El Erotismo

El erotismo se define como un estado de excitación sexual, en el que se desea, se anhela y tiende permanente hacia algo, es buscar una expansión. Otros la definen como la capacidad de un individuo para el goce sexual, como la forma de expresión de la sexualidad separada de la reproducción donde se establece un vínculo afectivo-sensual con otro ser, que se entiende como la construcción y resultado de una relación interpersonal con afinidad cultural. Este erotismo es motivado por la atracción, que es un eje central para que la persona exprese su sexualidad con la otra, esto no solo se involucra de una forma sexual, también de forma afectivo amorosa y donde la persona es vista desde sus aspectos fenotípicos y externos, y por ende se toma la elección hacia la persona atraída.

Esta vivencia erótica es común entre el los mujeres y los varones debido a que se desarrolla bajo vivencias emocionales compartidas y responde a necesidades básicas, sin embargo se expresa con lenguajes emocionales distintos, con diferentes formas e intensidades de expresarse, con un diferente significado para cada uno.

Dentro del erotismo se involucran distintos elementos como el juego, las palabras, las miradas, las caricias, la comunicación, los recuerdos, la imaginación y cualquier otro aspecto que mejore y enriquezca la relación, es por ello que aunque el sexo sea el mismo, el erotismo tiene distintas y diversas formas de manifestarse.

Las personas adultas poseen diferentes formas de manifestar su erotismo: busca su propio placer a través de otra persona, recrea cuando se presentan relaciones casuales, cuando se relaciona sin amor o compromiso, cuando manifiesta su amor pasión o también cuando se compromete en pareja para formar un proyecto de vida.

La diferencia en la expresión del erotismo del hombre y la mujer se debe a que la forma en la que viven los hombres y las mujeres son distintas, ya que cada uno actúa con diferentes valores y roles que tienen en la sociedad.

A veces las mujeres ante una consulta psicosexológica, no reconocen las sensaciones al no tener las esa fuente de placer de forma clara lo que nos da a entender que las mujeres desconocen su universo erótico, inclusive lo niegan o simulan al del varón.

Sin embargo esta exploración debe comenzar con hacer énfasis en el derecho de toda mujer de auto reconocerse y la apropiación de todo su cuerpo; A través de un reconocimiento sensorial.

Sin embargo ante el varón al ser diferente a la mujer condiciona un estilo, una actitud y una vivencia diferente. El énfasis de la masculinidad favorece y se mantiene al dar un valor a una parte genital ante la persona.

En los varones el hecho de reconocer sus sensaciones mejora que percibir completamente su cuerpo y esto mejora su forma de relacionarse en una forma no estrictamente sexual.

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