ENSAYO SEGURIDAD SOCIAL

La ineficiencia de la Seguridad Social

Seguridad Social

EDUARWD ROS KEN

12/11/2013

INDICE

Introducción 1

Desarrollo 2

Conclusiones 7

Bibliografía 8

Introducción

Cuando hablamos del Seguridad Social, viene a nuestra mente palabras como IMSS, ISSSTE, ISSFAM este conjunto de siglas que al parecer por si solas no significan nada solo que instituciones de gobierno que brindan un servicio médico a los trabajadores, apoyo en diferentes sucesos, tales como maternidad, enfermedad, incapacidad, y guarderías, etc.

Los dos pilares de la Seguridad Social, son el Instituto Mexicano del Seguro Social y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, en conjunto con Instituto de Seguridad Social para las Fuerzas Armadas Mexicanas que forman parte del sector gobierno, adicionalmente durante el sexenio de los años 2000 a 2006, se anexo un tercero, que es Comisión Nacional de Protección Social en Salud, llamado Seguro Popular, el cual busca otorgar cobertura de servicios de salud, para aquellas personas que no cuentan con empleo, o que trabajan por cuenta propia brindado a través de los diferentes centros de salud que tiene cada entidad federativa.

Estas empresas han causado cierta controversia por sus requisitos para obtener las ramas del seguro o, en su forma de asistir al trabajador, al brindar tal derecho que por constitucionalidad nos pertenece, comentarios perjudiciales y favorables se escuchan entre las personas que utilizan este servicio. Así mismo tales opiniones pueden ser o no verdaderas, es por lo cual el Seguro Social es un tema de disputa que involucra tres entes que lo forman, Estado, patrón y trabajador, siendo este ultimo el que recibe el servicio plasmado por la Carta Magna y las leyes sociales que lo regulan.

Desarrollo

Para empezar a hablar de la Seguridad Social, es necesario conocer el proceso histórico del mismo, desde la Constitución de 1857, se vislumbran los primeros pasos, en específico en el artículo 5 de dicho documento nos menciona, “Nadie puede ser obligado á prestar trabajos personales, sin la justa retribución y sin su pleno consentimiento. La ley no puede autorizar ningún contrato que tenga por objeto la pérdida ó el irrevocable sacrificio de la libertad del hombre, ya sea por causa de trabajo, de educación ó de voto religioso. Tampoco puede autorizar convenios en que el hombre pacte su proscripción ó destierro” .

Sesenta años después en la Constitución de 1917, se reivindicaron los derechos laborales, al incorporarse novedosas disposiciones en beneficio del trabajador, como son entre otras las que contemplan responsabilidades de los patrones en accidentes de trabajo y en enfermedades profesionales, así como la obligación de observar los preceptos legales sobre la higiene, seguridad y la previsión popular. Y no fue hasta el sexenio de 1940 a 1946, se produjo un cambio radical, en la administración de ese periodo, surgió como tal, la ley del seguro social en 1943, en su protección específicamente a los trabajadores del sector privado. Más adelante se implementa una nueva legislación abarcando a una parte del sector gobierno, la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado haciendo su publicación en el Diario Oficial de la Federación, el 28 de diciembre de 1959, en consecuencia sabiendo que el gobierno no solo hay personal administrativo, se aprobó la Ley del Instituto de Seguridad Social para las Fuerzas Armadas Mexicanas , publicada el 28 de mayo de 1976 , la Ley General de Salud Publica, el 7 de febrero de 1984, entre otras

Con base en lo antes mencionado, se puede definir al Seguro Social, podemos definirlo como un “Organismo de estado que ofrece, con base en cuotas, o aportaciones recaudadas, y administradas, resolver la problemática emergente de la población en materia de salud, trabajo, vivienda y bienestar social en general”. Partiendo de tal descripción, el Estado con base en el artículo 123 Constitucional, apartado A fracciones XII, XIV y XXIX, y el apartado B del mismo articulo 123 prevé la seguridad social entre los Poderes de la Unión, el Distrito Federal y sus trabajadores en su fracción XXXI, tiene la obligación de proporcionar esta seguridad para lo cual se establece la “aportación” de este derecho en tres partes, es decir tripartita, Estado, patrón y trabajador, cada uno contribuirá para garantizar el seguro, y preverán los riesgos sociales. También leyes federales, como La ley del Seguro Social y el Código Fiscal de la Federación, en su articulo segundo y primero respectivamente nos delinean cual es la función del seguro y como este se considera parte del gasto público y se clasifica como una contribución. En adición a esta forma de participación tripartita, el trabajador gozara de seguro social, mismo que cubrirá cinco ramas; enfermedades y maternidad, riesgos de trabajo, invalidez y vida, cesantía en edad avanzada y vejez, guardería y prestaciones sociales.

Para mantener este servicio vigente, se necesitar hacer aportaciones periódicas, mensuales, y bimestrales tanto al IMSS y al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores, en donde el patrón tendrá la obligación de realizar dichos pagos, con la parte que le corresponde al trabajador, y se descuenta vía nomina.

Ahora bien, en México la cobertura de la Seguridad Social surge a partir de la afiliación, y es resultado de una relación laboral, entre patrón y trabajador, exceptuando algunos casos, como trabajadoras domésticas, socios de sociedad cooperativas. Al 30 de junio de 2012, el número de trabajadores permanentes y eventuales urbanos (TPEU) asegurados en el Instituto Mexicano del Seguro Social ascendió a 15,705,849 personas, lo que corresponde a un incremento mensual de 91,564 trabajadores (0.59%). En lo que va del año, se reporta un aumento de 503,423 trabajadores (3.31%), variación 31.6% (120,933) superior a lo reportado en el mismo periodo de 2011.

Esta cifra sin duda ha ido aumentando por lo que corresponde al año 2013, por lo que se puede apreciar el número de afiliados al IMSS, representa aproximadamente mas del 14 % del total de mexicanos que en suma 112 millones 322 mil 757 personas , por lo tanto el universo de la Población Económicamente Activa ocupada y de aquéllos que obligatoriamente deberían estar incorporados al Seguro Social, se obtiene que sólo el 52.4% cumple con este requisito, de asegurarse al Instituto Mexicano del Seguro Social, al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores

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