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CASO DE JAMES


Enviado por   •  8 de Julio de 2015  •  3.015 Palabras (13 Páginas)  •  1.221 Visitas

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Universidad Autónoma de Madrid

3º Magisterio Educación Especial

PROCESO DE INVESTIGACIÓN DE UN ESTUDIO DE CASOS

CASO DE JAMES

Estudio de un caso: Comportamientos raros en un adolescente con un Trastorno del desarrollo.

James es un chico de 15 años, el segundo de tres hermanos, con una larga historia de retraso o desarrollo anormal. Sus padres hicieron que lo evaluaran porque su comportamiento iba empeorando. Después de unos 2 años, aproximadamente, de esa evaluación, James se ha ido volviendo cada vez más rígido e inflexible y su insistencia en llevar a cabo las rutinas causa muchos problemas. No tiene verdaderos amigos y presenta gran cantidad de idiosincrasias. Repite una y otra vez determinadas frases de la televisión y está fascinado con los trocitos de cuerda e hilitos. Ha recogido cantidades considerables de esos objetos, e insiste en llevarlos consigo. Cualquier intento por apartarle de ese interés insólito hace que se agite con períodos de temblores corporales o sacudidas de cabeza.

En el examen, James presenta un patrón anormal de interacción social, con escaso contacto ocular y mostrándose relativamente desinteresado en las relaciones sociales. No utiliza expresiones faciales, gestos o posturas corporales para regular la interacción y carece de reciprocidad emocional. Sus padres refieren que tiene grandes problemas para mantener una conversación y que sólo le interesa comentar algunos programas de

televisión y su colección de cuerdas. Su lenguaje es estereotipado y repetitivo, de carácter monótono. Sus padres dicen también que cuando el chico está excitado, presenta algunos comportamientos estereotipados y que tiende a adherirse a varias rutinas no funcionales (p. ej., siempre da tres vueltas alrededor de la silla antes de sentarse en ella, práctica observada por el clínico durante la evaluación). Su área afectiva está altamente constreñida, y su capacidad de introspección y razonamiento es escasa. No se observan ideas delirantes, alucinaciones ni otros fenómenos psicóticos.

James nació en una familia trabajadora después de un embarazo y parto normales. Según su madre, de niño era poco exigente y relativamente tranquilo y, desde las primeras semanas de vida, parecía “diferente”. Al contrario de sus dos hermanos, James parecía estar mucho menos interesado en la interacción social. Los cambios motores importantes tuvieron lugar en el momento esperado, pero el desarrollo del lenguaje se retrasó de manera significativa. Llegó a pensarse que James era sordo, pero una audiometría indicó que, en principio, no había alteraciones en su oído. Aunque inicialmente su pediatra afirmaba que era un “hablante tardío”, sus padres continuaron preocupándose y, a los 36 meses de edad, buscaron una nueva evaluación. En las pruebas, James demostró dispersión en las habilidades de desarrollo, con un retraso grave en el lenguaje y en las habilidades cognoscitivas mediadas por el lenguaje, aunque estaba muy cerca del nivel de su edad en algunas habilidades motoras y cognoscitivas no verbales. James decía sólo unas cuantas palabras simples que utilizaba para hacer peticiones de comida en lugar de utilizarlas para el contacto social. Era incapaz de seguir órdenes simples y tenía grandes dificultades en tareas que implicaban la imitación. Destacaba la intolerancia a los cambios. Por ejemplo, insistía en que sus padres siguieran exactamente la misma rutina al irse a dormir cada noche y se agitaba sobremanera si aparecía cualquier cambio en el patrón habitual. También era muy sensible al entorno inanimado, de manera que, aunque con frecuencia parecía que casi no recordara la voz de su madre, podía sentirse aterrado cuando oía la aspiradora. Su juego consistía en la manipulación de objetos simples con una perseverancia considerable. Una extensa evaluación médica mostró un electroencefalograma y una tomografía computarizada normales. El análisis genético y de cromosomas también fue normal. Como antecedente familiar sólo se detectó, en su hermano mayor, un retraso en el habla mucho menos grave.

Como resultado de esta evaluación, a los 3 años se le diagnosticó Autismo infantil. Comenzó un programa intensivo de intervención temprana que le aportó cierta mejoría, sobre todo en términos de vocabulario expresivo. Sin embargo, su habla se caracterizaba por ecolalia, una literalidad extrema y una voz monótona. James tenía problemas con el lenguaje en situaciones sociales.

Durante la edad escolar, el chico adquirió habilidades sociales más diferenciadas, aunque también desarrolló varias conductas autoestimuladotas, básicamente temblores corporales y golpes de cabeza, así como la afición de coleccionar cuerdas. Aunque seguía siendo extremadamente sensible a los cambios en su entorno y se resistía a ellos, se pudo observar un progreso desigual aunque firme. La evaluación psicológica formal a los 10 años de edad reveló una puntuación de CI situada en el intervalo de ligero retraso, con considerable dispersión en los resultados de los subtests. A los 12 años de edad, sus raros intereses y su dificultad para enfrentarse con situaciones de cambio habían disminuido ligeramente, y acudía a algunas clases al día en una escuela pública.

Sin embargo, al inicio de la adolescencia, el comportamiento del chico se deterioró, sobre todo después del inicio de un trastorno convulsivo a la edad de 14 años. Se volvió conductualmente más rígido, retornó su afición infantil de coleccionar materiales raros, y se le hizo difícil centrarse en actividades educativas o laborales.

James ha acudido a un colegio de educación especial debido a que a los tres años se detectó su Autismo. En este centro, el equipo de orientación junto con el tutor y el profesorado han participado activamente colaborando con el equipo psiquiátrico en la observación directa, el paso de pruebas y el asesoramiento a la familia de James. El profesorado ha estado en contacto directo con el equipo psiquiátrico manteniéndolo informado de cualquier cambio o evolución relevante para el caso.

Diagnóstico DSM-IV-TR

Eje I: F84.0 Trastorno autista [299.00]

F70.9 Retraso mental leve [317]

Eje II: Z03.2 Sin diagnóstico [V71.09]

Eje III: Trastorno convulsivo [345.9]

Eje IV: Trastorno convulsivo, inicio en la adolescencia

Eje V: EEAG = 35 (actual); 40 (mayor nivel en el año anterior)

Criterios para el diagnóstico del F84.0 Trastorno autista (299.00)

A. Existe un total de 6 (o más) ítems de 1, 2 y 3, con por lo menos dos de 1, y uno de 2 y de 3:

1. Alteración cualitativa de la interacción social, manifestada al menos por dos de las siguientes

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