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LA PALABRA, COMO UN APOYO DE ENIGMAS, BREVEDAD Y SILENCIO DE JOSÉ MANUEL ARANGO


Enviado por   •  19 de Mayo de 2013  •  1.512 Palabras (7 Páginas)  •  566 Visitas

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LA PALABRA, COMO UN APOYO DE ENIGMAS, BREVEDAD Y SILENCIO DE JOSÉ MANUEL ARANGO

José Manuel Arango en su primer libro llamado Este lugar de noche, que fue publicado en 1973, nos muestra como el romanticismo esta tan allegado a él y no deja atrás todas sus raíces, desde esta parte romántica de José Manuel Arango, el encuentra en la palabra todo lo que él necesita, es bastante unido con el lenguaje y el silencio, ya que el romanticismo defiende la fantasía, la imaginación y las fuerzas irracionales del espíritu, el entre todas sus formas de inspiración utiliza cada parte del romanticismo y por eso él esta allegado a este movimiento. Uno de sus puntos de mayor fuerza es la brevedad de todos sus poemas, como lo resalta el poeta colombiano Santiago Mutis “Su obra es breve y singular, tan concentrada y estricta que no tenemos en Colombia un ejemplo similar. En la brevedad, como forma del rigor, está también Aurelio Arturo, y en esa despiadada disciplina con la palabra y consigo mismo que suele llamarse «la creación artística», está sólo, pues ninguna obra poética de este siglo colombiano ha tenido la fortuna de mostrar su plenitud y su austeridad con tal vigilancia, y sin una sola palabra de más para halagar al público o al poeta (Babel, 1996-1997, p. 4).” , este comentario como entre muchos otros nos muestra que el punto fuerte de José Manuel Arango es el facilidad con la que utiliza el lenguaje para ser tan breve y tan profundo, que con la misma brevedad puede llegar a tener entre sus poemas una densidad y una intensidad acogedora.

En este volumen corto de cuarenta y siete páginas, que contiene treinta y ocho poemas más bien cortos nos muestra lo que en Colombia lo resalto y fue tan valorado, ¡su brevedad! ya que solo unos pocos poemas tienen más de tres o cuatro versos, como lo podemos ver en el siguiente poema:

VI. Armonía

Perdido

Por los ciegos senderos

De la música

Tienes

El rostro

Que tendrás en la muerte

Esté poema nos muestra que entre todos sus poemas siempre encontraremos la muerte como un punto de finalidad o de comienzo, que se va a mostrar relativo a unos enigmas, al lenguaje a cómo puede él jugar y acomodar toda esa oscuridad en un poema que nos muestra profundidad, silencio, una palabra bien formada y ante todo una densidad e intensidad con su brevedad.

El autor David Jiménez nos señala que “El poeta interpreta, o intenta interpretar la realidad más común como sí allí se agazapara, bajo clave, una verdad última que ya no es de este mundo, sea en sentido metafísico, en cuanto verdad fuera de la historia, o sea en sentido histórico, como una verdad arcaica, inicial, que yace enterrada en lo inconsciente o en lo inadvertido”, esta interpretación de David Jiménez nos da a entender que entre ese mundo grande de poesía, el poeta siempre trata de entender la realidad en la que se encuentra y trata de darle una razón o un fin del porque de los hechos que ocurren, es decir, cada poeta trata de encontrar esa verdad que relacione todo este mundo entre sí, con José Manuel Arango ocurre esto, el trata de dar a conocer en sus poemas un mundo de soledad, silencio, naturaleza, lenguaje, muerte, ciudad y relaciona cada punto con todo, para hacerse una idea de esta realidad y en si saber la historia de un pueblo y de esto formar grandes uniones con cada punto.

Un poema que nos puede mostrar que todo se une con todo es el siguiente:

X. Ciudad

I

Como repiten las manos

Del ciego la forma

De una vasija

O recorren un rostro, minuciosamente

Así voy, en la noche, por

La ciudad

(Mujer rencorosamente poseída

Y vasto territorio del tacto:

Conozco

El sabor agrio de tu sexo)

2

Rincones insidiosos, pasajes

Ocultos, normas

Arteras

Y en mí

Un mapa de la oscuridad

3

Y no cruzo el puente de piedra

Porque ya no hay piedra; no toco

Los muros, pienso

Otros muros vanos; descamino

Los sitios, ya interiores, del hábito

4

Plazas posibles

Donde el reloj marca otras horas

Las calles que el ciego prefiere

Y frecuenta

Laberintos en la memoria

José Manuel Arango en este poema nos da a entender que todo es un todo, que todo con lo que él se basa para hacer sus poemas o no tanto basarse si no

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