Atención al alumnado con necesidades educativas especiales

Desarrollo de la prueba

Iván es un niño de 8 años escolarizado en un centro público de la comunidad de Madrid. Cursa 2º curso de Educación Primaria y presenta hipoacusia moderada debido a una perforación timpánica en el oído izquierdo. Se detectaron dificultades en la normal adquisición del lenguaje de este niño durante el primer año de escolarización en el centro ordinario (primer curso de Educación Infantil, cuando tenía 3 años), pero no se solicitó la valoración del caso al equipo psicopedagógico hasta tercer curso de Educación Infantil cuando el niño tenía cumplidos los 5 años. Según el informe psicopedagógico el niño presenta necesidades educativas especiales asociadas a una discapacidad auditiva.

1. Justificación legislativa del tipo de escolarización y medidas de atención aplicables a este caso. 

La hipoacusia de Iván se encuentra dentro del grupo de necesidades educativas especiales permanentes, en la categoria de discapacidades de tipo sensorial.

Y como dice la ley  “Con respecto al alumnado con necesidades educativas especiales, la escolarización debe garantizar los principios de normalización e inclusión, de manera que se asegure la igualdad y la no discriminación, y se fomente la identificación, valoración e intervención temprana”.

Cuando un niño con discapacidad auditiva comparte centro educativo con oyentes, no es fácil para ellos, salen de su zona de confort. Se sienten inseguros y vulnerables. Pero por otro lado este tipo de escolarización facilita el intercambio y mejora la capacidad comunicativa, la normalización y la integración social.

También la escolarización en centros ordinarios favorecerá el entendimiento, los aprendizajes,  la resolución de conflictos; es más efectiva que la educación combinada o la especial.

Su escolarización debe garantizar los principios de normalización e inclusión.

De Normalización usando medios ordinarios para atender a niños con discapacidad, siempre con el objetivo de desarrollar al máximo sus capacidades.

Y de inclusión con intervenciones dirigidas por parte de los especialistas en audición, que combinen la atención individualizada con la atención dentro del contexto educativo  y social.

Sin embargo cuando hablemos de intervención, en este caso no fue una intervención adecuada, ya que  debería haberse iniciado en el mismo momento que se detecto algún tipo de dificultad en su aprendizaje, de ahí el nombre intervención temprana.

Según dice el Real Decreto 126/2014 “Tan pronto como se detecten dificultades de aprendizaje, se pondrán en marcha los mecanismos de refuerzos organizativos y curriculares, y se consideran el apoyo en el grupo ordinario, los agrupamientos flexibles o las adaptaciones del currículo”.

Tanto la detección como la intervención deben hacerse lo antes posible; Y estos mecanismos no se pusieron en marcha hasta dos años más tarde de los primeros indicios de dificultad en su desarrollo, por lo que el sistema aquí fallo. Es de vital importancia detectar cuanto antes las necesidades de aprendizaje que el alumno pueda tener, para así poder erradicar o mitigar sus efectos, frenarlos o corregirlos.

En cuanto a las medidas de atención para un niño que sufre una discapacidad auditiva, deberán ser ordinarias e individualizadas.

Aunque el tipo de sordera que sufre es leve, necesitaría apoyos y medidas especiales para conseguir superar las dificultades que puedan aparecer en su desarrollo.

 El centro educativo por su parte deberá proporcionar a Iván

• En la acción docente: Los maestros ajustarán el lenguaje al nivel de las necesidades de Iván, se podrá hacer el lenguaje bimodal (oral y signado; oral escrito) si llegase a ser necesario. Las actividades en grupo se intentarán dividir en grupos más pequeños, de menos miembros ya que cuanto menor sea el grupo menos le costará a Iván escuchar y entender lo que dicen.  
• En la acción rehabilitadora: Le proporcionará asistencia de logopedas, profesor de audición y lenguaje especializados. Esa Atención rehabilitadora se hará de manera específica, individual y/o grupal según las necesidades del niño. Y dispondrá de un profesor capacitado para la lengua de signos si Iván lo necesitase.
• En equipamiento: Dispondrá de equipos de amplificación auditiva para el tratamiento y rehabilitación de la audición y el lenguaje. También de medios informáticos específico para el desarrollo del lenguaje oral y escrito.

2. Reflexión argumentada a favor de la inclusión del alumno en un centro ordinario garantizando de esta manera los principios sobre los que versa la educación inclusiva.

La educación inclusiva se fundamenta en atender las necesidades de todos los alumnos, absolutamente todos sin excepción, favoreciendo la participación de todos ellos en su aprendizaje.

Por lo tanto un niño como Iván con un tipo de necesidades educativas especiales deberá estar incluido en el centro ordinario, él y cualquier niño, con o sin algún tipo de discapacidad.

La escuela inclusiva se basa en tres principios presencia, rendimiento y  participación.

La presencia significa que la institución educativa deberá acoger a todos los alumnos; por lo que deben estar presentes en las escuelas todo tipo de alumnos y ser valorados y tratados de la misma manera; respetando las necesidades educativas particulares que cada uno pueda tener.

El Rendimiento hace referencia a que el objetivo de la educación es el mismo para cada alumno, sacar el máximo de sus capacidades para que puedan desarrollarse el máximo de su potencial; para ello se dispondrá de las medidas y recursos necesarios para poder lograr este fin.

Y la participación se refiere a que no sólo deberán estar presentes en los centros, además deberán participar de la vida educativa y social del centro. Es responsabilidad de los profesionales del centro el garantizar esa participación.

La escuela inclusiva es otra demostración más del progreso y del desarrollo de la humanidad.

Donde antes se marginaba y escondía a niños que no cumplían con los estándares de normalidad, en centros especiales. Ahora estos niños pueden sentirse como cualquier niño y tener una vida normal gracias a este tipo de iniciativas de integración e inclusión.

La inclusión supone la integración de todos los niños, define la diversidad como algo positivo y enriquecedor para todos, proponiendo una educación adoptada al entorno y a las circunstancias particulares de los alumnos. No sólo de los que tengan algún tipo de dificultad en el aprendizaje sino que se dirige a todos los niños del contexto educativo y social.

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