El valor de Educar/ Fernando Savater

EL VALOR DE EDUCAR

• Introducción

El autor Fernando Savater, inicia su libro acordándose de su infancia, donde había tenido a una muy buena profesora.

El piensa y realmente estoy de acuerdo, que los profesores, son una pieza muy importante en la educación, pero realmente les toca sufrir que toda la culpa que tienen los jóvenes se las pasen a ellos, cuando realmente hay veces que ellos no tienen nada que ver. Aparte de que se les haga sufrir culpándolos por cosas que realmente ellos no tienen nada que ver, se les menosprecia, se les hace menos en la sociedad, y los padres de familia ponen en primer lugar lo económico y el prestigio.

Dentro de los capítulos que el autor sustenta en la lectura hace  resalta el compromiso que tienen el Estado, las autoridades en educación, instituciones educativas y principalmente el maestro, con relación a la disciplina, la enseñanza de la libertad y la universalización de la educación.

Enfatiza el hecho de que los maestros lo quieran o no, son modelos para sus estudiantes, y en sus manos está hacer del aprendizaje de sus alumnos un deleite, tomando en cuenta que lo más importante no son las asignaturas y los contenidos curriculares, sino “cómo” estas son enseñados. Insiste mucho en que el fin de la educación es la humanización del ser humano, lográndolo a través de la integración e interrelación de la parte cognitiva, espiritual y la actitud de una persona.

Enfatiza la idea de que debe existir la universalización democrática de la educación, esto significa que debe haber educación para todos y cree en la educación para evitar desigualdades.

• Análisis

En el capitulo uno el autor nos explica que ser humano es también un deber; probablemente es como un atributo por el prójimo, la solidaridad o la generosidad hacia los demás. Es un deber moral llegar a ser humano de tal modo. Como seres humanos desde que nacemos pero no basta con eso, el deber que tenemos debemos de llegar a serlo.

El hombre llega a serlo a través del aprendizaje. Pero ese aprendizaje humanizado tiene un rasgo distinto que es lo que más cuenta de él. Si fuéramos animales bastaría aprender de su propia experiencia y del trato de las cosas a la vez es un proceso de aprendizaje muy largo. Por tanto él ser humano aprende una educación sistemática y a formal.

La verdadera educación no solo consiste en enseñar a pensar sino también en aprender a pensar sobre lo que se piensa y este momento reflexivo. Para termina de este capítulo nos habla sobre el ser humano que somos distintos ante la sociedad por lo tanto para dar a conocer nuestras capacidades debemos de recibir la educación ya que es lo que nos hace mas humanos, allí debemos de intercambiar nuestra manera de sentir ya que somos únicos.

 En el capitulo dos, es donde, el autor hace referencia al título de este libro tan importante. Empieza diciendo que los padres, son los primeros MAESTROS, de nuestra vida. Savater, remarca que es necesario que el maestro debe haber vivido antes que el alumno.

Nosotros como seres humanos y pensantes podemos enseñar, cualquier persona puede enseñar.

También nos menciona que hay una diferencia entre educación e instrucción y hace una pequeña referencia a la antigua Grecia que existía el maestro y el pedagogo. Savater cita a John Passmore, en el concepto  de capacidades abiertas y cerradas. Las capacidades abiertas son infinitas, es decir, no se pueden aprender de forma concreta ni especializarse en ellas; mientras que las cerradas son aquellas capacidades funcionales y útiles como leer o atarse los cordones. La habilidad de aprender es una habilidad abierta, por lo que el autor concluye dándole importancia al hecho de enseñar a aprender.

En el capítulo 3, El Eclipse de la familia, Savater nos dice que en los primeros años del niño se le educa en un entorno familiar, donde aprende a hacer cosas básicas como asearse, hablar, vestirse, etc., donde estas cosas son primarias en la formación. A esto se le llama Socialización Primaria

Después está la Socialización Secundaría, donde esta depende de la primera. En donde se desarrolla esta socialización es en la escuela.

La educación familiar funciona por vía del ejemplo y el aprendizaje se da por identificación total con sus modelos o por el rechazo visceral (niños infelices). Se pueden aprender principios moralmente estimables o prejuicios, ambos muy difíciles luego de cambiar.

Cuanto menos padres quieren ser los padres más paternalista tiene que ser el Estado. Se da la Crisis de Autoridad de Familias . Consiste en una antipatía y recelo no tanto del concepto de autoridad (ayudar a crecer), sino de tener que usarlo en el ámbito familiar del que se es responsable.

Todo aprendizaje que no proporciona placer inmediato está motivado en principio por un miedo controlable (en nuestros días bien podría ser el temor a perder el amor y el respeto de los padres

y, finalmente, el miedo de perder el respeto a sí mismo). Luego por el interés propio o el egoísmo

Los planes de enseñanza tienden a reforzar los conocimientos científicos o técnicos a los que se les supone una utilidad práctica inmediata, laboral. La tecnología goza de gran prestigio, mientras que la rememoración del pasado o las grandes teorías especulativas suenan a pérdida de tiempo y se sospecha de ellas, porque esas teorías totalizadoras (no relativistas) muchas veces han conducido al totalitarismo.

La separación entre cultura científica y cultura literaria es un fenómeno que no se inicia hasta fines del siglo pasado, por razones donde abarcan  de saberes cada vez más técnicos y complejos que desafían las capacidades de cualquier individuo imponiendo la especialización, la cual no es sino una forma de renuncia

En el  capítulo 4 nos habla de que Ningún niño quiere aprender aquello que le cuesta trabajo asimilar y que le quita el tiempo a sus juegos. La tiranía es real, y ni siquiera educamos enteramente por su bien. La educación responde a los intereses de los educadores.

Para que la sociedad siga funcionando es preciso que aseguremos el reemplazo a todas aquellas tareas sin las cuales no podríamos subsistir. Pero ya que estamos en el SER, lo único que podemos compartir con los recién llegados es lo que somos. Pero la libertad sólo se alcanza por el paso por la educación.

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