¿que Tan Dificil Es Enseñar Ciencia?

EL NIÑO Y LA CIENCIA

¿Qué tan difícil es enseñar ciencia?

En este ensayo me propongo explicar, pero sobre todo comprender cómo es qué la ciencia puede ser enseñada en niveles educativos primarios. En este tema nos encontraremos diversos conflictos al enseñar, pero no sólo enseñar es el problema, más que nada es que los niños comprendan realmente el tema e desarrollar y que obtengan conocimientos que enriquezcan su cultura educativa. Luego entonces, el objetivo será descubrir diversas técnicas que se emplean para poder modificar la manera en que comúnmente aprendemos ciencia por técnicas que sean mucho más sencillas pero ricas en información.

Un niño piensa y por consecuencia tiene conocimientos que él cree son los correctos; es decir, existe un pensamiento infantil por lo tanto existe a su vez un pensamiento científico infantil. Pero, qué es un pensamiento científico, el pensar es una actividad mental inherente al ser humano que tiene variaciones que van desde lo superficial hasta lo profundo, desde lo cotidiano hasta lo científico. El pensamiento científico es objetivo, es decir tiene total apego a los hechos del conocimiento tal y como se presentan en la realidad, es racional, debe de ser factico, trascendente, analítico, claro, preciso y sobre todo útil.

La ciencia no es conocer la verdad si no pretender conocerla, pero esto no es tarea fácil por tanto debemos ayudar a los niños a darse cuenta de que el conocimiento que ellos producen, que las teorías que construyen sobre la ciencia deben ser practicadas y después sean comprobadas. Es decir, las pongan a prueba para dar una explicación a la realidad que los rodea. Un niño no puede entender realidades complejas es por eso que se debe intentar explicar ciertas materias (en este caso la ciencia) de forma empírica, que quiero decir con esto, que ellos mismo indaguen y descubran ciertos fenómenos naturales, que explicados con teorías y términos confusos no se logren entender.

La escuela en lugar de ser muchas veces el lugar en donde el niño aprenda cosas buenas e interesantes se vuelve una obligación rutinaria a la cual deben asistir y aprender todo lo que salga de la boca del profesor como si fuera una ley, sin llegar a comprender nada realmente. Es por eso que fuera de ella siguen construyendo su propio conocimiento fuera del contexto de la escuela resolviendo sus curiosidades.

Uno de los problema principales radica en qué como lo mencione, los niños aprenden todo lo que dice el maestro (sin comprender la mayoría de las veces), pero ¿el maestro siempre estará en lo correcto?; lamentablemente y bajo los estudios que se han realizado nos hemos dado cuenta qué no, los maestros llegan a tener muchísimos errores no solo en la forma en que enseñan, si no en los conocimientos que transmiten, pero su más grande error es creer que están en lo correcto, el no aceptar que sabe poco y aun más grave está que transmita a sus alumnos conceptos científicos complejos como si fueran simples siendo que ni él ha comprendido, sin darse cuenta que provoca en el niño daños irreparables para sus conocimientos. El enseñar cosas que no se saben correctamente es uno de los problemas más serios, especialmente en el campo de las ciencias.

Enseñar a temprana edad conceptos que los mismos especialistas aún no saben exactamente cómo funciona, provoca que los niños tomen el tema como algo aburrido y tedioso, perdiendo el interés al ser algo tan complejo. El proponerles a los niños conceptos confusos como si fueran simples no funciona ya que los pequeños no logran razonarlo completamente, al ser conceptos sumamente difíciles para su madurez, es por eso que si logran aprendérselos es para pasar la materia pero, ese conocimiento no lo logran aplicar en otros contextos.

Es por eso que es de capital importancia estimular a los niños a que busquen sus propias teorías científicas y así mismo partir de los conocimientos previos de ellos. El niño tiende a ser muy curioso por naturaleza, es por eso que cuando en clase se planten temas de los cuales se llegue a tener dudas pueden existir dos caminos: que el maestro la responda siendo que la sepa y sea correcta, aunque en este caso cierre toda posibilidad a que ellos descubran la respuesta o en oposición dejarlos que ellos mismos se respondan, abriendo todas las puertas al conocimiento divertido e interesante.

En el momento en que el niño experimenta en el aula se vuelve un pequeño científico,

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