Una Mirada a la educación Chilena

INTRODUCCIÓN

En el último en los medios de comunicación, en las redes sociales, en los distintos espacios de la opinión pública se ha puesto en la palestra el tema de la educación, como un tema fundamental en el cambio de Chile y su avance al desarrollo. Desde el movimiento estudiantil del 2011 se ha criticado la educación en Chile, haciéndose creciente el descontento desde las escuelas hasta las universidades, haciendo una de los principales ataques a este sistema que permita el lucro con la educación en los distintos niveles y la segregación educacional. Lo cual me propongo a demostrar cual es la educación que tenemos como país  y como esta es una educación segregada que no permite el desarrollo y las oportunidades necesarias para los estudiantes que están inmersos hoy en día en este sistema perverso.

Capítulo 1: La Educación en Chile

Chile en su Constitución Política, en el Capítulo III, Articulo 19 inciso 10, el Estado chileno reconoce el derecho de la educación en la cual dice “La educación tiene por objeto el pleno desarrollo de la persona en las distintas etapas de su vida."

Basándonos en lo que dice la Constitución se señala expresamente que la educación tiene por objeto el pleno desarrollo de la persona, pero eso ¿realmente se cumple?, aparentemente entre la ley y la práctica cotidiana de este sistema educativo no concuerdan, pues no permite el libre desarrollo de la persona un claro ejemplo está en los contenidos mínimos obligatorios, que comparándolos con otros programas de estudio de países como los de la OCDE, donde el programa de Chile se observa una gran cantidad de contenidos cuya utilidad es muy poca y los niveles de educación medidos en el informe PISA dice que a pesar de tener una cantidad enorme de contenidos no estamos entre los mejores lugares como dice el Maestro Estanislao Zuleta “ Es una ensalada extraordinaria de materias diversas (geografía, geometría, etc.) que el estudiante consume durante seis años hasta que hace el examen de Estado o del ICFES, se libera por fortuna de toda aquella pesada carga de información y confusión”. Lo que describe Zuleta en el sistema colombiano es algo muy parecido a lo que ocurre en Chile, en donde se están de doce a catorce años de escolarización que consumimos para después definir nuestro futuro con la P.S.U. la cual permite ingresar a una educación Superior.

Esta sobre curriculización extrema que plantea el Mineduc, obliga a los profesores que tiene alrededor de 1700 horas curriculares a pasar estos programas, además de evaluaciones constantes a traves del SIMCE solo remite a la educación a una sola dimensión que es la de transmisión de conocimientos, datos, saberes, resultados que otros pensaron pero no permite el desarrollo ni el pensamiento de los estudiantes, generando así en todos los colegios particulares, subvencionados y municipales fábricas de niños totalmente embrutecidos. Cuando el verdadero objetivo de la educación es forma seres humanos racionales en todas sus dimensiones como la académica, la valórica, la normalizadora, propulsora del pensamiento. Pero el sistema actual hace todo lo contrario estableciendo una gran cantidad de información para confundir y no informar, reprimiendo el pensamiento de los niños y limitándolos a solo seguir reglas remitiéndolos a meros engranajes de un gran sistema olvidándonos de las palabras de S. Freud en que decía que el niño es un investigador por excelencia porque se mueve por la inquietudes que tiene por el ambiente que lo rodeaba.

Capítulo 2: El Apartheid Educacional Chileno

El sistema educativo chileno actual se basa en el modelo fundamentalista de mercado, que supone que la escuela debe educar a una pequeña élite para que tenga acceso a niveles superiores de educación, pero donde la gran mayoría de los trabajadores sólo requieren adquirir competencias básicas, solamente en matemáticas y alfabetización.

El modelo fundamentalista del mercado supone al estudiante de una identidad en la que solo tiene que obedecer sin pensar y memorizar una gran cantidad de información, de la cual solo una pequeña parte le será útil por el resto de su vida. Donde lo que se enseña en las escuelas y universidades como dice el Maestro Zuleta “no tiene muchas veces relación alguna con el pensamiento del estudiante, en otros términos, no se lo respeta, ni se lo reconoce como un pensador y el niño es un pensador.” En otras palabras la escuela chilena reprime a los estudiantes y lo ponen a memorizar, repetir y aprender cosas que no le interesan y que él no puede investigar, es decir, lo que dice en la en La Constitución no se cumple pues con este análisis confirmamos que la educación chilena no educa porque no permite el desarrollo de la persona en las distintas etapas de su vida.

La educación actual está concebida para que el individuo rinda cuenta sobre los resultados del saber y no para que acceda a pensar en los procesos que lo condujeron a ese saber o a los resultados de ese saber. En esto se ve ese apartheid mencionado en el titulo este capítulo en donde el sistema educacional chileno tiene dividida la educación según los estratos socioeconómicos de los padres de los estudiantes encubierta bajo la otra parte de la Ley de del derecho a la educación en donde se señala “[…] Los padres tienen el derecho preferente y el deber de educar a sus hijos.” Y en el Punto 11 del mismo Capítulo III de la Constitución dice “[…] Los padres tienen el derecho de escoger el establecimiento de enseñanza para sus hijos.”

Prácticamente con estas dos citas extraídas de la misma Constitución podemos verificar que el Estado chileno está utilizando el modelo fundamentalista del mercado, convirtiendo la educación en un bien de consumo, como señalo en una entrevista a CNN el Presidente Piñera, esto explicaría los distintos tipos de instituciones escolares según el tipo de financiamiento, que son los colegios particulares, los subvencionados compartido y los municipales.

Donde se ven estas diferencias notablemente es a la hora de ver los resultados SIMCE y P.S.U de los distintos colegios, donde los mayores puntajes en ambas pruebas lo concentran los colegios particulares pagados y los subvencionados que tienen un sistema de selección de los estudiantes que ingresan a sus colegios. Los resultados más bajos se concentran en los colegios municipales que son los colegios que no hacen distinción en sus alumnos recibiendo de todo tipo de estudiantes donde la mayoría están en riesgo social. Esto esclarece el apartheid que se ha ido desarrollando después de la década del ochenta cuando la educación se convirtió en parte del sistema neoliberal del mercado.

Nelson Mandela una vez dijo “La manera en una nación trata a sus niños, refleja el alma de esa nación” relacionando lo que dijo Mandela y lo que hemos venido desarrollando en los párrafos anteriores podemos ver que hemos tratado muy mal a nuestros niños segregándolos educativamente, coartándole las posibilidades de surgir como personas libres y felices. Según los datos del informe PISA en el año 2009 Chile posee un poco más del 20% de estudiantes en escuelas socioculturalmente integradas, estamos muy por debajo de la media de América Latina que posee alrededor de un 38% y a una distancia sideral de la media de los países pertenecientes a la OCDE  y de los de altos puntajes que respectivamente poseen un 45% y 58%.

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