El sentido de la EDUCACION

El sentido de educar tiene como base a dos palabras: Educare y educere. Las cuales presentan significados totalmente diferentes entre sí, ya que educere tiene a la educación como un proceso de adentro hacia afuera, mientras que educare, la entiende como una intervención de afuera hacia adentro, y es esta la que lamentablemente predomina dentro y fuera del sistema escolar. Es lamentable porque, en este caso, lo que se busca es meter respuestas, información y/o conocimientos “correctos” en el educando, siendo que la clave y el sentido de la buena educación consiste en sacar lo que el educando sabe, y no solo en introducir datos “correctos”. Entonces, si queremos conseguir una educación eficaz, debemos arrimarnos más a la definición de educere, que también hace referencia a que no existe una sola inteligencia y una sola respuesta, porque el mundo está repleto de seres inteligentes, pensantes, portadores de experiencias y conocimientos significativos. Es por ello que últimamente se busca una reformación de la educación pública, para aquellas personas que no cuentan con lo suficiente para educarse, lo cual es necesario para su desarrollo. Esto actualmente sucede así, ya que el vigente sistema educativo fue concebido y estructurado en plena etapa industrial y no contaba con una educación pública, porque: ¿Para qué perder el tiempo en personas que son incapaces de leer, comprender o escribir un texto?, pregunta que se hacían aquellas personas ignorantes, las cuales se guiaban por la estructura social de la gente.

Luego, se infiltro el llamado modelo intelectual de la mente, el cual era la idea que tenia la ilustración sobre la inteligencia, siendo que esta consistía en ciertas capacidades y conocimientos, que se pueden resumir en la denominada capacidad académica. Allí se creía que existían dos tipos de personas: “Académicas” y “no académicas”, esto genero una gran consecuencia: había gente genial que se creían que no lo eran por seguir este pensamiento claramente erróneo, porque las personas no tenemos clasificación alguna, si no que cada mente que se encuentra en este planeta es un mundo lleno de experiencias, contenidos, sorpresas, conocimientos, preguntas y respuestas completamente valorables e importantes. A pesar del caos que genero este modelo en el pasado, en la actualidad sigue presente pero un poco más escondido detrás de ciertos pensamientos u opiniones que indignan. Podemos decir entonces, que nos encontramos frente a un sistema educativo modelado para otra era, un modelo perdido en la modernidad, el cual ha diseñado escuelas como si fueran fábricas, teniendo a los niños y jóvenes como si fueran objetos clasificables por edad o sexo. Cabe aclarar que los educadores-profesores no tienen la culpa de todo esto, ya que los mismos fueron y son víctimas del mismo modelo.

Entonces, para finalizar esta “síntesis” puedo decir que: Si queremos encontrar una buena educación,

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