EL NIÑO: DESARROLLO Y PROCESOS DE CONSTRUCCIÓN DEL CONOCIMIENTO

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GOBIERNO DEL ESTADO DE NUEVO LEÓN

SECRETARÍA DE EDUCACIÓN

UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL

UNIDAD 19B                            GUADALUPE, N.L.

Licenciatura en Educación, Plan 94

EL NIÑO: DESARROLLO Y PROCESOS DE CONSTRUCCIÓN DEL CONOCIMIENTO

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Asesora: María Eugenia Garza Flore

Raúl Martínez Pazos

Matricula: 14639731

Cd. Guadalupe, N.L, 6 de septiembre de 2014

PRIMERA UNIDAD “EXPLICACIONES TEÓRICAS DEL DESARROLLO DEL NIÑO”

ACTIVIDAD PREVIA

El desarrollo humano es un proceso largo y gradual, el hablar del desarrollo del niño desde su nacimiento a la pre adolescencia es complejo, ya que abarca los aspectos afectivos, cognitivos, sociales, emocionales y físicos, solo por mencionar algunos, es en la niñez donde se forja gran parte del carácter de una persona adulta y son las experiencias del infante las que ofrecen un mejor desarrollo en el adolecente.  

En la actualidad parece ser que el desarrollo del niño en la etapa inmediata después del nacimiento ha tenido grandes avances en comparación de 3 a 4 décadas atrás, en relación a las conductas, actitudes y reacciones ante el contexto inmediato del infante.

Por experiencia, es de mi conocimiento que durante los meses de embarazo, la tranquilidad de la madre, una buen alimentación y el cuidado permanente por un médico especialista, omite riesgos graves al nacimiento del niño. Muchos autores afirman que si se le habla al feto o se le pone algún tipo de música, reacciona a los estímulos que se le presentan.

Como se menciona anteriormente, hoy en día existe una marcada diferencia en las primeras reacciones que manifiesta el recién nacido en comparación a algunos años atrás, podemos observar en las más notables la apertura de los ojos, la movilidad de sus extremidades y el avanzado desarrollo de estímulo – respuesta. Los primeros meses de vida del niño, son los que requieren toda la atención de los padres, pues depende en totalidad de sus cuidados.  Conforme pasan los primeros 12 meses aprende a distinguir colores, voces, rasgos faciales y aprende a comunicarse, e incluso ya menciona algunas palabras. Es también en estos primeros meses donde se observa un notable desarrollo físico, su sistema óseo y muscular adquiere fuerza y regularmente comienzan a caminar.

Después del primer año de vida, del 1 a los 3 años el infante comienza a reconocer reglas, juegos individuales y entre pares, socialmente comienza a participar e interactuar con las personas y medio que le rodea. Físicamente adquiere habilidades motrices finas y gruesas, brinca, corre, identifica velocidades, controla esfínteres y su lenguaje es mucho más amplio. Afectivamente requiere del reconocimiento de los adultos y demanda atención,  manifiesta con enojos y alegrías ante determinadas acciones o respuestas.

Durante los primero tres años, es necesario comenzar con reglas breves y amonestaciones por conductas no deseadas.

A partir de los 3 y hasta los 6 años, presenta una significante madurez emocional, física y cognitiva, aprende reglas formales, respeta turnos y su lenguaje es fluido, logra comunicar emociones y no es necesaria la vigilancia permanente de un adulto,  es ideal para entrar a la educación formal y conviva con niños de su edad. Su desarrollo físico se manifiesta nuevamente marcado, hay diferencia en las habilidades físicas que ahora puede hacer y no hacía, como trepar, mayor velocidad y aventar objetos. En su aspecto físico es notable el crecimiento. En el aspecto cognitivo, identifica números, cantidades, colores, letras, formas, tamaños, lugares y posiciones.

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