Legislacion Aduanera

Experiencia China

Clemente Hernández Rodríguez

Eliminacion de aranceles

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El Occidental

28 de noviembre de 2007

En diciembre de 2007 vence el plazo al que México se comprometió hace seis años cuando China se adhirió a la OMC para revisar cualquier barrera al comercio, con lo cual se acaban los tiempos previstos para que las industrias vinculadas con la eliminación de cuotas compensatorias a China puedan iniciar sus investigaciones y revisar esos gravámenes. De entre las mil fracciones contempladas, el sector textil representa 425 fracciones, y vestido otras 250 fracciones.

Existe la certeza de que China sólo espera la llegada de las fechas para iniciar una revisión del tema, dado que hay viejas heridas que aún no sanan. Una de ellas es que México fue el último en firmar su acuerdo de incorporación a la Organización Mundial del Comercio (OMC). Gracias a ello, México obtuvo el mayor plazo de todos los firmantes para sostener las cuotas. Fueron seis años, cuando los Estados Unidos y Europa no tuvieron ni siquiera la mitad. Habrá que reconocer que las cuotas impuestas a China en 1992, 1993 y 1994 nada tuvieron de compensatorias. Más bien se concibieron como inhibidoras con niveles desapegados a las reglas de la OMC. La fracción más alta del calzado por ejemplo está en mil 105 por ciento, la de hilados y tejidos 501 por ciento, herramientas 312 por ciento, bicicletas 144 por ciento, maquinaria y equipo 129 por ciento.

A pesar de estas barreras arancelarias, China es ya nuestro segundo socio comercial en el ámbito formal. En el informal no hay cifras, pero China es uno de los actores más importantes. Se estima que la piratería y el contrabando andarían en alrededor del 18 por ciento del PIB de México. En lo que se refiere al vestido, esos gravámenes ni siquiera restringieron la entrada de las mercancías de China a un mercado informal que hoy es el 50 por ciento de las ventas del rubro. No en balde en ropa los tianguis son ya una cuarta parte de las ventas, mientras que en los autoservicios (la ANTAD) no han dejado de perder terreno y son sólo el 11 por ciento del negocio. Incluso en la frontera norte el consumidor prefiere adquirir ropa en Estados Unidos, dado que de 1994 al 2007 los precios de esos productos se han elevado allá apenas 12.24 por ciento contra más del 200 por ciento en México. Para el consumidor esas mayores importaciones de ropa le han permitido en los últimos años acceder a más diversidad de productos y a mejores costos. El problema es que como país ganamos a medias porque los informales no pagan impuestos y no generan empleos. Aun así para la industria del vestido los últimos años no han sido fáciles. La industria del vestido aporta el uno por ciento del PIB y da empleo directo a 373 mil trabajadores. Del 2006 a la fecha han cerrado mil 300 empresas y las exportaciones han caído casi 20 por ciento. Este rubro son 10 mil 600 compañías, de las cuales 97 por ciento son Mipymes.

Ahora lo importante es que esas industrias concluyan con la entrega de la información a la Unidad de Prácticas Comerciales (UPCI), para que antes del 11 de diciembre se inicien las investigaciones para revisar sus tarifas. Se cree que muchas de las cuotas van a desaparecer y otras se modificarán, aunque las propias empresas podrían iniciar a su vez un recurso de daño contra China para forzar una negociación. Obvio, la inmovilidad sería el peor escenario, puesto que en ese caso no se descarta que China lleve a México a un panel de la OMC que podría ganar en menos de un año.

Experiencia China

Clemente Hernández Rodríguez

A defenderse del dragón

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El Occidental

12 de diciembre de 2007

Como parte del Protocolo de Adhesión a la Organización Mundial del Comercio (OMC), China aprobó en el año 2001 que México pudiera mantener sus cuotas compensatorias establecidas a la importación de productos textiles, de hilo, de tejidos, de químicos y de calzado. Pero el plazo fijado en la firma de ese protocolo venció este 11 de diciembre, por lo que a partir de hoy las industrias involucradas dependerán del resultado del examen de vigencia de cuotas que lleva a cabo la Secretaría de Economía o bien de una posible negociación con China. El pasado martes 4 de diciembre, el Senado de la República aprobó por unanimidad el punto de acuerdo que solicita a la Secretaría de Economía ampliar por un periodo de cinco años más la vigencia de las cuotas compensatorias a productos provenientes de China.

China ya ha manifestado su negativa de llegar a paneles internacionales donde la Organización Mundial de Comercio sea quien decida la continuidad de cuotas compensatorias. China ha manifestado su interés de negociar con México. Sin embargo, aunque existe la apertura del sector para negociar con China, la postura sigue siendo la de no ceder la eliminación de ninguna de las cuotas establecidas que se defienden en el juicio que se lleva a cabo a través de la Secretaría de Economía.

El ingreso de China a la OMC, trajo como consecuencia principal, que para respetar las normas de ese organismo, las cuotas compensatorias sólo se podrán aplicar, cuando el país que recibe las mercancías demuestre el daño y el dumping. El punto central es que, los costos de los productos chinos son extremadamente bajos porque

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