que se emplean en la práctica clínica generalmente siguen unos paradigmas experimentales que han emergido del trabajo de Skinner y colaboradores. Las explicaciones explícitas de esto paradigmas no figuran mucho en el tratamiento de las neurosis, que son principalmente hábitos autónomos.

CAPÍTULO 7:

1- Variaciones técnicas del procedimiento de desensibilización estándar

La esencia de la desensibilización sistemática es la presencia de estímulos imaginarios graduados a un paciente, en estado de relajación. Uno de los modos es automatizar algunos de los procedimientos de tal modo que no necesitan la presencia física del terapeuta. El segundo consiste en desensibilizar en grupo a los pacientes que sufren miedos neuróticos similares.

Auxiliares mecánicos de la desensibilización sistemática.

Lang (1966) fue el primero en demostrar que podía realizarse con éxito desensibilización por medio de una maquina. Las fobias a las serpientes fueron superadas mediante el empleo de dos grabadoras, una de las cuales contenía ítems de jerarquías y la otra instrucciones para relajarse

Para preparar la cinta para la desensibilización, Migler y Wolpe dieron los siguientes pasos:

1- Se grabaron las instrucciones para relajarse: “Relájate pantorrillas, muslos, brazos, antebrazos, hombros, cuello, mandíbula, frente.

2- Una hoja metálica fue pegada a la cinta final de las instrucciones para relajarse. Después de cada escena grabada en la cinta venia una hoja metálica semejante.

3- Justo después de la hoja metálica y antes de la primera escena, había unas cuantas instrucciones para relajarse: “Relájate brazos, piernas, estomago, pecho, cuello y todos sus músculos faciales. Ahora haga una pausas hasta que se sienta relajado”.

4- Después de estas instrucciones para relajarse, la cinta contenía instrucciones para visualizar la primera escena de la jerarquía.

5- Diez segundo de silencio grabados seguían a la instrucción de hacer una pausa, lo cual daba lugar a diez segundos de visualización clara.

Actualmente las grabadoras son muy empleadas para la desensibilización en casa. Son muy adecuadas las grabadoras baratas. Ofrecen mucho más flexibilidad que una grabación fonográfica.

Desensiblizacion en grupo

Si varios pacientes sufren la misma fobia, es razonables esperar que, después de haber sido estrenados para relajarse puedan ser desensiblizados simultáneamente, incluso si las indicaciones de sus jerarquías no son idénticas, siempre y cuando el terapeuta se asegure de que cada escena ha dejado de provocar respuesta de ansiedad en todos los pacientes antes de para a la escena siguiente.

Es obvio que esta disposición puede ahorrar mucho tiempo al terapeuta. Por ejemplo Paul y Shannon (1966) dedicaron un promedio de menos de dos horas de tiempo del terapeuta por paciente en el entrenamiento de una respuesta de ansiedad “evaluativa social” intensa en unos estudiantes universitarios, repuesta de ansiedad que se manifiesta como medio e incapacidad en las situaciones de hablar en publico (miedo escénico). En un seguimiento de dos anos, Paul (1968) encontró que la mejoría lograda mediante este tratamiento se había mantenido o incrementado.

2- Respuesta alternativas contra ansiedad que se emplean con estímulos imaginarios

Respuestas provocadas por terapeuta

A veces, la emoción es una repuesta de ansiedad, pero con mucha frecuencia parecía que fuera una mezcla de esperanza, de confianza en el experto y de otras emociones positivas condicionadas antes los médicos y sus consultorios. Es probable que corresponda a la “transferencia positiva” del psicoanalista en el sentido amplio. Cuando ocurre puede inhibir respuestas de ansiedad relativamente débiles que son provocadas verbalmente durante la entrevista.

Con sujetos que no pueden aprender a relajarse o que resisten a “dejarse ir”, vale la pena presentarles escenas jerárquicas con la esperanza de que la emoción provocada por el terapeuta inhiba la respuesta de ansiedad.

Respuestas provocadas por estimulación eléctrica

a) Desensiblización basada en la inhibición de la ansiedad por partes de una repuesta motora condicionada. En la aplicación de este hallazgo, la paciente que tiene una jerarquía de ansiedad, se le pide que imagine una escena de la manera usual y que indique cuando es clara la imagen. Luego el terapeuta aplica en el antebrazo una descarga eléctrica muy leve, en repuesta, ala cal e paciente flexiona su brazo, una vez que de ante mano se le ha dado instrucciones para que lo haga.

b) Inhibición externa. El paciente vacía en un sofá con electrodos sujetos a sus antebrazos y con los ojos cerrados. Se le daba una escena, para que la imaginara, y cuando indicaba que se había formado claramente, el terapeuta exclamaba lo siguiente: “Músculos de los brazos, respondan

Respuestas provocadas por imágenes inducidas verbalmente

De este título se derivan tres métodos:

La imagen emotiva. Ese es el nombre de un procedimiento descrito por primera vez por Lazarus y Abramovitz (1965) en el que los estímulos jerárquicos se le presentan al paciente con una situación imaginaria en las que otros elementos provocan respuestas que se oponen a la respuesta de ansiedad.

La ira inducida. Este procedimiento que Goldstein, Serber y Piaget (1970) encontraron efectivo en seis de diez casos, consiste en hacer que el paciente aparece una imagen que provoque una respuesta de ira con escenas imaginarias que provocan respuesta de ansiedad o estímulos reales en el consultorio.

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