Práctica II: “Asistencia al Docente”

INTRODUCCIÓN

El presente trabajo está basado en las experiencias vividas durante el periodo de práctica II: “Asistencia al Docente”, periodo que está comprendido entre los meses de Enero hasta finales de Junio, centrándose principalmente en la observación y sobre todo en la asistencia al docente.

La práctica educativa tiene como principal objetivo validar los aprendizajes que se obtuvieron en el centro educativo y sobre todo adquirir nuevos conocimientos y destrezas que solo se pueden llegar a obtener en el contexto laboral.

Es por lo anterior que se dice que la práctica educativa, es el medio principal por el cual el futuro docente tiene contacto directo con el campo de trabajo relacionado a su carrera. Es así como he querido reflejar no solo lo observado, lo vivido y las características del aula, sino también que es lo que se debería tener en cuenta a la hora de educar. En la etapa de la Educación primaria es cuando los niños más experimentan un desarrollo extraordinario de sus habilidades y motivaciones para pensar acerca de lo que hacen, predecir el resultado de sus acciones, el lenguaje y recordar sus experiencias mostrando que las vivencias que adquieren son significativas para su crecimiento y desarrollo integral.

El quehacer del maestro va más allá del mero trabajo dentro de un salón de clases, ya que es el líder de un grupo de niños y padres de familia, que va a buscar, que el trabajo con los niños dé una mejora al contexto que rodea la escuela y poco a poco ir formando buenos hábitos. Por ello, en este periodo de prácticas he aprendido lo importante que es la función del docente, puesto que en mi opinión el éxito del proceso de enseñanza-aprendizaje depende en gran medida de la calidad de los profesores. Esta calidad, a su vez, está en función de la formación que cada uno de los docentes recibe, sobre todo en el proceso posterior de su desarrollo profesional continuado. Así, cada vez es más importante que los docentes dominen la materia que imparten y que sobre todo posean la habilidad necesaria para comunicar de una manera efectiva el conocimiento básico para el alumno, es decir no utilizar un lenguaje científico, ni técnico que puedan confundir a los alumnos.

En el transcurso de estas prácticas he sentido el gran cariño que un niño puede tener hacia la figura del maestro, la motivación que muestran cuando se introduce alguna novedad, la sensación de satisfacción cuando un niño disfruta con un nuevo conocimiento y todo ello me ha ayudado enormemente a tener conciencia de la labor que en un futuro desempeñaré y a estar segura de que eso es lo que quiero hacer. La dedicación a esta profesión es una labor bastante complicada pero a su vez importantísima, puesto que estamos preparando a niños, esas pequeñas personas que algún día podrían convertirse en médicos, arquitectos, policías, artistas…

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