Personeria juridica de pueblos originarios

TRABAJO PRÁCTICO DE INVESTIGACIÓN

TEMA: Pueblos originarios.

SUBTEMA: La personería jurídica de las comunidades indígenas y el ejercicio de sus derechos.

Grupo N°9

Alumnos:

-Alonso Casabene, Ailen

-Balbi Vignolo, Magdalena

-Fernández, Felipe

-Kapszuk, Iara

-Marcasso, Felipe

-Moiso Chamorro, Agustina

-Turano Douer, Carola

Comisión: 6465

Tutor: Ledesma Pablo

Introducción:

La siguiente investigación se centrará en los pueblos originarios teniendo como objetivo abordar uno de los problemas que afecta gravemente el ejercicio pleno de sus derechos: la personería jurídica.

Para empezar, se explicará cuál es la problemática a tratar, es decir, porqué la personería jurídica constituye aún un problema sin resolver. Consideramos necesario, así, remitirnos a la historia de los pueblos originarios.
Luego, se hará una exhaustivo análisis de la situación actual en el ámbito tanto regional como internacional, utilizando elementos e instrumentos jurídicos que resguarden y recepten la protección de los derechos humanos, como también jurisprudencia proveniente de distintos órganos. Por último, se harán las respectivas conclusiones según lo precedente, y propuestas personales para encontrar una solución.

Planteo del problema:
Actualmente, las comunidades indígenas se constituyen como tales a partir de la adquisición de la personería jurídica. Sin embargo, nos encontramos con que tanto los artículos de la Constitución Nacional como las leyes complementarias a éstos no son funcionales para la plena efectivización de sus derechos.
Siendo esto así, nos lleva a preguntarnos ¿es realmente necesario la obtención de la personería jurídica para que los pueblos originarios puedan ejercer sus derechos plenamente?, es decir, ¿Puede pensarse que un pueblo que ha trascendido por miles de años –de allí su preexistencia- sobre la base de su cultura y costumbres –alejadas y diferenciadas de la burocracia del Estado moderno- puede adquirir o extinguir su presencia en razón de un trámite administrativo? y consecuentemente, ¿Garantiza el Estado el cumplimiento de las leyes y tratados internacionales en materia de derechos de los pueblos originarios?
El art. 75 inc 17^[1] es una de las incorporaciones más importantes de la reforma constitucional de 1994 en cuanto a los derechos de las comunidades indígenas. De allí deviene la personería jurídica que deben adoptar dichas poblaciones. Además, dicho artículo atribuye al Poder Legislativo ciertas obligaciones que debe cumplir para garantizar el pleno ejercicio de sus derechos. Por ello, nos preguntamos: ¿Cumple el Congreso con todo lo estipulado dentro de dicho artículo?, de no ser así, ¿Quién debe responder: el Estado Nacional, Provincial o Municipal? ¿Cuáles serían las consecuencias de dicha omisión?

Objetivos:

• Conocer la conformación y el desarrollo histórico-jurídico de los pueblos originarios.

• Definir qué implica el reconocimiento de la personalidad jurídica, cuál es su alcance, cuáles son sus beneficios y desventajas.

•  Indagar cuál es el rol actual de Estado, el marco normativo que éste adopta para garantizar el ejercicio de sus derechos y a cuáles de las divisiones administrativa del Estado corresponde el accionar y la debida responsabilidad. (Estado Nacional/ Provincial/ Municipal).

• Explicitar cuál es la relación entre las diferentes reglamentaciones actuales y la realidad que viven las comunidades.

Desarrollo:

Los pueblos originarios, como el término lo sugiere, representan a las comunidades más antiguas que nuestra historia conoce. Diversas investigaciones indican que éstas existen y se han asentado en el territorio latinoamericano, mucho tiempo antes que las culturas europeas.  Su estilo de vida es comunitario y su filosofía se centra en una relación armónica con la naturaleza. Estas comunidades han atravesado un largo camino de luchas para la consagración de sus derechos como consecuencia de las atrocidades que se han cometido contra ellas. A pesar de las mismas, dichos pueblos lograron perdurar hasta nuestros días.

Desde la llegada de colonos europeos a Latinoamérica^[2], hace más de 500 años, los pueblos originarios han debido hacer frente al sometimiento de la cultura europea, no sólo para salvar sus vidas, familias y territorios, sino también, para que se les respete una forma de vida propia. Estos pueblos no constituían un solo núcleo sino que diferían entre sí por su lengua y costumbres.

Sin embargo, todos fueron denominados de una misma manera: “indios”^[3]. Esta palabra los incluyó uniformemente sin características diferenciales. Este trato igualitario se vio reforzado en la idea de que ninguno de ellos era ni católico ni europeo, lo que les consignó un grado de inferioridad.

Durante la época de la colonización y especialmente con la serie de campañas militares llevadas a cabo, se produjo el exterminio de una gran parte de los pueblos indígenas. Frente a las necesidades de sobrevivir, estos pueblos terminaron siendo esclavos para cubrir las necesidades europeas. Esto, sumado a la usurpación de sus territorios a partir del siglo XIX y el despojo de sus tierras y recursos, llevaron a los indígenas a vivir en situaciones de extrema pobreza, lo que derivó en otras formas de exclusión social.

En Argentina se llevó adelante la campaña militar llamada “Conquista del Desierto” entre 1878 y 1885, con el objetivo de conquistar extensiones territoriales que se encontraban en manos de los pueblos originarios. Si bien existen diferentes posturas y visiones respecto del tema^[4], el Estado bajo la justificación de que los pueblos aborígenes  “no permitían que se desarrolle con normalidad y civilizadamente el país”^[5], ejerció su represión con gran violencia. Siendo así, esos pueblos perdieron tierras, identidad y fueron trasladados para servir como mano de obra, sufriendo recurrentes violaciones a sus derechos. Estos sucesos llevaron a la pérdida de la cultura aborigen en conjunto y se vieron obligados a dispersarse en pequeñas comunidades a lo largo del país.

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