Segurida E Higiene De Un Bar

Aplicación de medidas de higiene y seguridad, estándares de calidad.

Se Deben de hacer tres distinciones al hablar de la higiene del Bar

Una, en relación con la higiene del local; otra, con respecto a la higiene en el servicio y, por último, la higiene personal del los trabajadores.

Por ser locales abiertos al público y por el tipo de servicios que prestan deba cuidarse al máximo la limpieza en el local. Una buena ventilación que se puede lograr con extractores, renovadores de aire, aire acondicionado o simplemente creando corrientes. Influye en el cliente para lograr su asiduidad en el establecimiento. Los ambientes cargados no solo son perjudiciales para la salud, sino que perjudican al negocio, ya que el cliente se encuentra a disgusto, al tener una desagradable sensación de incomodidad.

La falta de limpieza en los suelos, polvo en sillas y mesas, mala conservación de pintura en las paredes, pueden ser motivos y causas de la disminución o pérdida de clientes, que va en perjuicio del negocio.

Otro de los puntos importante es seguir las normas de elementales de la higiene con respecto a los sanitarios.

La falta de limpieza en estos servicios puede ir en perjuicio de la salud pública, además de estar expuestos a las sanciones que la dirección general de sanidad, por falta de cuidados, pudiera imponer.

La higiene se debe observar en este sentido, es una de las premisas obligatorias a seguir por todos los establecimientos. No consiste en argumentar como pobremente hacen algunos sobre la categoría del local ya que, según estos, en los locales de categoría inferior no se deben de guardar estas normas.

No solo ya es una falta de respeto hacia al cliente sino hacia uno mismo y para todos aquellos que luchan por dignificar y elevar la profesión.

La falta de limpieza en la vajilla que se emplea para el servicio, en recoger las copas o vasos metiendo los dedos en el mismo, etc.; son:

Fallos que no deben de ser consentidos por los responsables y encargados de estos establecimientos.

Los bares y restaurantes se encuentran

regulados por un Reglamento específico: “Reglamento general de policía de

Espectáculos públicos y actividades recreativas promulgado mediante Real Decreto

2816/1982 , que incluye requisitos de protección contra incendios.

No obstante y a los efectos de seguridad contra incendios deben considerarse

derogados en sus artículos 2º a 9º y 20º a 22º de este Reglamento ya que los temas

que regulan deben cumplir los requisitos exigidas por la NBE-CPI/96.

Por otra parte y en cuanto a la regulación de situaciones no previstas en normativas

posteriores todavía siguen vigentes algunos art. Del Reglamento de Policía de

Espectáculos Públicos.

Conforme la NBE-CPI / 96, este tipo de edificios se enmarca dentro del Uso P*

( Pública concurrencia), entre las que se encuentran:

o Restaurantes, cafés, cafeterías, bares y similares.

o Cines, teatros, salas de conciertos.

o Salas de exposiciones y conferencias.

o Verbenas y fiestas populares.

o Pubs, discotecas y salas de baile, salas de fiesta.

o Casinos, salas de bingo, salas de máquinas recreativas.

Este tipo de locales por expreso imperativo legal ( Art. 24 RD 2816/82, de 27 de

Agosto) deben elaborar un plan de emergencia y disponer de una organización de

autoprotección en los mismos.

Uno de los grandes problemas que presentan los bares y restaurantes es el aforo

público, que en muchas ocasiones se rebasa ; en establecimientos de espectáculos y

en los de actividades recreativas, el aforo máximo permitido que los Ayuntamientos

deben reflejar en la licencia municipal, debe determinarse por el procedimiento a que

la NBE-CPI/96 obliga.

Las causas más comunes de incendio son:

Instalaciones en mal estado.

Aparatos eléctricos portátiles.

Almacenamiento inadecuado de bombonas de gas.

Fumadores.

Equipos y productos utilizados en las cocinas. (Escapes de gas, sartenes con

aceite que prenden, malas conexiones de las gomas de los hornillos...etc)

Fallos de compartimentación por puertas cortafuego abiertas y acuñadas ( este

hecho lo constatamos en multitud de ocasiones ).

Conductores que pueden conducir las llamas y gases inflamables a lugares

remotos ( conductos de aire acondicionado, montacargas...).

Existencia de instalaciones eléctricas defectuosas o la sobrecarga de las

mismas.

Negligencia de fumadores.

Acumulación de papeles o de basuras o falta de limpieza en cocinas y

almacenes.

Trapos sucios con grasa cerca de los fogones.

Acumulación excesiva de productos inflamables o combustibles.

VIAS DE ESCAPE:

Evacuación: Es la acción de desalojar un edificio en el que se ha declarado un

incendio u otro tipo de emergencia.

El inicio de la evacuación puede ser horizontal ( puertas y pasillos) y vertical (

escaleras).

Por ello establecemos una serie de medidas, las más importantes a tener en

cuenta.

Claras y sencillas

Perfectamente señalizadas : No debe existir acumulación de señalización ya que

no induce más que a confusión, a una acumulación de información innecesaria.

Además las señales deben encontrarse visibles.

Toda puerta que desemboque en una vía de evacuación estará debidamente

señalizada.

Las vías de emergencia deben ser recorridos cortos y sin obstáculos de ningún

tipo. Hay que evitar todo aquello que pueda causar tropiezos, cono los suelos

irregulares o los pequeños escalones detrás de las puertas.

Las puertas deben abrirse en el

sentido de la marcha y llevarán

barras de presión en lugar de

picaportes o pomos. No debe haber

posibilidades de dejarlas cerradas

con llave. Si hay puertas giratorias o

torniquetes, hay que disponer de

puertas de salidas de emergencia

junto a ellas.

Las puertas finales de emergencia deben desembocar en lugar seguro, no

deben conducir a espacios abiertos pero sin salida ( rejas cerradas, patios

interiores sin ninguna salida...)

Puertas cortafuegos en pasillos y zonas comunes que deben permanecer

siempre cerradas o disponer de un mecanismo de cierre automático en caso de

alarma.

La ruta debe estar claramente señalizada con los símbolos internacionales

...