PRACTICA DE LA INTERCULTURALIDAD EN EL AULA

                     PRACTICA DE LA INTERCULTURALIDAD EN EL AULA

Introducción:

La Interculturalidad es el proceso de comunicación e interacción entre personas o grupos con identidades de culturas específicas, donde no se permite que las ideas y acciones de una persona o grupo cultural esté por encima del otro, favoreciendo en todo momento el diálogo, la concertación y, con ello, la integración.

Me gustaría añadir dos citas sobre el enfoque de esta práctica con los que estoy muy de acuerdo y me parecen la base, El enfoque educativo intercultural, debe ser amplio, donde se permita conocer y reconocer la cultura propia, y la de los otros sujetos, que están en interacción constante, respetando ambos saberes y teniendo presente que cada uno tiene una lógica para comprender el mundo, desde una perspectiva propia (Tubino, 2005). Al respecto, se debe promover procesos de intercambios, interacción y cooperación entre sociedades y culturas, para ello el enfoque educativo intercultural se propone como interacción, comunicación y diálogo (Malik y Ballesteros, 2015), para facilitar la comprensión entre miembros de culturas distintas.

Una vez  expuesta la base desde la que me gustaría partir a la hora de confeccionar dichas prácticas, voy a proceder a la descripción y análisis de la práctica educativa para la inclusión intercultural enfocada al aula.

Caso práctico

Tras leer varios artículos y varios modelos de actuación ejemplificados, el modelo de actuación en el aula que voy a exponer es el del juego de roles o role playing.

El juego de rol (Role-Playing) consiste en dramatizar una situación de discriminación con la que los participantes se pueden encontrar fácilmente, tanto de forma particular, como en el contexto que le rodea. La situación que se representa debe ser de un conflicto de valores y los alumnos han de vivenciarla intelectual y afectivamente. Sólo un grupo de estudiantes lleva a la práctica dicho conflicto y el resto observa, anotando lo necesario para el debate posterior, imprescindible para la evaluación de la actividad. Esta técnica es muy válida para ayudar a entender un problema y desarrollar la empatía, la posibilidad de ponernos y comprender la situación de los demás, por lo que favorece la cohesión del grupo.

El esquema de trabajo es el siguiente: situación, papeles y guión de discusión. La situación de conflicto debe conocerla todo el grupo y es recomendable que los estudiantes que van a representar la situación, se preparen sus papeles con anterioridad. Hay que destacar que, aunque las líneas de actuación de los personajes van marcadas en la actividad, la improvisación de los actores es una pieza fundamental para el buen desarrollo del juego de rol. La última parte, la discusión, es la más educativa, puesto que se ponen en común las ideas de todo el grupo sobre el tema en conflicto, los sentimientos en juego durante la actividad, cómo se han sentido y actuado los participantes, cómo se puede defender una postura que no corresponde con la propia. Es muy interesante que los papeles estén cruzados (como puede ser en caso discriminación hombre-mujer, el papel de la mujer lo adoptaría el hombre y viceversa).

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