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CAPITULO I

EL PROBLEMA

El problema de investigación es una pregunta o interrogante sobre algo que no se sabe o se desconoce y cuya solución es la respuesta o el nuevo conocimiento obtenido mediante el proceso investigativo. (Bernal, 2000) Un problema de investigación no sólo se origina de situaciones negativas, éste también puede surgir de hechos positivos.

La enfermería es un campo el cual ha ido evolucionado a través de los años, por ello en la actualidad para su práctica no solo se necesita tener los conocimientos necesarios, si no también se requiere vocación y buena voluntad. El principal objetivo de esta profesión es el apoyar a las personas para poder resolver o sobrellevar problemas que se interponen y que influyen en la calidad de vida de cada uno de ellos.

Po lo tanto, el rol que juega un enfermero/a es de cuidar ayudar y mantener la salud comprendiendo al propio paciente en su dolor, respetando cada creencia que tiene el paciente. Aceptando al otro como es sin distinción de raza, sexo y religión. De esta forma podemos lograr convivir tomando en cuenta que para que haya convivencia debemos comunicarnos con el paciente y la atención que le brindemos al mismo como enfermeras es parte de la convivencia.

La interacción o comunicación enfermera-paciente ocupa un lugar prioritario en el ejercicio de la práctica profesional de las enfermeras, ya que es el eje articulador de los cuidados, tanto asistenciales, como tecnológicos, dirigidos a la oferta del cuidado de enfermería de calidad.

Al respecto la enfermera es la persona que establece las relaciones afectivas y de esperanza más estrecha con los pacientes, el cuidado se desarrolla en el ambiente de lo impersonal e implica concretizaciones de compasión, aceptación, empatía y respeto.

En este orden de ideas diversos países del mundo han realizado investigaciones sobre la atención que brindan la enfermera y enfermero como en buscama y otros (2002:5); señalan que las relaciones interpersonales que se dan entre el personal de enfermería y el paciente, en el proceso de atención, son muy complejas y están influenciadas por varias situaciones, las cuales engloban la convivencia entre estos.

Con la globalización que se vive en el mundo actual y los constantes cambios que han originado las enfermeras (os) tienen como misión proporcionar cuidados de salud al usuario que acuden a las emergencias de los hospitales de calidad fundada en una base sólida de conocimientos y habilidades para brindar una atención de calidad.

En este sentido la Organización Mundial de la Salud (OMS, 2005:5) sintetiza que gran parte de los hombres y mujeres del mundo actual, esta centrada en la información adecuada acerca de los diversos trastornos y enfermedades del usuario de los servicios públicos de salud, tomándose en cuenta las necesidades del ser humano y los factores inmersos en estas, tanto internos (individual) como externos (ambiental).

Con base a lo anterior, la Organización Mundial Panamericana de la Salud (OPS, 2006:8) comenzó a promover entre los países de Latinoamérica, la propuesta de reorientación de la educación permanente del personal de la salud, evaluación de las competencias y desempeño, se incluyen dentro de esta propuesta como vía para obtener información respecto a la atención y convivencia enfermera- paciente.

De la misma forma el Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela busca estrategias para solventar la situación dada, implementando programas sociales que generen consecuencias positivas en el sector salud, tal es el caso del programa Barrio Adentro, donde sus pilares fundamentales están en el reordenamiento del espacio geográfico con relación a la forma de gerenciar la salud.

En este mismo orden de ideas debemos tomar en cuenta que el estado busca llegar al usuario creando infraestructuras más cercanas al individuo, como es el caso de los módulos de atención comunitaria integrales, los cuales cuentan con un equipo de salud formando principalmente por el médico, el personal de enfermería, los odontólogos, bioanalistas y el personal medico quirúrgico.

Ya mencionado lo anterior, podemos decir que es necesario que nosotros los enfermeros estemos siempre conscientes de que todo lo que realicemos en torno a un paciente, lo cual debe ser a través de un ejercicio de valores, donde persistentemente impliquemos conductas y hábitos de apoyo moral. Si un enfermero posee estas virtudes, se le facilitara la convivencia con los enfermos, ya que esta es de gran importancia en el proceso de salud-enfermedad.

Así como nos lo indican muchas de las teorías y modelos de atención de enfermería, ejemplo de esto cito el caso de Florence Nightingale (1979), que gracias a su experiencia con soldados enfermos y heridos durante la Guerra de Crimea, formuló ideas y valores que contribuyeron a tener una filosofía más sólida y humana de la enfermería.

Por lo cual entre lo más destacado de su obra es relevante subrayar que Nightingale basó sus ideas en los valores individuales sociales y profesionales y sus influencias más significativas fueron la educación, la observación y la experiencia directa. Dicho de otro modo, desde mi punto de vista, es importante que los enfermeros tomemos en cuenta las bases de la filosofía de Nightingale, para dar al paciente el apoyo y bienestar que necesita en un ambiente saludable para su buena recuperación.

El ingreso de un paciente a la unidad de emergencias implica un cambio en el bienestar emocional, acompañado del estado de situación de salud y una pérdida parcial de autonomía, estando bajo la responsabilidad del personal de salud. Generando al paciente una necesidad de comunicarse y sentirse cómodo en el lugar donde él se encuentra y tener una buena convivencia con el personal de enfermería siendo este el más cercano.

Todas estas circunstancias señaladas anteriormente, se evidencian en el hospital II Dr. Luís Razetti

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