Ensayo Por Competencias

Ensayo competencia 4

En el presente ensayo haré referencia a los cinco indicadores que corresponden a la competencia 4: Evalúa los niveles de progreso de los aprendizajes alcanzados por los alumnos en función de los objetivos del programa. En esta competencia se agrupan los indicadores que dan cuenta de los procesos de evaluación que se llevan a cabo durante el transcurso de la enseñanza-aprendizaje, los cuales no necesariamente serán pruebas, guías, interrogaciones u otras evaluaciones calificadas con una nota, sino que también abarca la evaluación como un proceso, como algo que se da gradualmente, a medida que los estudiantes avanzan en su desarrollo.

A diferencia de los ensayos anteriores, y considerando que en esta ocasión debo abarcar cinco indicadores, desarrollaré en una primera instancia los indicadores 1: Describe las estrategias de evaluación y las relaciona con las metas de aprendizaje y 2: Comunica metas de aprendizaje y los criterios de evaluación juntos. Para luego continuar con los tres restantes, de modo que las evidencias que presentaré serán dos, una para los dos primeros indicadores y la otra para los tres finales.

La primera evidencia que presentaré será la planificación de una clase, ya que será durante el transcurso de la misma, cuando se darán a conocer a los estudiantes las estrategias de evaluación, y a su vez, las metas de aprendizaje que serán una guía durante el desarrollo de la unidad, aspectos que deben quedar claros y deben ser conocidos por todos los estudiantes, para que de este modo se propicie un aprendizaje significativo, y a su vez el desarrollo de habilidades y actitudes que les permitan desenvolverse de una mejor manera en el ámbito social.

Sin duda alguna, uno de los aspectos que resulta importante destacar durante el desarrollo de una clase, es explicitar a los alumnos la utilidad de las distintas estrategias de evaluación, actividades, trabajos grupales e individuales en su formación como seres sociales e inmersos dentro de una colectividad, y no sólo como estudiantes que aprenderán contenidos. Bajo esta perspectiva, en la evidencia que presento se describen las actividades o estrategias que se relacionan directamente con las metas de aprendizaje. Sin embargo, este aspecto no alcanza a develar, de forma concreta un factor decidor que logre articular una real conciencia y motivación en los estudiantes: la prevalencia, tanto de actividades como contenidos presentados en las variadas intervenciones para encausar en ellos el desarrollo de habilidades y actitudes de vital importancia para su posterior desenvolvimiento en la vida social y laboral.

Antes de continuar, resulta necesario saber ¿qué es una meta? Las metas son los fines hacia los cuales nos dirigimos, los resultados que queremos alcanzar. Pero las metas son algo más que puntos terminales. Son también puntos de referencia que usamos para poder determinar si estamos caminando en la dirección correcta. Sin metas claras, no podemos evaluar la eficacia de nuestros esfuerzos, darnos cuenta de si seguimos o no en el camino correcto y saber cómo regresar a él. Una buena evaluación requiere necesariamente de un proceso previo de clarificación de temas. Y a su vez, si nos enfocamos en el aula y en los profesores, nos encontraos con que para evaluar y mejorar la instrucción, los profesores debemos en primer lugar, clarificar qué es exactamente lo que se quiere que los estudiantes aprendan durante el proceso de enseñanza-aprendizaje, y una vez que se identifican las metas y su relevancia, se puede comenzar a evaluar qué tan bien los estudiantes están aprendiendo aquello que se les quiere enseñar.

Ahora bien, refiriéndome específicamente a la planificación de la clase que presento como evidencia, para los dos primeros indicadores, debo decir que la estrategia de evaluación que en ella aparece es la elaboración, por parte de los alumnos, de un ensayo. A partir de la clase, la cual fue diseñada para dar a conocer a los estudiantes este tipo de discurso argumentativo, se pretende que luego de conocerlo e identificar sus partes, los estudiantes sean capaces de elaborar, de manera individual, un ensayo, siguiendo ciertas indicaciones que lo convierten en una situación formal de escritura.

La justificación de lo anterior es la siguiente: resulta que el contenido de primero medio es el discurso dialógico, y no aparece en los planes y programas el ensayo como contenido a enseñar en este nivel, sin embargo me pareció adecuado incluirlo y enseñarlo, debido a que el ensayo presenta un carácter dialogal, ya que se crea una suerte de diálogo entre el hablante con su tema y con su posible lector. Además es un discurso crítico, independientemente del tema que se aborde, en el cual el autor intenta “hacer ver” al lector las cosas como él las ve. Podemos ver entonces, que existe una suerte de relación entre los contenidos de NM1 y el ensayo, en cuanto a lo dialógico y a la argumentación, razón por la cual resulta pertinente enseñar a hacerlo y a desarrollar a su vez posturas críticas, por parte de los alumnos, referentes a un tema de su interés.

Por lo tanto, la estrategia de evaluación en este caso, es que los estudiantes logren confeccionar un ensayo argumentativo, en el cual den a conocer su opinión sobre un tema de su interés, y que sean capaces de entregar argumentos que validen su postura. También, en este caso, las metas de aprendizaje y los criterios de evaluación quedan plasmados en la rúbrica que se entregó a cada estudiante para que los tengan presentes a la hora de elaborar el ensayo. La rúbrica es un instrumento que ayuda mucho a la hora de dejar claros los criterios de evaluación que serán aplicados al momento de revisar diversas actividades, en este caso la confección de un ensayo, ya que muestra los lineamentos que deben seguir los alumnos, paso a paso, y también permite que se den cuenta de sus errores, los corrijan y alcancen un aprendizaje significativo, tanto de esta nueva forma de escritura, como de la capacidad de darse cuenta de sus errores, reflexionar sobre ellos y ser capaces de corregirlos.

En esta oportunidad, nuevamente me encuentro con la dificultad de que aún no he revisado los trabajos, por lo tanto no puedo emitir un juicio acerca de los resultados del proceso en el que se utilizó la rúbrica como guía, sin embargo en los dos primeros indicadores no se pide un análisis de los logros alcanzados.

A modo de conclusión puedo decir que me he dado cuenta de que se debe manifestar de forma constante a los estudiantes la necesidad, presente en el desarrollo, tanto de habilidades como de conductas en el colegio, no solamente bajo un amparo estrictamente académico o educativo (objetivos

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