Organizaciones De Mujeres

En Honduras, el estudio de las representaciones sociales como elemento de análisis histórico apenas está en pañales. De hecho, en el mismo sentido, las representaciones sociales de género y su manifestación cultural en la sociedad hondureña, sin duda no han sido muy estudiados. Todo depende, sin duda de los momentos historiográficos o de las temáticas dirigidas a establecer líneas de investigación desde el mundo académico. La búsqueda de una historia de las mujeres ha estimulado la reflexión sobre lo que podría significar dicha historia, sobre las implicaciones que tiene para el resto de la historiografía y sobre la relación que debería tener con una verdadera historia general, con una historia en la que las mujeres, del mismo modo que los hombres, tengan un lugar.

De hecho, la historia de las mujeres y del género en el ámbito historiográfico, ha estado sometido al análisis de la movilización femenina en el contexto de la democratización a principio de los años 50, dando por hecho que la historiografía más idónea gira alrededor de comprender la lucha de las mujeres por ascender durante el siglo XX, a obtener la ciudadanía, los plenos derechos como ejercer el sufragio y por consiguiente, cargos públicos en la palestra política hondureña esto fue un proceso que costo sangre para la población femenina en nuestro país, ya como es conocido las mujeres han sido subyugadas a un costado por el machismo privándolas de tener voz y voto.

Por ello, quiero demostrar que existen otras formas por donde profundizar el análisis de la historia del feminismo y de los grupos de mujeres en nuestro país iniciando en la mitad del siglo XX.

Históricamente, el problema se podría ver retrospectiva y prospectivamente, pero eso implica un trabajo más duro que busque develar aquellas construcciones culturales, estructurales que se manifiestan en los grupos de mujeres en la mitad del siglo XX. De hecho, la historia del cuerpo es sin duda una de las perspectivas que ayuda a ver que a hombres y mujeres se les construye de distinta manera, que la delimitación del género en sexos empieza desde antes de la concepción y que el ser delgados (flacos) o robustos (gordos), limpios o sucios, sólo implican valores que están sin duda ligados a influencias foráneas y propias que se sincretizan de acuerdo al nivel de aceptación que éstos tengan dentro de la sociedad.

Lo cual demostró que los valores tradicionales de los estereotipos de género, siguen siendo los mismos, los hombres están en el espacio público y las mujeres al igual en el espacio privado, los hombres son proveedores, y las mujeres son procreadoras, todo ello con algunos grados de diferenciación gracias a las influencias foráneas, es decir, se permiten algunas libertades para las mujeres pero nunca dejan de ser sujetas de estar en el espacio privado, el de la casa, que es donde quizá más se puede permitir una libertad distinta a la de ser ama de casa y madre.

Los estudios realizados en referencia a este tema en Honduras son muy pocos, por ejemplo tenemos <que para mí es el más importante> el de Rina Villars “Para la casa más que para el mundo: Sufragismo y Feminismo en la Historia de Honduras” en este estudio encontramos un análisis desde las primeras luchas de las mujeres como ser el derecho a la educación y la ciudadanía, hasta como se forman las primeras organizaciones de Mujeres en Honduras.

En la época de la colonia hasta la mitad de siglo XIX, es una manera de ver como la mujer fue negada su educación, hasta que se da la reforma Liberal, se le abren las puertas de las letras a la mujer para convertirla en un objeto de enseñanza

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