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Cuidado De Las Plantas


Enviado por   •  8 de Septiembre de 2013  •  1.506 Palabras (7 Páginas)  •  352 Visitas

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Cuidado Bàsicos de las Plantas

1. Cuidado de las plantas

Límites de temperatura.- Antes de escoger una planta de interior, estudien sus necesidades estacionales de luz y calor. Una temperatura diurna constante, ligeramente superior a 20 grados centígrados, es ideal. Eviten las temperaturas nocturnas demasiado bajas. Pueden ser prejudiciales para sus plantas (por debajo de 12 grados centígrados).

Invernada.- Algunas plantas (adelfas, limoneros, cactus) invernan y tienen que pasar este periodo en un local más fresco y seco. La temperatura puede bajar hasta 5 grados centígrados como mínimo. Hay que regarlas muy poco. La invernada favorecerá la floración siguiente.

Luminosidad.- Es merced a la luz que la planta puede transformar los elementos nutritivos necesarios para su crecimiento. Las necesidades varían de una especie a otra, pero el mínimo necesario es de 500 lux por día. La luz es cuatro veces menos intensa a sólo 2m. de la ventana.

Luz artificial.- Si la iluminación natural es insuficiente, recurran a la luz artificial. Eviten las lámparas de incandescencia, que lucen 5 veces menos que un tubo TL de 40 W "blanco frío". Los focos especiales contienen una lámpara de descarga o una lámpara de luz mixta.

Distancia.- Para que sus plantas estén bien iluminadas hay que colocarlas debajo de la fuente luminosa: en general le bastarán 2 tubos de 40 W suspendidos a una cierta distancia para que la altura de las lámparas siga el crecimiento de las plantas, cambiando de posición unas a otras.

2. El riego

El medio de origen.- Las necesidades de las plantas varían según el clima de sus regiones de origen. Las condiciones atmosféricas exteriores juegan su papel en la casa (humedad...). Una planta situada cerca de una ventana soleada necesitará más agua que si está orientada a la sombra, al norte.

Las macetas.- El riego se hace en función de la naturaleza de la maceta. Las macetas de barro cocido dejan evaporar el agua por sus paredes, pero no las macetas de plástico. Un cubremaceta bien ajustado alrededor de la maceta de barro cocido reduce mucho la evaporación. No dejen nunca el agua estancarse al pie de las plantas.

Tamaño de las macetas.- En una maceta de 5 cm. de diámetro la tierra está seca el día después de regarla. Si la maceta alcanza el tamaño de un cubo se quedará húmeda durante una semana. Las pequeñas macetas se calientan muy rápidamente, lo que lleva a una evaporación más rápida del agua que contienen.

La fibra vegetal.- Los follajes rígidos o con pelusilla (plantas carnosas) dejan evaporar muy poco el agua, incluso por tiempo seco y cálido, contrariamente a las plantas de tipo "hierba". En periodos de vegetación, todas necesitan más agua que en periodos de reposo o de enfermedad.

El agua.- El agua compensa la evaporación y transporta las substancias nutritivas. Si no dejan agua mas que en el platito, la parte de arriba de la tierra quedará seca: moje la maceta en un recipiente con agua tibia. El platito no tiene que quedar nunca lleno. Después de un cuarto de hora, quiten el agua que queda en el platito.

3. Métodos de riego y abonos

El riego- Para asegurarse que una planta necesita realmente agua, lo más sencillo es hundir ligeramente un dedo en la tierra: si está seca al tocar, no sólo en superficie sino en profundidad, ya es tiempo de regar, con una regadera o con un vaporizador.

Los recipientes con reserva de agua.- Los recipientes con reserva de agua ofrecen una solución ingeniosa, sobre todo cuando el aire en el ambiente está muy seco (con la calefacción central por ejemplo). Rellenen la reserva de agua añadiendo eventualmente unos abonos. El sustrato la absorberá, en función de las necesidades, por capilaridad.

Abonos para el suelo.- Un aporte semanal es suficiente para la mayoría de las plantas (este puede variar de una especie a otra). Los abonos que actuan sobre las raíces existen en diferentes formas: sólidos (bastoncillos a colocar en la tierra), liquidos (a añadir al agua), o en polvo (a repartir sobre la superficie de la tierra).

Abonos para hojas.- Las plantas poco cuidadas durante algún tiempo y debilitadas (síntoma: sus jóvenes hojas son demasiado pequeñas) se tienen que alimentar aportando abono en solución sobre las hojas, lo que garantiza su absorción imediata. No den abonos en otoño (descanso vegetativo), ni a las plantas enfermas.

La sujeción.- Las plantas bien alimentadas y regadas crecen rápidamente: pueden necesitar ser sujetadas por tutores. Para desarrollarse correctamente, el tallo no debe estar demasiado apretado contra el tutor. Finalmente,

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