LA PRACTICA EDUCATIVA

• INTRODUCCIÓN

Ser docente no es nada fácil, pues la tarea de enseñar y sobre todo que los alumnos aprendan, es el proceso más complicado que el de cualquier otra profesión. Es por eso que siempre se busque la manera de mejorar y para eso se requiere de diversos aspectos.

El presente ensayo tiene la finalidad de de abordar algunos de los aspectos importantes que intervienen dentro de la práctica educativa, variables metodológicas, así como secuencias didácticas y otros recursos importantes como los tipos de organización a nivel escuela, más importante aún, a nivel aula donde estaremos más en contacto con los alumnos quienes tienen que trabajar de manera individual o en equipo, pero debemos enfocar la atención en que las actividades estén bien aplicadas además de organizadas con el contenido correcto y en el espacio adecuado. Es primordial que en el complejo proceso de enseñanza-aprendizaje se fije la atención en la cantidad de contenidos cuidando que siempre tengan una finalidad.

El conocer estos aspectos nos permite reconocer las ventajas, desventajas de cada uno de ellos, para la toma de la mejor decisión y para que la práctica tenga un desarrollo exitoso.

También es relevante hacer un enfoque a los diversos aportes que hacen algunos autores pues ofrecen pautas y orientaciones de cómo plantearse la acción educativa en el aula desde una perspectiva de análisis y reflexión sobre la propia práctica que ayuden a mejorarla.

• DESARROLLO

La docencia como todas las profesiones, debe estar en constante cambio para mejorar, lo que puede darse a través de conocer todos los aspectos que interviene en el conocimiento y la experiencia; ambos se van dando paulatinamente durante el transcurso del trabajo docente, pero la mejora de la práctica educativa se llega solamente mediante el análisis de lo que se hace, de la práctica y del contraste con otras prácticas no basta con una valoración propia del desempeño profesional pues en realidad por si solos no nos damos cuenta de todo lo que hemos hecho bien, lo que es satisfactorio y lo que es mejorable ,ni tampoco la comparación con otros compañeros será suficiente, se necesitan de criterios que permitan realizar una evaluación razonable y fundamentada.

En la educación no existen marcos teóricos tan fieles y contrastados empíricamente como en muchas de las otras profesiones. En la clase suceden muchas cosas a la vez, rápidamente y de forma imprevista, y durante mucho tiempo, lo cual hace que se considere difícil, cuando pero no imposible, el intento de encontrar pautas o modelos para racionalizar la práctica educativa. .

Elliot distingue 2 formas muy diferentes de desarrollar la práctica: 1) El profesor que emprende una investigación sobre un problema práctico que se esté viviendo. 2) El profesor que modifica algún aspecto de su práctica docente como respuesta a algún problema práctico. El grado de comprensión de los procesos educativos, no puedeser muy diferente al de otros profesionales que se mueven en camposde notable complejidad, ya que se hace más necesario que losenseñantes dispongamos y utilicemos referentes que nos ayuden ainterpretar lo que sucede en el aula siendo éste utilizado previamentepara planificar y para una valoración de lo acontecido. El conocimiento que se tiene hoy en día es suficiente, pero senecesitan medios teóricos que contribuyan a que el análisis de lapráctica sea verdaderamente reflexivo; se concentrara en dos grandesreferentes: la función social de la enseñanza y el conocimiento delcómo se aprende.

Para Elliot existen dos formas diferentes de desarrollar dicha práctica; la primera consiste en empezar una investigación a partir de un problema que se esté viviendo, es necesario que se modifique algún aspecto que pueda ser causa del problema. En este modelo se le da una importancia mayor a las cuestiones académicas basadas en el estudio del pensamiento de los profesores. En la segunda, el profesor debe de modificar algunos aspectos de su práctica como respuesta a algún problema, es importante que se compruebe la eficacia para resolverlo. Para medir la eficacia puede utilizarse la evaluación de la estrategia que se puso en acción y así mismo comenzar una reflexión. Este tipo representa con más exactitud la lógica natural del pensamiento práctico.

El desempeño como docente es una tarea muy difícil, algo muy elemental es que se disponga y se usen referentes que ayuden a interpretar lo que sucede en el aula, la no aplicación de esto ha llevado a una limitación de la buena actuación profesional basada en el pensamiento práctico, pero con capacidad reflexiva.

Los medios teóricos contribuyen a que el análisis de la práctica educativa sea verdaderamente reflexivo, permiten fundamentar la práctica, ofrecen pistas acerca de los criterios de análisis y acerca de la selección de las posibles alternativas de cambio.

• 2. Las variables que configuran la práctica educativa. La práctica es algo fluido, huidizo, difícil de limitar concoordenadas simples, y, además, compleja ya que en ella se expresanmúltiples factores, ideas, valores, hábitos pedagógicos, etc. Entenderla intervención pedagógica exige situarse en un modelo en el que elaula se configura como un microsistema definido por unos espacios,una organización social, unas relaciones interactivas, una forma dedistribuir el tiempo, etc., donde los procesos educativos se explicancomo elementos estrechamente integrados en dicho sistema. La intervención educativa tiene un antes y un después queconstituyen las piezas consubstanciales en toda práctica educativa: laplanificación y la evaluación de los procesos educativos. Laplanificación, la aplicación y la evaluación son las tres fases de laintervención reflexiva y son parte indispensable de la actuacióndocente ya que son los que suceden en el aula. Las unidades deanálisis más elementales que presenta los procesos de enseñanza-aprendizaje y que completa todas las variables son las actividades otareas, que representan estabilidad y diferenciación ya que tienenentidad suficiente para hacer un análisis ilustrativo de los diferentesestilos pedagógicos, pero para el objetivo que se propone pareceinsuficiente. Las actividades concentran en ella la mayoría de lasvariables educativas, pero pueden tener un valor u otro según el lugarque ocupen respecto a las otras actividades, las de antes y las dedespués. Teniendo en cuanta el valor que adquieren las actividadescuando las colocamos en una serie o secuencia significativa, hay queampliar esta unidad elemental e identificar, también como nuevaunidad de análisis las secuencias de actividades o secuenciasdidácticas como unidad preferente para el análisis de la práctica, quepermitirá

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