ADVENIMIENTO Y BASAMENTO DEL DERECHO TURÍSTICO

ADVENIMIENTO Y BASAMENTO DEL DERECHO TURÍSTICO

Renovamos a través de este conducto nuestro saludo fraternal a los compatriotas, y formulamos a la vez nuestra invitación a los profesionales y técnicos del derecho y el turismo, docentes de todo nivel educativo y estudiantes, empresarios y trabajadores, ante el advenimiento de esta nueva rama del derecho que causalmente iniciamos en nuestro país sustentándolo en actos preparatorios por aproximadamente dos décadas, deviniendo en el advenimiento del Derecho Turístico obligándonos en acudir necesariamente a otras ramas del derecho, las mismas que giran a su alrededor en mérito a sus propias especialidades, verbigracia, del derecho constitucional, derecho administrativo, derecho civil, derecho comercial, derecho empresarial, derecho aeronáutico, derecho del consumidor, entre otras dentro del derecho nacional e internacional que resulten aplicables dada la complejidad que hoy alcanza el turismo en el mundo de lo cual no puede ni debe estar alejada nuestra Patria.

Del mismo modo, complementariamente se presenta la exigible interrelación con otras especialidades como la economía, la antropología, la sociología, la psicología, la ecología, etc. que no hace sino dejar ver la complejidad que el turismo supone.

En línea de lo antes expuesto, podemos decir que el derecho turístico se sustenta en un conjunto de normas jurídicas que regulan las relaciones a partir de contratos que contienen ofertas de los proveedores especialistas en la prestación de servicios turísticos, versus las correspondientes contraprestaciones económicas a cargo de los turistas en su condición de consumidores, muchas veces en una situación de alta vulnerabilidad, significando ello una relación jurídica bajo la atenta observancia del Estado en su rol ineludible de protección correspondiente a su finalidad social.

Como quiera que el turismo como fenómeno social representa una importante parte de la economía del país es comprensible por razón de su especialidad que gana poco a poco espacio, contando ahora en nuestro país con una Ley General del Turismo, verdadera norma jurídica que determina el marco que delimita los alcances complementarios y subordinados de las demás normas jurídicas que le siguen en menor jerarquía en el sector turismo.

En el plano internacional, también se enriquece en la medida de la intervención a través de directrices y recomendaciones de organismos supranacionales como la Organización Mundial de Turismo - OMT, de las relaciones nacientes entre los propios Estados, todo lo que contribuye a procurarse facilidades, intercambiar todo tipo de información, auxiliarse en el derecho comparado, promover investigaciones, intercambiar especialistas, compartir experiencias en materia de seguridad, promover la inversión nacional e internacional y por ende generar fuentes de trabajo, etc.

En el mismo plano a que se contrae el párrafo precedente se podrá colegir que es una industria multidimensional, identificada con la prestación de servicios, a partir de bienes públicos y privados, pero lo está también ligado a los sectores involucrados en materias diversas como transporte, seguridad, educación, cultura, trabajo, infraestructura, el ambiente y con ello los recursos naturales y demás servicios conexos, entre otros, lo que nos permite colegir que no solo pone en marcha una serie de actividades empresariales sino el ingreso de divisas para el país, contribuyendo al intercambio cultural y tecnológico por la existencia de diversas realidades, a la integración de los pueblos, tan necesaria en nuestro país si lo vemos desde el punto de vista del turismo interno o nacional.

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