Cuento Inventado

Wendy solano

ANTONIO

Yo soy Antonio, mi vida transcurre en un sitio reseco, áspero y arenoso y ni siquiera los folículos pilosos crecen, a veces recorren ríos de espuma y de un liquido que quema mi piel, pero ya mi cuerpo ha hecho resistencia a eso, al principio mi piel se tornaba roja y dolorosa, la falta de folículos pilosos hacen que los rayos del sol lleguen directamente Asia mi y sientan sus brazadas hasta lo más profundo de mis entrañas, solo puedo succionar algunos vasos sanguíneos que aun no se han secado que es lo que me mantiene vivo….. en estos momentos me encuentro en la prisión de máxima seguridad “ occipital” de Capital Cabeza en mi vida no todo fue malo pertenecía a una de las familias aristocráticas de capital cabeza era hijo de Bartolomé piojo y Amelia de piojo tenía una hermana o aun no sé si la tenga, porque encerrado en estas cuatro paredes y sin derecho a visitas y la vergüenza que a ellos los ha de acompañar,… creo que mis padres y mi hermana ya no se acuerdan de mi, fui uno de esos pequeños huevecillos que lograron salvarse de la inundación Nopion por eso mi padre y mi madre me deseaban con tanto anhelo y amor, prepararon para mi llegada los mejores atuendos, invitaron a sus mejores amigos, no podía quejarme era el único el más fuerte, mamá me cuido durante nueve meses con esmero, me protegió de cualquier avalancha e inundación química que pudiera llegar a capital cabeza para ese entonces papá solo era el empleado más de una empresa de farmacéutica mi madre, sacrificada y abnegada trabajaba para una empresa del estado, era una vida difícil, pero éramos una verdadera familia, mi hermana luchaba desesperadamente entre los computadores y el internet, estudiaba en una de las mejores universidades de capital cabeza, pero lo más importante es que esperaban mi llegada con el mayor anhelo, cada uno vivía su propia historia sobre como seria la vida conmigo, las reuniones de familia se tornaban muy cortas porque las actividades del día siguiente así lo ameritaban, al fin llego el gran día y como todos querían se reventó el huevo era un verano en horas de la madrugada y nací yo, al principio querían ponerme un nombre desacorde tal vez a mi personalidad y me colocaron Antonio como mi tío, creo que desde ese momento empezaron todas mis desgracias y desdichas, las cuales ahora estoy pagando, único hijo varón de esta familia, fui protegido y tal vez malcriado por todos ellos, a papá piojo orgulloso de sí mismo y de su carrera lo ascendieron, a mamá pioja la pusieron de planta, mi hermana orgullo de la familia termino su carrera con grandes honores, ya para ese entonces papá había comprado una casa en uno de los mejores condominios de capital cabeza en ciudadela parietal los mejores valles pilosos se encontraban allí, corrían ríos sanguíneos caudalosos fui a los mejores jardines infantiles, aprendí dos idiomas, papá empezó a salir a fiestas y reuniones de su empresa, empezó a beber demasiado, mamá sumida en la depresión busco consuelo en las drogas en esa situación coyuntural papá y mamá pensando cada uno en su mundo se olvidaron de que yo existía y deje de ser el centro de atención de mi mundo se caía a pedazos me sentía ,as solo que nunca, empezó a bajar mi rendimiento académico, me ensimisme, me aislé de cualquier grupo y desafortunadamente eso creo muchas debilidades ante los demás y empezaron a hacerme bullanga, me golpeaban, me encerraban en el baño, me metían de cabeza en el excusado y no podía hablar con nadie porque me sentía muy solo y vulnerable, no podía contar ni siquiera con mi hermana, para ese tiempo estaba manejando una de las empresas más importantes del estado, trataba de defenderme solo, empecé a hacer un grupo de los humillados y maltratados del colegio y la única forma de sentirnos fuertes y grandes era bebiendo licor y consumiendo drogas, igual con que moral podría ser juzgado si mis papás eran iguales, al llegar a casa deambulaba por las calles con mis amigos, comenzamos a robar a los chicos más débiles, a robar hasta llegar al punto de robar las cosas de mi propia casa para consumir drogas para ese entonces solo tenía diecisiete años, en una de esas nos cogió la policía pero fue fácil salir de ahí ya que papá y mamá con tal de que los demás no se dieran cuenta de mis fracasos lo cubrieran todo, mamá con su enfermizo maternal ismo lo único que afianzaba mi mal comportamiento y papá solo la culpaba a ella sin darse cuenta que él fue el peor ejemplo, mi comportamiento no cambiaba por el contrario cada vez por llamar la atención hacia cada vez cosas más graves, salía y entraba de la penitenciaria como si fuera mi casa hasta que papá y mamá tomaron una decisión no sé si fue la mejor o la peor el hecho es que cambio el resto de mi vida, me enviaron a prestar servicio militar como soldado raso sentía que ahora no le importaba ni a mis padres, allí aprendí a utilizar armas de todas las clases, y a consumir drogas en altas dosis, papá y mamá solo me visitaron dos o tres veces y mío hermana cubría todos mis gastos y necesidades allá pensando que con eso supliría la necesidad que tenia de verla, termine mi servicio militar a los 21 años, papá y mamá creyeron que la nación me había formado, cosa que debieron haber hecho ellos pero no, el estado solo me enseño milicia, para matar a otros, para defender a mi país, para dar la vida por ellos solo importaba eso, mis padres

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