Empirismo vs Racionalismo

EMPIRISMO VS RACIONALISMO

       Al analizar estas dos filosofías me doy cuenta que están muy ligadas, para mí se interpretaría como la práctica y la teoría. El racionalismo se basa en el conocimiento y la capacidad del hombre para razonar en ese conocimiento y de esta manera llegar a una conclusión como verdad, pero creo que a pesar de que es una manera más científica de ver las cosas si lo analizamos a fondo es falta de conocimiento porque una teoría que no se comprueba no puede ser un conocimiento completo.  

       Los seres humanos tenemos la capacidad de pensar de analizar, de discernir, de crear; seleccionamos aquellos pensamientos que queremos darle importancia tanto consciente como inconscientemente, desechamos todo dato o conocimiento cuando no nos parece útil, analizamos desde varias perspectivas un mismo asunto para decidir, porque tenemos voluntad y libre albedrío; pero es hasta que accionamos que ocurre algo, un cambio, una experiencia,  es hasta entonces donde esa vivencia produce un conocimiento que abarca todos nuestros sentidos y es entonces cuando puedo decir que aprendemos algo. Hay un dicho que siempre escucho en mi casa “nadie experimenta en cabeza ajena”, y aunque mi capacidad de raciocinio me permite evitar peligros por el simple hecho de que me han enseñado que algo es peligroso, yo no hubiera recibido esa enseñanza sin que alguien más la hubiera ya experimentado. Por lo tanto todo conocimiento parte de una experiencia propia o ajena, pero no se llega a él sin experimentar.

       El empirismo hace que el conocimiento sea útil, hace que el conocimiento sea real, el empirismo es el principio del conocimiento y también el fin porque es una acción o la necesidad de ella ya sea propia, ajena o de la misma naturaleza, que motiva a que pensemos y analicemos que debemos hacer, al hacerlo comprobamos su utilidad o no, y esto aporta más datos al conocimiento que ya teníamos lo que está en medio del principio y el fin es el racionalismo, la teoría, los datos que nos aportan elementos útiles para accionar pero es hasta que los ponemos nuevamente en práctica que toman una verdadera importancia.

       Cada persona está dotada de sentidos, somos seres sensoriales, es a través de los sentidos que percibimos el conocimiento, un bebé puede saber solo aquello que experimenta o que llega a comprender que alguien más ya lo experimentó, como nacen sin conocimiento casi todo lo quieren experimentar, entre más conocimiento tiene menos necesita experimentar para conocer.

       La experimentación promueve la creatividad, si yo por ejemplo quiero crear un producto para climas fríos en extremo, tendré que sentir en algún momento lo que es el frío, si puedo crear algo a partir de conocimiento teórico pero será  mucho mejor, más acertado y muy probablemente más útil si he sentido un poco de ese frío, una persona que ha vivido en el trópico toda su vida y no tiene un refrigerador en su casa seguramente no captará el sentido de la necesidad del producto que hay que crear, si es una chamarra térmica, pues como podrá saber cómo pesa una prenda si no lleva casi ropa por el calor, no sabrá que se necesita cubrir los oídos por el aire helado, etc. Puede crear esta chamarra sin nunca haber sentido el frío, la respuesta es sí, pero si ha sentido el frío podrá cubrir más puntos de necesidad o crear algo igual de bueno sin tanto conocimiento teórico.

       Un neurólogo, un psiquiatra, por ejemplo pueden analizar el cerebro de una persona y darse cuenta si no está equilibrado químicamente, pueden ver si hay algún daño, pueden incluso corregir daño cerebral, dar tratamiento para algún padecimiento, pero ninguna persona que no haya padecido una depresión, un ataque de pánico, una epilepsia, un trastorno bipolar, por decir algunos ejemplos, puede comprender a cabalidad todo lo que esto implica, si no lo has vivido tendrán que explicarte que se siente comparativamente a otra experiencia porque solo así entenderás, por ejemplo un ataque de pánico pues si nunca lo has vivido la persona para que la puedas entender tendrá que decirte cosas que tal vez si hayas sentido, por ejemplo te dirá, “es una sensación de opresión en el pecho, no puedes respirar bien, se te nubla la vista, etc” y de acuerdo a que tanto conoces estas sensaciones entenderás que se siente eso, es muy difícil comprender algo que no has experimentado, pero también es verdad que entre más datos y conocimiento teórico exista más fácil será avanzar.

       No digo que el racionalismo no sea importante porque sería imposible experimentar todo lo que conocemos y es de gran utilidad el racionalismo, sin embargo el empirismo le da vida al conocimiento, hace que sea propio, nos ayuda a no olvidarlo, hace que relacionemos cosas importantes y sobre todo nos ayuda a llegar a una conclusión, para no divagar en teorías y filosofías solamente sino como mencioné en un principio, nos permite tomar el conocimiento y hacer algo con él o no.

EVOLUCIONISMO VS POSITIVISMO

       El positivismo podría verse como  una contradicción en sí, es el método para ordenar la evolución del conocimiento, y el positivismo mismo se ha transformado o ha evolucionado.

       El evolucionismo no es más que la filosofía basada en una evolución o cambio, una transformación que se va dando mientras avanzamos como sociedad.

       Podría parecer un trabalenguas pero es muy sencillo para mí, una transformación o un cambio no es precisamente una evolución porque podría haber un retroceso implicado, sin embargo una evolución siempre implica  cambios y transformaciones. Para que esta evolución se dé, es decir, para que los cambios y las transformaciones representen un avance o evolución, debe tener un contenido de pasos comprobables basados en datos exactos que comprueben que al llevarse a cabo dió como resultado un hecho cierto, todo esto es un método científico, por lo tanto la evolución verdadera no se puede dejar al azar, hay que documentarla, comprobarla y debe llevar un orden si no puede derrumbarse ese conocimiento en cualquier momento y quedar como simples teorías inconclusas, debe llevar una secuencia, un método, una serie de pasos para llegar a un fin para llegar a un objeto de estudio.

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