Derecho penal Incaico

1. Contexto Histórico:

Gracias al estudio realizado por los cronistas, tenemos un amplio conocimiento sobre cómo se desarrolló la sociedad incaica en diferentes aspectos (al margen de los intereses que se les atribuyen a estas personas que se encargaron de anotar este tipo de sucesos), entre sus testimonios sobre la organización y régimen de la sociedad incaica, estaba presente el desarrollo del sistema de justicia, los delitos que se condenaban y las sanciones que se ejecutaban a raíz de aquellas faltas. Empero, así como se castigaba a las personas que infringían las normas impuestas por el estado, también estaban aquellos que de diferentes maneras ejecutaban actos “heroicos” a favor de la sociedad y de su imperio, debido a su acción el Inca les premiaba con puestos de importancia dentro del estatus social privilegiado, más conocido como la nobleza, mientras que por el lado opuesto, a las personas que cometían infracciones o ejecutaban malos actos se les sancionaban con castigos de tipo intimidatorio, los cuales cumplían una finalidad de carácter ejemplar-moralizante, motivo por el cual sus penas y sanciones eran severas, radicales e inflexibles, muchas de ellas iban contra la salud, integridad, bienestar y se llegaba a tal extremo que atentaban contra la vida del ciudadano.

Como ya lo comentamos anteriormente, el líder del Estado era el Inca, quien para el pueblo era como un "dios", de manera que las leyes que dictaba tenían un carácter sumamente religioso y obligatorio, a las cuales eran sometidos todos los habitantes de su territorio, de esta forma se le imponía al ayllu. Cabe resaltar que el Inca por el poder que poseía, lograba la conquista de muchos pueblos usando diferentes maneras, desde formas muy violentas, hasta aquellas que iban solo por el camino del diálogo (esto variaba dependiendo de la estrategia del Inca a cargo). El origen divino de las leyes hacía que las penas, castigos y sanciones fueran de carácter público, puesto que todo esto era en favor para la sociedad y que este tipo de consecuencias, entre los incas, adquirían un carácter de intimidatorias. El cronista  (Morúa, como se citó en Nuñez, 2005) hacía referencia a que “el miedo los hacía ser derechas”, por ello, antes de cometer un acto que iba contra la normativa que ellos conocían a la perfección, lo pensaban dos veces para evitar así las consecuencias. Tal vez, aquí radica el sustancial prestigio de su buena reputación como sociedad en muchos aspectos.

En la sociedad incaica, todo el sistema de castigo fue ampliamente desarrollado y distinguido por la dureza, intimidación y ejercicio monopólico por parte del Estado. Además, de que no había espacio al “Beneficio de la duda” ya que asumían los fallos de manera inmediata, efectuando las consecuencias de manera sucinta. Asimismo, la vida económica y la privada también estaban estrictamente reguladas, ya que cada delito era castigado con un fin específico, el cual era dar el ejemplo de lo que podría suceder si se cometía tal falta por cualquier otro ciudadano, incentivando de esa manera a la población a tomar un tipo de "conciencia" para pensar bien las cosas antes de consumar cualquier acto, evitando de esta manera que las diversas situaciones se salieran de control para el Estado, generando así una desintegración del sistema político, económico e incluso social. Todo esto permitió mantener el papel de los incas como personificación del dios que da orden a la vida de todos.

1. Organización y Control en Estado Incaico:

Comenzaremos explicando que gracias a  la evidencia de los restos arqueológicos, se ha establecido que las culturas andinas en sus comienzos eran nómadas con una organización social y política fundamentada en el patriarcado, la cual se sustentaba con las actividades económicas básicas, como: la caza, la pesca y la recolección de productos agrestes, encontrándose estructurado por regulaciones simples que a lo largo de los años fueron desarrollándose y complejizando. Debido al cúmulo de conocimientos de prácticas, sobre todo de experiencia que irían adquiriendo y las que se estuvieron transmitiendo de manera oral durante años, estas evolucionan llegando a tener, por ejemplo, una avanzada técnica para aspectos como la agricultura, contabilidad, textilería, etc.

Estos conocimientos fueron desarrollándose de manera admirable, modificando técnicas heredadas con la finalidad de ser más prácticas y que puedan llegar a usar eso a su propio beneficio. Todo ello, los impulsó a aumentar considerablemente su población y con ello la complejidad de su estructura social, dando paso a la formación de comunidades, pueblos, señoríos étnicos o de tribus que uniéndose a otros similares, ya sea de forma violenta o con alianzas, darían origen al Estado que en su esencia no significaba una suma de individuos, como la apreciación de nuestro tiempo, sino más bien le daban más centralidad al tema de familias unidas por la  misma idea de una descendencia en común, como afirmaba Henry Maine en su obra “El Derecho Antiguo”, asegura que las «antiguas sociedades se miraban como procedentes de un mismo tronco, y no comprenden que la unión política tuviese otro fundamento»

Con la producción de alimentos que ellos ejecutaban de forma colectiva, llegan a tener la misma finalidad de poder preservar alimentos para tiempos difíciles, esto hizo que ellos aprendieran de manera empírica nuevas técnicas, impulsando de esta forma que cambiaran de un estilo de nómade a sedentario. Esto les permite aprender a distribuir y diferenciar lo que era necesario para “subsistir” y lo que les “sobraba”, en tal sentido que este último lo donaban para festividades colectivas, generando así un ambiente colectivo, donde se prioriza el bien común. En este punto se basan muchas doctrinas y leyes de aquellos tiempos.

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