La educación

                                               Córdova Espinosa Amairani 4° “B”  Número de lista: 3

Ensayo

Etimológicamente educación significa un proceso de dirigir o encauzar.  En el sentido moderno, la educación es un proceso de estimulación, nutrición y cultivo; es una actividad estructurada, moldeadora y formadora, es decir, una estructuración según la forma normativa de la sociedad. Paulo Fraire afirma que “la educación nunca es neutra, porque se presenta siempre como una acción del hombre sobre el mundo”, en otras palabras, es un proceso constante, ya que las necesidades de la sociedad cambian con el tiempo.

La educación humanista se basa en la integración de valores humanos, sostiene Freire que siempre que se hable y piense en la educación y en cómo educar se deberá realizar antes una “reflexión sobre el hombre concreto a quien uno quiere educar. Si falta esta reflexión sobre el hombre se corre el riesgo de adoptar métodos educativos y maneras de obrar, que reducen al hombre a la condición de objeto”. La educación humanista pretende que los educados y los educadores usen la razón, que la sociedad sea una sociedad crítica, que se utilice la reflexión en cada decisión; además, no acepta el ocio, trata de buscar el bien para los demás.

Educación liberal, es un proceso de renovación de la condición social del individuo, considerando al sujeto como un ser pensante y crítico, reflexionando de la realidad que vive. A fin de que los alumnos sean capaces de adecuar y flexibilizar los contenidos, así mismo, que el alumno decida qué y cómo aprender, haciéndolo a su propio ritmo, en este caso el docente es el que guiará a sus alumnos para no pasar de libertad a libertinaje.

La educación pragmatista se refiere a la experiencia, según la teoría de Dewey, esta está mucho menos centrada en el niño y más en el maestro de lo que se suele pensar, su convicción de que la escuela, tal como la concibe, inculcará en el niño un carácter democrático, se basa menos en la confianza de las “capacidades espontáneas y primitivas del niño” que en la aptitud de los maestros para crear en clase un entorno adecuado “para convertirlas en hábitos sociales, fruto de una comprensión inteligente de su responsabilidad”.

La experiencia es aquella que nos ayuda a no cometer los mismos errores del pasado, a sobrellevar una situación antes conocida, a comparar algún hecho pasado con uno presente, para así construir un conjunto formal de conocimientos. Dewey plantea, que la educación para la democracia requiere que la escuela se convierta en “una institución que sea, provisionalmente, un lugar de vida para el niño, en la que éste sea un miembro de la sociedad, tenga conciencia de su pertenencia y a la que contribuya”.

La educación socialista está ligada a la teoría marxista y consiste en enseñar al alumno la realidad en la que vive, que el alumno se diera cuenta de las clases sociales. En el pasado, la burguesía era la privilegiada, entonces lo que quería esta educación era que el alumno aboliera la burguesía por un criterio socialista.

La educación neoliberal se ha utilizado en el mundo actual para indagar de qué manera la oferta de modernización económica, profundización de la democracia, bienestar y justicia social, se transforma en la realidad, gracias a la racionalidad instrumental del paradigma neoliberal, es promotora de una sociedad autoritaria, antidemocrática, ingobernable y violenta. Es decir que la educación neoliberal está presente en la actualidad, los avances tecnológicos y científicos dan libertad a que el alumno construya su propia enseñanza (educación por competencias).

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