Intervencion

CAPÍTULO 1

EL PROCESO DE SIGNIFICACIÓN DE LA PRÁCTICA COMO SISTEMA COMPLEJO.

El replanteamiento de las acciones cotidianas que evidencian un nuevo significado acerca del hacer educativo, dos maneras de manifestar el hacer educativo 1.-saber (consiente) 2.-hacer (reflexivo), el hacer dependiendo como el educador signifique su práctica, es así como la realiza, un sujeto no hace cosas que desconoce se trata de entender que detrás de lo que hace hay una red de significados que dan razón a sus acciones. En los siguientes apartados de este capítulo se exponen los presupuestos teóricos que permiten entender el marco conceptual en el que se insertan estas reflexiones y se determina que es la práctica educativa.

1.- La direccionalidad de la práctica: lo educativo.

¿Transformar hacia donde? En educación la transformación debe contener una naturaleza educativa, se entiende que educarse tiene que ver con que el individuo construya los conceptos a partir de interacciones, se produce conocimientos a partir de la relación de transformación reciproca entre sujeto y objeto.

2.-Desde el ámbito educativo ¿qué es la practica?

Entendida como acción reflexiva que puede transformar la teoría en el sentido de la praxis, se constituye de acciones que para ser consideradas educativas deben ser acciones transformadoras, una práctica educativa está conformada por acciones que intencionadamente propician la transformación de los sujetos que intervienen, una condición inherente a la práctica educativa es su naturaleza dinámica y su potencial de transformación, esta última condición abre una serie de cuestionamientos fundamentales ¿Cómo se puede propiciar la transformación de la practica? ¿Hacia dónde debe dirigirse la transformación?

3.-La transformación de la práctica educativa.

Los cambios tecnológicos y culturales exigen una renovación permanente de la escuela y por tanto la actualización constante de los educadores la transformación se genera por la operación básica de la reflexión sobre la acción.

La transformación de la practica es un proceso de resignificación, es decir, que desde un significado inicial de una práctica convencional, es decir que desde un significado complejo educativo, el siguiente apartado intenta aproximarse a este proceso.

4.- Resignificación de la práctica educativa.

Hablar de significación de la practica requiere la comprensión previa de los que es significar antes de hacer, el educador comprende, planea, decide, entiende su práctica, se refiere a ella con otros a partir del significado que de ella tiene, La reconstrucción de un nuevo significado permite la transformación de la practica hacia una situación de mayor calidad educativa, y una vía para lograrlo es pensar la resignificación de la practica como sistema complejo.

5.- La significación de la práctica como sistema complejo.

Comprender para transformar la práctica educativa implica articular de manera constante y complementaria las teorizaciones construidas a partir de lo reflexivo de cada constitutivo desde una perspectiva teórica. A partir de ahí se posibilita que el educador re signifique su práctica y por ende sus acciones ya que como señala García (199 p.88) no se trata de aprender más, si no de pensar de otra manera.

CAPÍTULO 2

LA INTERVENCIÓN DE LA PRÁCTICA EDUCATIVA

Reformar la educación implica un cambio en las prácticas educativas de los maestros, los fines de la educación se dirigen a formar sujetos con la capacidad de transformar el mundo y aprovecharlo para el bienestar.

La intervención educativa, según los establecido no es periférica o cosmética, si no que se dirige a la metodología del quehacer educativo. Intervenir en la metodología de una práctica educativa supone conocer dicha metodología, esta supone una vigilancia en la materialidad fáctica de la practica misma, mas allá de toda planeación. Intervenir en la metodología tiene por lo menos cuatro retos centrales:

1.- ¿La práctica educativa puede constituir un objeto de estudio?

Estudiar la práctica y la propia practica, no a la manera cotidiana, si no como objeto de estudio formal, tiene sus dificultades, La antropología señala que la práctica es inescrutable por que se basa en un cruce de caminos entre la cultura y las decisiones individuales lo cual hace prácticamente imposible el estudio de un objeto que en todo caso competa a la psicología.

2.- ¿Cuáles son las dificultades de la intervención?

Daño secundario, calificamos de primordial el propósito de la escuela para todos, pero dejamos fuera la economía y empleo a quien no tiene escolaridad y el no hacernos cargo de los que dejamos fuera se considera un efecto secundario que es producto de las características modificables de la practica.

3.- ¿Intervenir en los problemas de la practica equivale a resolverlos?

Lo que aquí se propone es una manera distinta de enfrentar el problema, cuestión que no ha sido entendida en el estudio y la enseñanza de la intervención educativa, se confunde intervención con investigar la práctica, intervenir y enseñar a intervenir es enseñar a los maestros a trabajar sobre su práctica, no es investigar, si no enseñarles a mejorar su maestría.

4.- ¿La intervención es una práctica aceptada en el ámbito cultural educacional?

La educación tiene una carga cultural que no puede ignorarse ni modificarse fácilmente, ni siquiera mediante un proceso de intervención muy pulcro, existe la idea popular muy arraigada de que los padres le encargan el niño al maestro, no se hacen cargo de el, la investigación señala que el papa es un factor clave para el aprendizaje del niño, pero ni el maestro ni el sistema educativo pueden cambiar esta idea producto de una carga cultural muy evidente. Si bien este y otros cuestionamientos rebasan los estudios de la práctica educativa, suponen un obstáculo a la mejora una vez que se han empezado a identificar los ingredientes de solución de las deficiencias de la práctica.

Ante esta dificultad pueden impulsarse cuatro procesos de resocialización entre alumnos, maestros y actores educativos que modifiquen las pautas de socialización previas.

1. Hacer posible y valida la discusión de las problemáticas.

2. Otorgar a la escuela el valor y el poder de cambio.

3. Procurar que el director, en efecto, dirija, que sus acciones no solo dependan de lo que ordenen arriba, si no también, de lo que suceda abajo: aulas, maestros.

4. Hacer de la escuela el centro de la política educativa y no la última línea de un proyecto macro que determina como debe portarse cada profesor.

CAPÍTULO 3

ELEMENTOS PARA

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