Cuento
Enviado por rac97v • 14 de Agosto de 2015 • Trabajo • 4.142 Palabras (17 Páginas) • 128 Visitas
Traductor de labios.
Creado por: Rosas Castillo Juanita Anel.
Todo un problema eso de la evolución que si es natural que si no lo es. El temor humano de que un día alguien se presente y diga el hombre ha evolucionado entonces demuestra que ya no es un hombre si no algo superior, algo que los humanos no aceptarían y hasta lo radicarían pensando que de esa forma ellos seguirían con su máscara de hipocresía, traiciones y demás atrocidades que solo los no humanos hubieran logrado identificar.
Eso es lo que ocurrió después de la tercera guerra mundial, la guerra destruyo naciones completas, solo para la obtención de los recursos que se extinguieron del planeta; petróleo, agua, alimentos, todas cosas que eran de bastante valor en esos años y que las naciones para lograrlos obtener decidieron jugar con mas que solo cloro y bombas atómicas; utilizaron armas bioquímicas mil veces más poderosas y letales que la bomba atómica del siglo XX.
Pasaron casi tres años de finales del siglo XXI y un año del siglo XXII para que el mismo hombre se diera cuenta de lo que había creado y que comenzara actuar para el beneficio de los sobrevivientes. La misma arma que era utilizada para todos esos atroces armamento fue la salvadora de la humanidad. La bioquímica se comenzó a utilizar para crear variados productos sintéticos y que lograran beneficiar a la gran cantidad de sobrevivientes humanos que no fueron afectados tan gravemente por los tóxicos.
Ha aquellas personas que fueron expuestas y lograron sobrevivir a este armamento tan letal, les dieron lugar en laboratorios para que se lograra una investigación e indagación del por qué solo ellas lograron sobrevivir a estos catastróficos elementos. Después de casi dos décadas de investigación los mismos investigadores no daban otra explicación más que evolución, los organismos habían logrado no solo sobrevivir si no erradicar el mismo virus, parasito u elemento en el que había sido expuesto.
Los humanos se alteraron de este gran paso creado solo por unos pocos así que intentaron eliminarlo completamente. Algunos humanos evolucionados se enteraron de esta calamidad que se intentaba hacer pero no intentaron detenerla, tampoco la ocultaron a los demás que al escucharla si planearon escapar.
La noche del escape fue planeada y casi lograda solo que hubo un pequeño detalle que no contaron, los humanos contenían armas no bioquímicas pero si letales y las utilizaron para eliminarlos a todos los que no lo habían logrado. A los otros que escaparon los cazaron pero no obtuvieron a todos y estos lograron tener descendencia que sobrepasaba el nivel evolutivo de sus padres pues su sistema no erradico las armas, estas se ocultaron y modificaron a tal grado de integrarse de una manera genética fenotípica a los nuevos seres que nacieron.
Veinte años después…
En las afueras de una zona de viviendas designada por esa zona; pues la consideraban limpia de cualquier químico. Un joven de gran altura, con cabello negro recortado al estilo rebelde; ojos café claros, pestañas largas, piel color ni completamente moreno ni completamente clara, boca de tamaño medio con una perforación en el lado inferior izquierdo, vestido con pantalón de mezclilla y una playera de cuello redondo esperaba la aceptación de su análisis de sangre para que le dieran pase a las viviendas.
-Por ultimo diga su nombre y motivo de visita- menciono un “portero” por decirlo así que era más policía que encargado de viviendas.
-Evan- menciono el relajado –Mi motivo es mudanza- sonrió al policía en lo que las puertas que rodeaban la zona asegurada se abrían y permitían el paso.
Él estaba seguro que esta vez le permitirían el paso porque si analizo completamente su sangre para que se diera una falsa vista de que era normal; después de los doce él había logrado obtener un laboratorio y eso le permitió realizar ese tipo de modificaciones sanguíneas para que no se le delatara. Ahora teniendo 21 le era más sencillo realizarlos y ocultarlo solo para sí, sabía que era peligroso mostrárselo a cualquiera por ello no mencionaba nada de su estado para prevenir problemas.
Después de un rato caminar por la zona de viviendas, que eran como edificios departamentales a diferencia de que en cada edificio en la planta baja se presentaba un comedor comunitario para cada uno y un policía recibiendo en las escaleras al final de su respectivo comedor.
Evan se logró ubicar el edificio que le había mencionado la chica sexy del bar pero no creyó 0que hubiera tanta seguridad en ese tipo de zonas, él siempre había vivido en donde trabajaba, eso le ahorraba el tiempo de caminatas y ruidos urbanos, pero esta vez la chica le comento que debería renovarse así que le propuso que vivieran juntos. Y ahí estaba Evan buscando el edificio para lograr vivir de una manera cómoda y por lo que observaba segura de ahí en delante de los días.
Encontró el edificio solo faltaba el departamento o nivel o lo que fuera en donde viviría por los próximos tres meses o menos. De repente Evan coloco una nota mental para recordar buscar otro empleo pronto, en la cafetería ya estaba por caducar su fecha de trabajo y el punto era no volver a registrar ese mismo para que no atrajera a los poli azules en una investigación.
Al llegar a la puerta donde indicaba su pedazo de papel de su mano, toco el timbre todo seguro de quien lo recibiría, Antes de que lograra pronunciar palabra lo abrazo una chica de baja estatura, ojos verdes, pestañas pintadas, boca casi pequeña, piel morena y cuerpo delgado y de casi modelo si no fuera por unas pocas dificultades que se le remarcaban en su ropa corta y pegada que tenía puesta arriba de la cintura. Debajo portaba un short y unas sandalias y sus uñas de los pies pintadas de un color casi naranja chillón.
-Entra te estaba esperando desde hace horas- exclamo dando énfasis con sus brazos las últimas palabras.
-Lo siento sabes que el registro tarda- paso dentro del apartamento y beso ligeramente a la chica en los labios –También te extrañe- lo menciona en un tono de burla a la chica.
Evan mira el departamento y observa que es pequeño solo con una sala, un cuarto tipo cocina pero sin estufa que contiene un mini refrigerador y lavabo con pocos platos, un pasillo que lleva a un baño y una habitación pequeña.
-No deberías usar tu poder- dice la chica un poco emocionada por como él lograba hacer eso.
-¿Por qué lo dices?- menciona el mirándola con extrañeza.
-En caso de que te enamores de mí ya no podrás traducir mis emociones a través de mis labios- dijo la chica sentándose en el sofá de la sala. Evan la siguió y en cuanto comprendió el sentido de las palabras de la chica comenzó a reír como loco.
-¿Qué te ocurre?- ella pregunto con curiosidad.
-Naty, Naty, tú y tus locuras de empedernidos- Se sentó y coloco uno de sus brazos sobre sus ojos y siguió riendo –Si en el momento de nuestro primer beso yo no hubiera logrado traducir tus emociones eso hubiera sido un problema- explicaba mientras recuperaba su pose de coqueto seguro.
...