Terapias alternativas y complementarias

Introducción.

 El presente informe tratara el tema sobre las terapias alternativas o complementarias, y a pesar de que se usan como sinónimos estos dependen del contexto, ya que se entiende como terapias complementarias las que como su nombre lo indica “complementan” a la medicina convencional, por otro lado las terapias alternativas es la que se administra o practica en vez de un determinado tratamiento farmacológico habitual.

Este tipo de terapias han sido objeto de atención en las últimas décadas debido a la gran aceptación que han tenido en la población, que por lo general recurren a ellas buscando un tratamiento más completo a sus problemas de salud. Algunas de las características de estas terapias que podrían explicar en parte su creciente aprobación, es que se enfocan hacia tratamientos individuales, asumen a la persona en su integridad considerada como mente-cuerpo-espíritu, además de  promover el autocuidado y la responsabilidad del individuo por su salud.

La organización mundial de la salud (OMS) por su parte, atribuye su extendido uso a la preocupación de la población por los efectos adversos de los medicamentos químicos en los tratamientos de enfermedades crónicas, que han ido en aumento en las últimas décadas. Además de ser de mayor accesibilidad y asequibilidad en varios países en desarrollo.

Por lo cual el objetivo de este trabajo es discutir sobre si estas terapias son más eficaces siendo complementarias a los tratamientos convencionales o alternativos a ellos, a través de un análisis bibliográfico de algunas terapias y sus posibles estudios médicos y/o científicos sobre sus beneficios o daños de ellos en pacientes.

La homeopatía.

Descubierta en el siglo XVIII, por las investigaciones y experimentos del Doctor Hahnemann, la Homeopatía se basa en la ley de similitud: "Toda substancia capaz de provocar síntomas patológicos en un individuo sano, es capaz, a dosis infinitesimales, de tratar esos síntomas en un individuo enfermo".

Este conocimiento de la similitud entre el medicamento y la enfermedad, justifica el objetivo específico de la Homeopatía, de individualizar al enfermo y su tratamiento, utilizando las capacidades de reacción de cada persona, por lo que se dice que “la homeopatía trata al enfermo no a la enfermedad”

Empleando estos principios, la Homeopatía usa sustancias orgánicas, inorgánicas y vegetales para estimular las defensas inmunitarias del cuerpo. De este modo, el organismo puede movilizar sus defensas, en contra de los agentes patógenos, y recobrar su equilibrio. Además el tratamiento con homeopatía no presenta efectos adversos, lo que le da una ventaja en relación a otras terapias.

Las enfermedades tratadas con esta terapia son muy variadas:

• Enfermedades agudas e infecciones

Es bastante efectiva  en infecciones, bacterianas, víricas, parásitas, micóticas, como incluye los problemas recurrentes, como infecciones de oídos, bronquitis, infecciones de la vejiga entre otras.

También es eficaz en casos de heridas y situaciones de primeros auxilios, como quemaduras, mordeduras de insectos, intoxicaciones alimentarias, erupciones cutáneas y dolor de muelas.

• Enfermedades crónicas

Como migrañas, síndrome de colon irritable, asma, alergias, úlceras, problemas cutáneos, trastornos menstruales, síntomas menopáusicos y sinusitis crónica.

• Cáncer

La homeopatía no logra tratar el cáncer con eficacia, debido a que generalmente ya se han producido daños graves cuando se establece el diagnóstico y la vitalidad del enfermo es bastante baja. Pero se usa frecuentemente para calmar los síntomas asociados con la quimioterapia y el dolor.

• Presión sanguínea alta

Esta terapia consigue bajar la hipertensión en un tercio de los casos, aunque no tiene el mismo efecto cuando el paciente lleva mucho tiempo con la enfermedad.

En relación al colesterol alto en la sangre se ha observado que no suele responder sólo al tratamiento homeopático.

• Problemas mentales y emocionales

Los problemas mentales y emocionales, como depresión, trastornos de ansiedad, síndrome premenstrual, responden bien a la homeopatía. No así otros problemas más serios, como la enfermedad maniaco-depresiva, o esquizofrenia  los cuales los debe tratar un profesional experimentado.

Esta terapia tiene una alta aceptación en países desarrollados como Alemania, Francia y Bélgica donde es aceptada como una medicina complementaria, aun así sigue teniendo seguidores y detractores. Dado que hay estudios en los cuales se ve la homeopatía como un efecto placebo; es decir como una sugestión del paciente a un tipo de tratamiento. Pero también hay otras investigaciones donde se mostró que la terapia homeopática es efectiva y además hay profesionales médicos que avalan su uso en pacientes con determinadas enfermedades.

Hidroterapia.

Ciencia de procedimientos capaces de modificar el estado del organismo y que emplea el agua como intermediario directo. Su aplicación está sometida a indicaciones precisas, debido a que puede tener resultados positivos o tambien de carácter negativo si no se trata con cuidado, puede tener repercusiones en el paciente si no aplica con un previo conocimiento. Se toma como un "sistema de curación natural", en el cual el agua es utilizada para tratar, prevenir, o curar cualquier problema de salud o lesiones.

Las modalidades de esta terapia son: Lavados, Afusiones, Compresas y fomentos, Baños, Duchas, Chorros, Baños de remolino, Masaje subacuático, Tanques, Piscina, Natación

Los efectos fisiológicos  del agua a temperaturas calientes son:

•        Analgesia: disminución de la contractura muscular y la liberación de encefalinas y endorfinas.

•        Aumento de la temperatura y la vasodilatación capilar: Si se introduce la piel en agua caliente la temperatura se eleva  entre 0.5° y 3° C, y se produce un aumento en todas las funciones orgánicas por sobrecalentamiento.

•        Efecto sedante: las aplicaciones muy calientes y cortas puedan provocar insomnio y las aplicaciones calientes prolongadas pueden provocar cansancio o fatiga. Todo esto gracias a la acción del calor sobre las terminaciones nerviosas.

•        Efecto antiespasmódico: Las aplicaciones de larga duración entre 36 y 38 grados C disminuyen el tono, combaten la contractura y la fatiga muscular.

•        Efectos sobre el tejido conjuntivo: producen un aumento en la elasticidad y disminuye la viscocidad.

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