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Lexicologia


Enviado por   •  20 de Julio de 2014  •  1.906 Palabras (8 Páginas)  •  275 Visitas

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Trascendencia de la obra de Miguel de Cervantes Saavedra.

(Don Quijote dela Mancha)

BIOGRAFÍA

- Nació en Alcalá de Henares en el año 1547, hijo de una familia prospera con posibles ascendientes conversos.

- En 1566 se traslada con su familia a Madrid, donde asiste a las clases del humanista J. López de Hoyos.

- Publica sus primeras poesías en la Relación Verdadera de López de hoyos en 1569. Ingresa en el tercio de don Miguel de Moncada.

- Participo en la batalla de Lepanto en el año 1570.

- En 1575 cae prisionero de los turcos y pasa cinco años en Argel, donde empieza a escribir su grande obra Don quijote de la mancha. En 1580 es liberado y regresa a España.

- Contrae matrimonio con Catalina de Salazar y Palacios en 1584.

- En 1585 pública la obra pastoral de La Galatea. Escribe las dos primeras comedias La comedia de la confusión y Tratado de Constantinopla y muerte de Selim (ambas desaparecidas).

Ingresa a la academia Imitatoria en 1587, primer círculo literario madrileño. Fue designado comisario real de abastos.

- En 1605 aparece la primera parte de El Ingenioso hidalgo don quijote de la mancha. La segunda la publico en 1615.

- Continuó publicando libros, en 1616 fallece en Madrid y es enterrado en el convento de las trinitarias descalzas.

Obras de Cervantes:

• 1582 - La Numancia

• 1582 - El trato de Argel

• 1585 - La Galatea

• 1605 - El Ingenioso Hidalgo don Quijote de la Mancha (Primera parte)

• 1615 - El Ingenioso Hidalgo don Quijote de la Mancha (Segunda parte)

• 1613 - Novelas Ejemplares

• 1614 - Viaje al Parnaso

• 1615 - Ocho comedias y ocho entremeses nuevos, nunca representados

• 1617 - Los trabajos de Persiles y Segismunda, historia septentrional (obra póstuma)

(Miguel de Cervantes Saavedra)

Argumento

Alonso Quijano es un hidalgo pobre de la Mancha, que de tanto leer novelas de caballería acaba enloqueciendo y creyendo ser un caballero andante, nombrándose a sí mismo como Don Quijote de la Mancha. Sus intenciones son ayudar a los pobres y desfavorecidos, y lograr el amor de la supuesta Dulcinea del Toboso, que es en realidad es una campesina llamada Aldonza Lorenzo.

La primera salida la hace solo, pero regresa en poco tiempo a casa y decide nombrar a Sancho Panza, un empleado suyo, escudero.

Juntos realizan la segunda salida, en la que viven más de una aventura: Don Quijote ve y ataca a unos gigantes que en realidad resultan ser molinos de viento, confunde un rebaño con un ejército, tiene más de una disputa, una de ellas con un vizcaíno, y llega a enfrentarse a unos leones. Finalmente, y tras hacer penitencia en un bosque, es capturado por el cura y el barbero de su pueblo y llevado a casa en una jaula tras ser engañado para ayudar a la supuesta princesa Micomicona.

En la tercera y última salida, las aventuras más destacadas son las de La cueva de Montesinos, donde Don Quijote sueña mil maravillas, el rebuzno de Sancho Panza, y para finalizar, la derrota de Don Quijote ante el Caballero de la Blanca Luna, Sansón Carrasco, razón por la que se retira su hogar, donde, tras adquirir de nuevo la cordura, fallece.

TRASCENDENCIA DEL QUIJOTE

El Quijote tuvo un éxito fulminante.

Pero en el siglo XVII se leyó simplemente como un libro preferentemente humorístico cuya trascendencia quedaba tal vez limitada a ser una parodia regocijante de los libros de caballerías, tan difundidos entonces.

Un siglo después, en el XVIII, extinguido ya dicho género narrativo, los lectores y los críticos empiezan a considerarlo como obra clásica y modelo de lenguaje. Se estudia la vida de Cervantes y se publica el Quijote en ediciones lujosas y con ilustraciones muy bellas. Los españoles se sienten orgullosos de la novela, que numerosos críticos extranjeros incluyen entre las máximas realizaciones del ingenio humano.

Es en el siglo XIX, con el advenimiento del Romanticismo, cuando el Quijote empieza a ser valorado profundamente. En aquella época valerosa e idealista, el caballero manchego se convierte en símbolo del hombre que lucha sólo por el triunfo del espíritu sin que le arredren los obstáculos. Parece el último caballero de la Edad Media generosa y noble, y, sin duda, es el primero de la nueva edad que debe conducir al hombre a vencer la opresión y la injusticia.

Desde el Romanticismo, las interpretaciones se han sucedido y se suceden: filósofos, historiadores de las ideas, críticos y políticos vuelven una y otra vez a él para desentrañar sus sentidos, que cada vez parecen más ricos y complejos.

El hidalgo y su escudero encarnan, respectivamente, el impulso ideal y el tosco sentido común que coexisten en el corazón del hombre.

Don Quijote se exalta, imagina las hazañas más portentosas, muchas veces no ve la realidad sino lo que inventa su fantasía. Es, in duda, un loco; pero su locura, en vez de alejárnoslo como sujeto risible y anormal, nos lo trueca en espejo, en modelo de comportamientos válidos para todos los hombres.

Porque, contra viento y marea, lucha por el amor, por la justicia y por la libertad.

Aunque ello le valga quebrantos y desventuras, nada puede doblegar su animoso corazón. Sancho, por el contrario, rudo, glotón y rústico, es la contrapartida de su señor, cuyas extravagancias no entiende.

Pero lo sigue, dando un ejemplo de fidelidad que le permite llegar a participar oscuramente de los impulsos ideales y generosos de Don Quijote. En este sentido, se ha podido hablar

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